GEORGE HARRISON
DARK HORSE (1974)
DARK HORSE

Por culpa de ciertos individuos de la blogosfera he quedado infectado sin remedio por el virus de los Waterboys. Se veía venir porque siempre llego tarde a todos sitios. Hubiese ido al concierto? Pues por ganas sí aunque con lo de mi reciente nueva paternidad me he perdido este mes demasiados eventos deseados como por ejemplo Josh Ritter, Pokey Lafarge y ahora añado a los Waterboys. Tenía yo resabido el “Fisherman’s Blues” desde hace cantidad de años pero para ser sincero lo tenía cogiendo polvo en el estante. Tiraba normalmente de una compilación que me compré por cuatro duros para el coche y me quedaba tan fresco. Pero claro, me llegan dos críticas de dicho disco y me pica el gusanillo. El otro día mientras me tomaba el cafelito en mi nueva taza marciana me pongo el “Fisherman” y joder, quedo alucinado one more time. Los maestros culpables de que rememore sensaciones antiguas y recuerdos pasados son Chals y Johnny JJ con sus grandísimas críticas. También tengo que deciros que recordaba tener el “Fisherman” original, concretamente en vinilo pero joder, no lo encuentro. Me lo compré en una tiendecilla de barrio por 3 euros hará como cinco años y tenía si no recuerdo mal la última canción algo rallada. Tal vez lo regalé. No lo sé. Hoy paseando por las tienduchas empujando el carrito de la nueva marciana veo un pack por 6 euros de los Waterboys con el “Fisherman” y “This is the Sea”. OOOH! Qué gusto me ha dado pagarlo además con monedas de 50, 20 y 10 céntimos…. Ja, ja… He roto el cerdito hucha!!! Si el “Fisherman” es bueno el “Sea” es la repanocha en verso. He quedado waterboyzado para lo que queda de año, y además va el maestro de la Land y me pone los dientes de punta con la crítica del concierto…. Ostias, qué tonto soy, no se me pueden escapar estas ocasiones de ver a los buenos! No volverá a pasar! Os dejo con ese temarro que es Fisherman’s blues….  


La evolución de un grupo de rock normalmente suele dejar por el camino a muchos fans que en sus comienzos los defendían con uñas y dientes, se ganan otros tantos pero los nuevos no son como los antiguos. Ni de coña. A veces dicha evolución sirve para darnos cuenta de lo buenos que eran entonces y en la medianía en la que ahora se han convertido. Otras veces se olvidan épocas pasadas y mejores, y el populacho se queda con su última época bajando de importancia, ninguneando al grupo o simplemente quedándose con lo que los miembros van haciendo en solitario que suele ser ni más ni menos que enguarrar la obra del grupo madre y expoliar todo lo que puedan del material pasado del mismo. De esa guisa tenemos a Queen, vale que el líder indiscutible dejó esta vida pero bueno, desde los ochenta realmente, disco bueno bueno, no tienen, sí hits, pero nada de notable para arriba. Este hecho provoca que la gente tenga en mente la época del ochenta en adelante cuando sus hits ochenteros impulsados por los videoclips en MTV dominaban el cotarro y se grababan en el cerebelo del personal. Ninguno de aquellos hits le llega a la suela de los zapatos a una canción de relleno de los setenta del mismo grupo pero la gente ignora eso. Yo soy muy de Queen, defiendo su etapa con uñas y dientes hasta el 79, luego me cuesta, y lo que hacen ahora los palomos que quedan vivos me da una mezcla de vergüenza, rabia y asco. No vengo a hablaros de Queen, sí de otros tres grupos que me empezaron gustando y mucho pero que en algún momento de su carrera se torcieron, me hicieron recular, sospechar que algo no andaba bien, dejar de escucharlos, avergonzarme por haberme gustado y ahora prácticamente ni quiero hablar de ellos, no suelo escucharlos a pesar de tener toda o casi toda su discografía en casa. Vamos pues con ese triplete que pudo tocar la gloria y al final pisó una mierda.

1.- “U2”: exacto! No podían ser otros. Son el grupo que todos teníais en mente. Bono y compañía me dieron muchos días de gloria pero muchos. Del 80 al 91 su obra es magnífica destacando claro está “War” (83), “The Joshua Tree” (87) y “Achtung Baby” (91). Es este último disco el que rompe la baraja. Para mí sin duda su mejor disco pero esto les hizo más daño que nada, pues había nuevos sonidos, más modernos, menos clásicos y entonces se les fue la pinza con la “épica” y el bailoteo. Dos factores que aparecen mucho en este desastre que acaba hundiendo a un grupo. Lo que viene de aquí en adelante es por decirlo de modo correcto puro pastiche para descerebrados de las listas de éxitos. Pura pose, puro comercio. Llegando al punto de darme verdadero asco ver a cualquiera del grupo en cualquier sitio. Una pena. Consiguieron que no pinche ni el greatest hits.

2.- “Coldplay”: los herederos. Ah! Sí, hubo un tiempo que yo tenía muchas esperanzas en el grupo de Chris Martin. Conseguí aquel EP “Blue Room” y quedé prendando de él. Salió “Parachutes” y lo disfrute como nunca. Tal vez uno de los mejores discos de final/principio del milenio. Cuando llegó “A rush of blood to the head” (02) se me podría considerar muy muy fan. Los pude ver en directo y me gustaron mucho. Estaban en todos los saraos, todo el mundo hablaba de ellos y eso a mí me daba mala espina. En 2005 llegaba a mis manos “X&Y” que bajaba mucho el listón, era demasiado comercial, todas sus canciones gancho eran una trampa para ganar dinero y fama fácil, y las baladas eran para adolescentes tontacas. Aguanté el tipo, los volví a ver en directo pero ya comenzaba a dolerme la barriga. Y llegó entonces el disco “épico” con toques bailables. Llegó esa gran mierda que es “Viva la vida”. Y dejaron de interesarme. Me repugnan. Ya lo de “Mylo Xyloto” ni lo escuché.

3.- “Arcade Fire”: sí, no pongáis esa cara. Me estoy adelantando algo a los acontecimientos pero su último disco, ese “Reflektor” me huele a artefacto épico/bailongo gafapastero y las diarreas van y vienen. Horrendo. Dicen que si le das muchas escuchas al final te atrapa. Cuantas? Mil? Claro, si comes  mierda mil veces al final hasta le puedes coger el gusto. Ya sé que la comparación es muy bestia, y sí, a lo mejor no es tan malo pero yo sólo he podido escucharlo una vez y media, no lo haré más. A mí, su “Funeral” (04) me parece un lujo a pesar que el siguiente aquel “Neon Bible” que todo el mundo aplaudió a mí me dejó un poco frío para recuperarme y hacerme disfrutar mucho con “The Suburbs”, un discazo. Ahora es ver a la pareja visible del grupo y me entra una jaqueca descomunal.

Y nada más, estos tres grupos me gustaron mucho, no lo niego, tengo casi todos sus discos pero ya no puedo con ellos. No señor. Agotaron mi paciencia. Y a vosotros no os ha pasado alguna vez algo igual, cuales son los grupos de los que os avergonzáis o aquellos que os han decepcionado con el paso de los años? Responded terrícolas!

No son Pretenders precisamente un grupo que me apasione, no tienen en su haber ningún disco de esos que me enamore pero sí que tienen un buen puñado de canciones disfrutables que rejuntadas todas ellas en una compilación quedan la mar de resultonas. Tampoco considero a Chrissie Hynde una gran dama del rock pero es indudable que tiene talento, es lista y sabe lo que quiere y como lo quiere cosa a la que todo el mundo no llega. Digo lo de los LPs así a la brava, claro que si tengo que elegir alguno de ellos su debut es más que notable, aquel “Pretenders” de 1980 y “Learning to Crawl” tampoco se queda manco pero como digo yo soy más de compilación con los Pretenders y aquel “The Singles” (87), sí aquel blanquito y negro, es una delicia que ha sonado infinidad de veces en el hogar nikochiano. No le quitaremos méritos a la zagala porque “Brass in Pocket”, “Kid”, “Back on the Chain Gang”, “Middle of the Road” y “Don’t get me wrong” forman parte del cancionero de mi vida pero mi misoginia rocanrolera me puede y siempre dejo a Chrissie en la sombra. Hay otras damas que me gustan más y que creo personalmente que tiene mucho más talento que ella, eso sí, a lista no le gana ni el Tato.


La carrera de Hynde está salpicada por los cambios en la formación de The Pretenders (normalmente más por muertes que por abandonos) pero también por sus relaciones sentimentales. Las más sonadas claro está fueron la que mantuvo durante cuatro años (del 80 al 84) con Ray Davies mientras éste permanecía casado con su mujer de toda la vida y la que seguidamente mantuvo con Jim Kerr líder de los Simple Minds. De ambas relaciones salió una hija, y además de la relación con Ray, Chrissie obtuvo más de un regalito en forma de canción y a veces inspiración para hablar de su tórrida relación como en “The Adultress, canción que abre su segundo disco. Pero no vengo a hablaros de esta canción sino de la versión que grabó del “Stop Your Sobbing” de Ray, aquella bellísima canción de los Kinks que apareció en su álbum debut de 1964 “Kinks”. Una maravilla de canción que Chrissie cogió prestada o robada mientras Ray dormía a su lado y que le sirvió para embellecer y hacer grande su primer disco con los Pretenders. Os dejo con ella, una canción redonda de principio a fin. 

RORY GALLAGHER
CALLING CARD (1976)
CALLING CARD


Parece mentira que el extraordinario largometraje de Pixar “Monsters Inc.” tenga ya la nada despreciable edad de doce años. Sí, del 2001 es esta joya de Pixar. Otra de tantas pensaréis, pues antes que ésta están las dos obras maestras de "Toy Story" y por el medio la ninguneada “Bichos” (98) pero la verdad es que “Monstruos SA” es una de las mejores historias jamás creadas por la compañía californiana. La tenía un servidor algo ninguneada pero estos días ha sido recuperada gracias a mi hija Arlet. No solamente recuperada sino también visionada hasta la extenuación, de hecho mi hija se sabe casi todos los diálogos de Mike Wazowski. Me descojono qué queréis que os diga. Pero no me canso de verla una y otra vez, primero porque ver a Arlet troncharse con algún gag me hace feliz, esa risa sin vergüenza, pura y fácil, es la felicidad. Luego, claro, porque la película es redonda de principio a fin. Creo sinceramente que la idea del film es la mejor idea que han tenido nunca los de Pixar, más aún que Toy Story pues juguetes que hablen es algo que todos los niños imaginamos alguna vez pero un mundo de monstruos donde exista una compañía eléctrica que para dar energía a toda la ciudad tenga que conseguir dicha energía de gritos infantiles es genial. Toda la parafernalia de la fábrica, con las puertas de los dormitorios, la entrada de los monstruos, la posible “infección” si son tocados por ellos… Bufff, genial. Por supuesto la puesta en escena es perfecta y a diferencia de otros films sigue pareciendo visualmente alucinante, no ha envejecido, por ejemplo los pelos de los monstruos son increíbles, bueno toda la animación. Los personajes carismáticos abundan, por supuesto los principales, “Mike y Sulli”, pero los secundarios brillan y mucho. Desde el villano Randall que Arlet ha bautizado como Ranfall pasando por su secuaz, el maravilloso “Fungus” hasta llegar al mismísimo “Bill”, un monstruo en prácticas o el espléndido “Abominable hombre de las nieves” exiliado en el Himalaya. Ya digo, un film perfecto. Las voces en castellano pues no son de lo mejor, está Santiago Segura! Pero no lo hace mal, esa es la verdad. Originalmente son Billy Cristal y John Goodman los que ponen voz a los protas, y la banda sonora tiene en Randy Newman un valor seguro. La precuela del film no la he visto pero dudo que esté a la altura, lo de “Monstruos SA” es de traca i mocador, un film perfecto, mágico y maravilloso. 
En el Soul siempre encontramos la respuesta. El Soul nunca te deja tirado en la cuneta menos aún cuando tu espíritu está en plena montaña rusa de emociones que hacen que la tierra se mueva a tus pies. Entonces, sí, el Soul es la respuesta. El Soul es pasión, y pasión no es una palabra cualquiera. Los extraterrestres lo sabemos y algún que otro terrícola también, no muchos pero sí algunos. Lo sé yo y ahora lo sabrás tú, pero el que ya lo sabía hace tiempo es mi gurú espiritual en la Tierra, ese sabio apasionado que responde al nombre de Joserra y que reina en la Land. El maestro Joserra, mi modbrother, me señaló el camino, y yo como buen pequeño saltamontes hice caso al maestro. Me enseñó algo descomunal y extremadamente peligroso, me enseñó una de sus debilidades y alguna que otra más que nos guardamos para nosotros y un servidor se dejó llevar, y acabé inyectándome en vena la música de Eddie Hinton. Un puto maestro del Soul. Del Southern Soul. Un currante, un soulman, un espléndido colaborador de monstruos que van desde Elvis Presley a Otis Reding pasando por la reina Aretha. Y yo sin saber nada de él, de su fuerza vocal, de su magia musical, de su esencia… La primera vez que escuché a Hinton se me erizó el bello y se me puso el culo prieto, en mi cara se esbozó una sonrisilla de placer y mis ojos se humedecieron un algo. Joder, me pilló de sorpresa, y yo, con esos pocos pelos!!! Cañonazo de disco del que os voy a hablar en unos momentos, una POM de esas que dice Joserra, un lujo, una delicatessen, un placer terrenal que se disfruta de aquí a la galaxia de Andrómeda. Eddie Hinton es blanco pero por su voz no lo dirías, parece hermano de Otis. Nació en el mítico Jacksonville en el 44 y nos dejó en el 95 cuando su cuarto disco empezaba a tomar cuerpo debido a problemas cardíacos. No conozco su obra en profundidad, estoy en ello, pero estoy poniendo remedio. Lo que sí tengo que reconocer es que estoy totalmente alucinado y enganchado a su debut, ese debut mágico, ese “Very Extremely Dangerous” es pura dinamita y nadie en su sano juicio debería no acudir a él cuando las cosas se ponen peliagudas. Qué disco, qué artistazo!


Eddie Hinton – “Very Extremely Dangerous” (1978): 01.- You Got Me Singing/ 02.- Concept World/ 03.- I Got the Feeling/ 04.- Shout Bamalama/ 05.- Get Off in It/ 06.- Brand New Man/ 07.- Shoot the Moon/ 08.- We Got It/ 09.- Yeah Man/ 10.- I Want it All

Decir que Eddie Hinton es uno de los mejores cantantes de Soul blancos no es ninguna barbaridad. No hay debate. Uno escucha “You got me singing” que abre ese “Very Extremely Dangerous” y queda totalmente convencido. El Otis blanco. Sexi, ardiente, apasionado. Tremebundo. Todo está en su sitio, puro Muscle Shoals, que se dice pronto. Magia. Un disco de esos para escuchar follando. Qué disco terrícolas!!! Nos lleva desde el cortejo pasando por el acto hasta el cigarrillo de descanso. Virgen Santa qué discarro!!! “Concept World” te mete en ese rollito del que es imposible salir, ya no hay cantantes así. Bueno, hubo una, Amy, pero se nos fue. Los metales resonando por allí y acompañando por allá a la voz rota y sensual de Eddie, y llevándonos en volandas a una de las canciones del disco, ese “I got the feeling”, y tanto que lo tenías Eddie! Que nadie dude de eso. Cancionaca del copón bendito y punto pelota. Magistral. Imposible no triunfar en una cita si esto está sonando de fondo, da igual que seas, calvo, unicejo, de pito pequeño o reúnas todas esas grandes cualidades. Con esta canción se folla seguro. Palabrita. Luego llega la versión del maestro Otis, “Shout Bamalama” y a mover el esqueleto. “Get off in it” es demoledoramente sexi. Nenas? Bragas fuera!. Una de mis favoritas del disco es “Brand New Man” muy en el rollito de Wilson Picket (otro maestro) y qué decir de “Shoot the moon” que blusea un algo y que está coescrita con otro monstruo de la canción, otro que me descubrió el amigo Joserra y por el que estoy totalmente abducido, joder con Dan Penn. La recta final la inicia la brutal “We got it” otra muy Otis, a la que sigue “Yeah Man” que es un despiporre y acabamos con “I want it all” que pone la guinda al pastel. Disco mágico y extremadamente peligroso. Avisados quedáis.

Hoy cumplo años terrestres. Ya tengo unos cuantos pero me siento bien. Alegre y joven aunque francamente en minoría, pues en casa ya son tres contra uno. Sí, tres mujeres contra un paupérrimo extraterrestre. Se me acabó el fútbol amigos. Estos días he pasado un carrusel de emociones muy difíciles de explicar, yo estaba totalmente "down in the hole" pero la "pequeñita" me ha sacado del pozo. Qué regalo puede ser mejor que eso? que esa cosita tan bonita. El otro día, a uno que estaba blandito, viendo como sus tres mujeres se reían y disfrutaba se le saltaron las lágrimas. Qué cosas! Así pues estos días parece que ando recargando pilas, que vuelvo por mis fueros. Estos días de "permiso de paternidad" me están sentando muy bien, mejor dicho de "minipermiso", es vergonzoso los pocos días de los que puede disponer el padre, pues entre papeleos y mandangas poco tiempo de disfrute hay, pero bueno, qué le vamos a hacer. Vivimos en el país que vivimos. Y respecto a la Isla, reconozco haber pensado dejarla desierta en algún momento de este mes, no lo voy a negar. Ahora descarto la idea. Por absurda, pues acabaría gastándome el sueldo en terapia. Seguiré como siempre o eso espero e intentaré poner en marcha un nuevo proyecto: Exile. Ya os iré informando. Y nada más, voy a despertar a mis niñas y a preparar el desayuno. Qué paséis buen día, yo al menos lo intentaré.

Èlia Hernández Turull, 15/11/2013





Es curioso como descubro con cierto pesar que he sido abandonado por uno de mis seguidores. Ya no estoy en la centena, he vuelto a los 99 followers! Ostias, no podré dormir! Je je.... Debe ser algún fan de Pearl Jam algo mosqueado por mi crítica de su aburrido y monótono disco “Lightning Bolt”. Tal vez mi archienemigo se haya borrado aunque él jura y perjura que no. No lo sé. Tampoco me he puesto a revisar quién ha sido el desertor, claro que como me entere lo desintegro. Después de lo que os voy a contar hoy tal vez bajen aún más mis queridos seguidores pues pensarán que me he vuelto del todo loco, que mi sentido del buen gusto se ha averiado o puede que como sospechaban muchos de ellos nunca lo haya tenido. Está claro que a estas alturas los pocos terrícolas que pasean por la isla no se sorprenderán de que diga claramente, a pechopalomo, qué cojones, que a mí, sí, a mí, el nuevo disco de los Arctic Monkeys me gusta. Aún diré más, el grupo de Alex Turner me la pone dura. Hace ya siete años que aquellos mocetones imberbes de Sheffield aparecieron en la escena musical con un discazo bajo el brazo de eterno título: “Whatever people say I am, that's what I'm not” (2006). El disco me sedujo, me llevó al huerto y me pegó un par de polvos bien dados. Sería flor de un día el noviazgo o mi relación con los monetes acabaría en boda? Mi archienemigo Guzz siempre ha renegado de ellos y de cualquier grupo parecido que a pesar de su indudable calidad ocupe las portadas de revistas musicales y de tendencias varias aunque incomprensiblemente defienda a The Strokes que sinceramente son una putísima gran mierda.

Eran pues los Monos Árticos un hype? Pues no lo sé, ni me importa demasiado, pero su segundo disco confirmó que el niñato Turner era bueno de cojones y aquel “Favourite Worst Nightmare” (2007) sonó hasta la saciedad en el hogar nikochiano. Luego, su tercer disco, “Humbug” (2009), producido por Joss Homme me dejó algo frío, no acabó de engatusarme y me entraron dudas, no lo negaré. Tampoco ayudaba tener al bueno de Guzz dando por saco diciendo eso de “te lo dije, eran un hype, no valen un pimiento...”, pero bueno, le di la razón como a los locos y me olvidé un algo de ellos. Turner comienza a aparecer por doquier, colabora con el más pintado, y ojo que lo de los “Puppets” con su nuevo amigo Kane es de escucha obligatoria, de traca i mocador que dicen por estos lares. En 2011 aparece “Suck it and see” y hago las paces con los monicos. Un notable disco que resumía su esencia y daba un paso más, con tupés y sin sorpresas pero también sin fisuras. Un disco “maduro” (como odio el palabro), pero es cierto, los monos árticos ya estaban maduritos y listos para hacer lo que les saliera del badajo, y ese algo es “AM”.


Arctic Monkeys - “AM” (2013): 01.- Do I Wanna Know/ 02.- R U Mine/ 03.- One For the Road/ 04.- Arabella/ 05.- I Want It All/ 06.- No. 1 Party Anthem/ 07.- Mad Sounds/ 08.- Fireside/ 09.- Whyd You Only Call Me When You're High/ 10.- Snap Out of It/ 11.- Knee Socks/ 12.- I Wanna Be Yours.

La portada y el título nos dan una pista de la que se nos viene encima y las dos primeras canciones, los dos temazos iniciales que ya habían avanzado son una puta maravilla. “Do I wanna know'” con ese riff guitarrero pesado y machacón se va metiendo en tu cabeza y te va engatusando de lo lindo, como la voz de Turner. Luego llegan esos coros con falsetes incluidos.. (coño, como me ha costado acostumbrarme a los falsetes, pero una vez le coges el gusto... madreeeeee!).. crawling back to you! Y entonces llega “RU Mine?” que es pura melodía del ártico, con la guitarra soltando riffs y una batería que quiere protagonismo, los coros otra vez de lujo. Todo sonando perfecto, todo en su sitio. Cuando le dí la primera escucha al disco “One for the road” se me atragantó un algo, hoy me parece demoledoramente bella. Rock clasicón, tema radiable a tope que llevo tarareando toda la semana. Ojo! Que no es de las canciones más brillantes del disco pero se pega como una cosa mala, como el chicle al zapato. La que viene luego, “Arabella” si que es canelita. Una de mis favoritas. Un lujo. Un placer. Un temazo. Con una intro muy moderna y la voz de Turner dejándote en cueros, cuando nos descubre por sorpresa la guitarra ya estamos en pelota picada y preparados para la acción, qué guitarrica!!! qué rock de los setenta más cojonudo! Sin duda uno de los temas del disco. Después de esto los monicos nos dan algo parecido a su versión del glamrock con “I want it all”, les queda cojonuda la cosa todo hay que decirlo. “No1 Party Anthem” es un medio tiempo de esos que derriten a las muchachas, y ese “c'mon c'mon c'moooooooooon”, bufff.... “Mad sounds” sólo hace que confirmar lo bueno que es Turner y sus monos. Homenaje de tapadillo a Lou Reed y la Velvet, fácilmente la imagino cantada por Lou (como te echo de menos gruñón!), fantástica canción, otra joya. Y llega "Fireside" que al amigo Savoy Truffle que ya ha diseccionado el disco en su imprescindible a la par que necesario My kingdom for a melody le vuelve loco, a mí me gusta pero no es de mis favoritas, claro que no baja para nada el listón, pero no acabo de engancharme a ella. La que si me engancha es “Why'd you only call me when you're high” pero he de reconocer que a partir de aquí el disco baja de nivel una migaja. “Snap out of it” recuerda a las reinonas de la edad de piedra, cosa que es de agradecer pero de este final algo irregular destaco “Knee socks”, en ella aparece Homme, y Turner se luce. Cierran “AM” con “I wanna be yours”, correcta sin más. No creo que “AM” sea de los diez mejores discos del año, tampoco que sea su mejor disco. No creo que hayan inventado la cocacola, ni que se hayan reinventado pero si que su evolución es impresionante, su calidad rebosa por todos lados y mirando su obra global hemos de tener muy en cuenta a los Arctic Monkeys, tal vez el mejor grupo de rock de su generación.

01.- The Shadow Line
02.- Whitechapel
03.- Sherlock
04.- Luther
05.- Utopia
06.- Inside Men
07.- Black Mirror
08.- The Hour
09.- Dead Set
10.- The Fall

Recomendada hasta la saciedad por una fémina de armas tomar bastante fiable y con el añadido del beneplácito de mi archienemigo aunque en este caso con algún “pero” de por medio nos hicimos en casa con la miniserie británica de Channel 4 “Utopía”. Producto diferente, genuino, auténtico, algo Friki y muy pero que muy pop. Sólo los británicos son capaces de entregar estos artefactos televisivos, de no alargarse hasta la extenuación ni el ridículo, y de, como no, dejar el tema abierto por si el público acaba demandando una segunda temporada, si se hace bien y si no, pues como acaba, ya está bien. No quiero contar mucho de la historia para no desmontarla pero básicamente existe una secreta organización llamada “La red” que es la causante de muchas de las fatalidades que suceden en la historia de la humanidad siempre con un objetivo concreto, objetivo que al parecer aparece en una novela gráfica dibujada por uno de los científicos implicados al cual se le fue la cabeza en algún momento del experimento. El cómic o novela gráfica acaba en manos de un grupo de frikis/losers/pringadetes y la cosa se pondrá muy pero que muy peliaguda. El guión, vale, no es tan poco nada del otro mundo pero sí es verdad que como está explicado todo y como nos lo presentan es de diez. El ritmo es frenético, los personajes están construidos de manera fantástica, las interpretaciones convencen sobradamente a pesar de ser casi actores desconocidos al menos para mí (a excepción del grandísimo Stephen Rea que tiene un pequeñito papel en la trama), la música es genial y la estética…., es francamente alucinante. Para colmo cuando hay que ser violento lo son, sin tapujos ni leches en vinagre. Ya digo que no quiero desmontar nada de la historia, pero desde luego no deberíais perderos la serie, disfrutaréis de lo lindo, y no pararéis de preguntaros una y otra vez, donde está Jessica Hyde.

Pearl Jam - “Lightning Bolt” (2013): 01.- Getaway/ 02.- Mind Your Manners/ 03.- My Father’s Son/ 04.- Sirens/ 05.- Lightning Bolt/ 06.- Infallible/ 07.- Pendulum/ 08.- Swallowed Whole/ 09.- Let The Records Play/ 10.- Sleeping By Myself/ 11.- Yellow Moon/ 12.- Future Days

Sé muy bien que me voy a meter en un berenjenal pero no puedo permanecer callado. Después de tres escuchas del nuevo disco de Pearl Jam, ese deseadísimo trabajo que sus ansiosos y obtusos fans esperaban como agua de mayo tengo que decir que me sabe a rancio. Sí, ya me podéis dar cera pero a mí el nuevo disco de los de Seattle no me dice nada, ni bueno ni malo, Ni me dice házmelo sobre la mesa, ni tírame por el retrete. Es decir, lo peor de lo peor, la indiferencia. También es normal que me pase esto porque si os digo la verdad tampoco es que un servidor sea muy fan del grupo. Me gustan? Pues sí. Los adoro? Pues no. Pero si Vedder canta de putísima madre..., vale, que sí que sí... pero nunca me ha transmitido ni emocionado, joder, Dylan canta como un grillo pisado y alguna vez ha hecho que las lagrimillas recorrieran mis mofletes o me ha hecho sonreir de lo lindo. Claro que meter en el mismo párrafo a Dylan y Vedder es un sacrilegio de cojones, como lo es siempre que se cite a Peal Jam hablar de los Who o Neil Young. Que esos dos monstruos son los grupos de referencia de los de Seattle no hay duda, pero coño, aún tienen que comer mucho esos mocetones para igualarlos. A los Who que los quiero mucho no les hace ningún bien esas comparaciones y a Tito Neil se la repampinfla todo ello, pues si cuando la escena guarrindonga que vió nacer a “Ten” el abuelo cebolleta ya se cascaba “Ragged Glory” pues imagino que debe pensar él y ellos cuando en el 2012 entrega “Psychedelict Pill”... Sí, las comparaciones serán odiosas pero ponen a cada uno en su sitio y pese que en estos momentos tampoco haya muchas bandas de calidad que hagan rocanrol como mandan los cánones, tal vez Queens of the Stone Age o los Monos Árticos, todos ellos, Pearl Jam incluído juegan por entrar en la Europe League, la Champions es y será de otros. Entonces qué, extraterrestre de los cojones, el disco es malo? Bueno, malo no es pero como digo no transmite y da la sensación de ir con el piloto automático, de repetirse con la fórmula una vez tras otra, empaquetan bien el producto, lo venden aún mejor pero a la hora de la verdad cuantas veces fans y no fans pincharan el disco dentro de un año?, y aún me atrevo a llegar más allá, los propios Pearl Jam una vez acabe la gira y promoción cuantas canciones de este disco pensáis que se quedaran en el cancionero del grupo para los futuros conciertos? Yo creo que ninguna. Ahora supongo que mi archienemigo Guzz se estará calentando y preparando un alegato en mi contra para desacreditarme, hablará de que me gustan los Arctic Monkeys, los White Stripes, moñadas como los Vampire Weekend, la Streisand o los grupos de aquí te pillo aquí te mato, esos hypes que todos sabéis, y probablemente llevará razón pero una cosa no quita la otra. “Lightning Bolt” aburre y defrauda a partes iguales pero si queréis leer algo positivo pinchar en “Citizen Guzz” y regalaos los oídos. No me gusta este disco, no señor. Con este post cierro las oportunidades, creo que Pearl Jam tuvieron su momento, creo que facturaron grandes discos y muy buenas canciones, y creo sinceramente que la única razón de su existencia es que salgan de tour y den conciertos a tutiplén, todo para acabar cantando siempre versiones de los Who que gustan más a la gente que sus propias canciones. Joder, coño, como me enrollo!. Ahota tendría que decir algo del disco no?. Allá voy: algo!. Je je.. Empieza como un cañón, las cosa como son, con “Getaway”, “Mind your manners” y si nos ponemos “My fathers son”, luego, poco más, la canción que da nombre al disco y justito. El disco va desacelerando, con por ejemplo “Infallible” que de infalible tiene poco, es un tostón que ni os cuento. Es cierto que todo suena correcto, todo suena al “Pearl Jam” típico. Riesgo cero. Pero joder, es imposible estar a la altura entonces porque tus mejores canciones ya las hicistes en su momento y otra “Even Flow” o “Jeremy” no te va a salir porque como dije no eres Tito Neil. Estuvieron cerca con el disco del aguacate en 2006 pero creo que fue un espejismo. Claro que para gustos... Decepcionante, aburrido y algo manido el nuevo disco de Pearl Jam. Ya lo he dicho. Ahora archienemigo, dispara!
LOU REED
BERLIN (1973)
CAROLINE SAYS II


No hay mejor día o noche que hoy para hacerse con el magnífico videojuego indie “Limbo". Disponible, creo, para todo tipo de plataformas, desde el iPad hasta la Xbox pasando por el clásico PC pero un servidor lo ha adquirido estos días rebajado por motivo de la festividad yanqui de Halloween para la flamante PSvita. El juego data del 2010 y su origen es danés y es una puta delicia. Gráficamente es precioso y tenebroso, es muy cuco pero a la vez tiene unos momentos gore alucinantes. Es un juego a la antigua usanza, avanzamos sin cesar en un estilo plataformero 2D y en blanco y negro, poniéndonos en la piel de un niño que ha despertado en un mundo de sombras, puede que en el Limbo. El juego es de plataformas y los saltos y la habilidad importan, tanto como la astucia y la inteligencia pues el juego está plagado de puzzles que si no son resueltos a tiempo nos llevan a una muerte segura. Sólo podemos hacer tres acciones: avanzar, saltar y agarrar pero sólo con eso, la complejidad de los puzzles va en aumento y a veces es un verdadero reto resolver el problema. En definitiva, te gusten o no los videojuegos no quedarás impasible si lo pruebas, no es sólo un videojuego, es una pequeña obra de arte de la cual muchos deberían aprender. No es necesaria tanta potencia, sino clase, estilo, ingenio... Limbo es un maravilla y un servidor no ha podido desengancharse en muchas horas. Os lo recomiendo porque es único, precioso y muy muy adictivo.