Clásicos nikochianos: THE SOFT PARADE (1969)

The Doors – “The Soft Parade” (1969): 01.- Tell all the people/ 02.- Touch me/ 03.- Shaman blues/ 04.- Do it/ 05.- Easy ride/ 06.- Wild child/ 07.- Running blue/ 08.- Wishful sinful/ 09.- The soft parade.

A Jim se le ama o se le odia. Particularmente adoro a Morrison y a los Doors. Soy fan, fan. De la cabeza a los pies. Del corazón a lo más profundo de mi alma. Si me paro a pensar seguramente es de los cinco grupos que tengo más material (y eso que tampoco tienen muchos discos), de los que más veces he escuchado, a los que con regularidad recurro y desde luego de los que me sé todas sus canciones de carrerilla. No tienen porqué ser los mejores, la verdad es que no lo son pero yo conecto con su música, con su esencia, con su aura mística. Tanto los fans como los no fans coinciden en que su debut “The Doors” junto a “Stranges days”, ambos de 1967 que podrían haber sido un disco doble inigualable, junto a su despedida en 1971 con “L.A. Woman” son sus mejores trabajos pero ojo! Que estos pájaros no tienen disco malo, o acaso “Waiting for the sun” (68) y “Morrison Hotel” (70) no son joyas indispensables del rock? Ah! Y qué me decís de “The soft parade”? Qué no lo tenéis en cuenta? Qué es regulero! Qué es flojete flojete? No! Y rotundamente no! Soy un enamorado de este disco, de sus nuevas sonoridades, de sus canciones rotundas y ensoñadoras, de esos vientos que fluyen de amagatotis, con vergüenza, como pidiendo disculpas. Y Jim, cantando mejor que nunca, pero distanciándose del grupo a pasos agigantados. Seguramente tiene las canciones que más suelo tararear de los Doors, y ahora, como no, vamos a por la mejor parte del viaje, este es el viaje, la mejor parte, realmente me gusta este “The Soft parade”.

En la edición del no sé cuantos aniversario se arregla el sonido, se remasteriza, se remezcla o qué sé yo qué cojones han hecho pero los arreglos de metales se notan un cojón y la voz de Morrison pierde algo de protagonismo si es que se puede y suena más limpia si cabe. Desde “Tell all the people” ya notamos esto que digo y la verdad no parecen los Doors, o sí? O no? Cojonuda canción pero que queda en segundo plano ante la mítica “Touch me” y la excelentísima “Shaman blues”. La primera es una de esas canciones que quedan en la historia, un hit demoledor, radiable a tope y que tiene esa frase enamoradiza final que quita el sentío. Lo del blues del Shaman es simplemente genial. Esta canción es una de esas que tarareo y recito a veces cuando camino solo o espero el bus, forma parte de mí, de mi adolescencia, de mi vida. Es mía, qué cojones. Sin duda es un disco que coquetea con nuevos sonidos, “Do it” y “Easy ride” son una prueba de ello, dos canciones siempre olvidadas pero muy reivindicables. Qué decir de “Wild child”? pues sólo una cosa: "An ancient rulage of grains, and the trees of the night. Ha, ha, ha, ha!". “Runnin blue” es un caramelito y “Wishful Singul” acaricia mi alma y me relaja. Finalmente llega el tema que da nombre al disco, uno de esos supertemas de Jim que van y bien, que cambian de ritmo, que enloquecen, que se relajan para luego explotarte en los oídos, uno de esos supertemas de casi diez minutos. Un temazo, en un discazo, de un grupazo le pese a quién le pese. Un puto clasicazo nikochiano.