GREGG ALLMAN
LOW COUNTRY BLUES (2011)
FLOATING BRIDGE

“Low country blues” ha resultado ser un artefacto cojonudísimo. La vuelta de Gregg Allman de la mano del aclamadísimo T Bone Burnett que últimamente se encuentra muy acertado en su faceta de productor no podía ser mejor. Sin duda será uno de los discos del año. Tiene mucha calidad, tiene buen gusto, buen hacer, buenas canciones y a un intérprete sobradísimo que con su voz engalana obras tradicionales del blues. Dos canciones tradicionales, nueve versiones y un tema de Allman conforman los doce temas de este gran disco, doce temas que saben a gloria y que están interpretados magistralmente con una elegancia y una clase que yo pensaba que se habían extinguido aunque Gregg se encarga de hacerme saber lo contrario.

Gregg Allman – “Low Country Blues” (2011): 1.- Floating Bridge (Sleepy John Estes)/ 2.- Little By Little (Junior Wells)/ 3.- Devil Got My Woman (Skip James)/ 4.- I Can’t Be Satisfied (Muddy Waters)/ 5.- Blind Man (Bobby Bland)/ 6.- Just Another Rider (Gregg Allman & Warren Haynes)/ 7.- Please Accept My Love (BB King)/ 8.- I Believe I’ll Go Back Home (Traditional)/ 9.- Tears Tears Tears (Amos Milburn)/ 10.- My Love is Your Love (Samuel Maghett)/ 11.- Checking On My Baby (Otis Rush)/ 12.- Rolling Stone (Traditional).

No busquéis en este disco ese rock sureño que caracterizó a los hermanísimos, aquí no hay de eso pero tampoco lo extrañaréis puesto que lo que aquí se ofrece es de traca. Lo curisoso del caso es que se grabó en menos de dos semanas, con un Gregg inspiradísimo moviéndose como pez en el agua en temas de blues añejo más bien reposaditos. Pero Gregg no está solo y además de T Bone Burnett encontramos a Dr. John (piano), Doyle Bramhall II (guitarra), Dennis Crouch (contrabajo) y Jay Bellerose (batería), es decir, sobran las palabras. Desde el primer tema (temazo) que no es otro que la versión de Sleepy John Estes “Floating bridge” a un marcianito como yo se le caen las bragas al suelo, se le salta la boina, joder, menuda cancionaca, y ya no quiero deciros como me siento al saborear “Little by little” de Junior Wells, Ah!, me derrito toa!. Todo el disco es de traca, es un no parar, ahí tenemos el blues a pelo de “Devil got my woman”, la magia de “I can´t be satisfied” o esa voz magistral, rasposa y algo soulera que aparece en la magnífica “Blind man”, y no sigo por no hacerme pesado. La clave del disco se encuentra en escucharlo de forma reposada, hacerlo con atención mientras se saborea un buen gintonic jugándonos la pasta en alguna partida nocturna de cartas. Vaya lujo!. Ya os digo que es un clásico instantáneo, uno de esos discos atemporales que de vez en cuando aparecen para dignificar un género y poner donde se merece al tiparraco que lleva las riendas pues como está muy de moda ahora decir, Gregg es el puto amo. Haceros con el disco, no os defraudará, más bien os llevará al huerto y os dará algún que otro revolcón. Discazo, discazo, discazo.

1.- The Big Lebowski (1998)
2.- The Fabulous Baker Boys (1989)
3.- The Fisher King (1991)
4.- Crazy Heart (2009)
5.- Starman (1984)
6.- True Grit (2010)
7.- Tron (1982)
8.- Fat City (1972)
9.- Fearless (1993)
10.- Texasville (1990)
Aprovechando que mi archienemigo se encuentra de vacaciones por Asturias cogiendo algún que otro kilo de más (...y ya son demasiados), que sigue incumpliendo su contrato con este blog, que ayer pude ver al fin el último film de los hermanos Coen y que no estoy yo muy fino anímicamente he pensado en usurparle uno de sus comentarios, así, por la patilla. Ya sé que es duro enfrentarse a la lectura guzzkiana por su espesor, pues a veces parece que no nos lleva a ninguna parte, pero que le vamos a hacer. Así pues os dejo con la opinión cinéfila sobre el film "Valor de ley" de Guzzest que tanto me gustó, espero que me perdonéis por dejaros con semejante personaje...

SINOPSIS. Después del asesinato de su padre por Tom Chaney (Josh Brolin), Mattie Ross (Hailee Steinfeld), una chica de catorce años firmemente decidida a hacer justicia, contrata los servicios del veterano sheriff Rooster Cogburn (Jeff Bridges), un borracho de gatillo fácil. Ambos perseguirán al criminal hasta territorio indio e intentarán atraparlo acompañados de LaBoeuf (Matt Damon), un ranger de Texas, que quiere atrapar de Chaney para juzgarlo por el asesinato de un senador...

Ahora que las dos únicas películas malas de su ya bastante lóngeva carrera empiezan a quedar bastante atrás en el tiempo parece que muchos (no todos, que siempre habrá gente que sabe hacer bien su trabajo por suerte) de los critiquillos habituales han perdido la vergüenza y se vuelven a tocar con los hermanísimos... En fin, si es que son como críos.
Se vuelve acuñar sin problemas lo de la "deconstrucción coeniana", vuelven a tener una visión "única y personal" y hasta parece que han crecido y hacen mejor cara, los puñeteros.

Chorradas. Una gente que empieza su carrera haciendo nueve pelicularros, uno detrás de otro, de los cuales al menos la mitad se cuentan por "masterpieces" sin problemas no se pueden ningunear a la brava (da igual el pecado). Y aunque en esta "regeneración" de los últimos cuatro films no alcancen la excelencia de hace (no tanto) tiempo si son films notables, cada uno a su manera. Su manera de proceder es la acostumbrada, ellos no se mueven por género hacen que el género se aferre a ellos (conocen el chiste de sobras pero te lo contaran como les salga de la faba). Y ahora le tocó al western. Y además, con ello, logran recuperar de nuevo el consenso crítica/público ya alcanzado en/con la comedia ("Burn after reading"), que por alguna razón (que no comparto, a mí me gustaron mucho ambas) se había negado a "No country for old men" (crítica -"no es para tanto"-) o "A serious man" (público -"es muy lenta"-), fuera del ámbito cómico. "True gift", por sus partes, es irreprochable de cabo a rabo, el film serio más goloso de esta "nueva" etapa y parece, o deja esa impresión, que siguiendo por este camino no puede tardar demasiado en caer otro "cuponaso" a lo "Miller's crossing", "Barton Fink" y demás.
No se crean nada de lo leído en la linea de "es la peli de los Coen que menos lo parece" (y una polla) o "el Nota va a al oeste" (lo de antes en una olla -aunque tampoco estaría mal si se diera el caso-). No, y tampoco es un remake así en crudo. Se han basado de lleno en la novela original de Charles Portis en vez de en el film sixtie que le valió a Wayne su único oscar. Por ese camino, se puede afirmar (por ej.) que el Drácula de Coppola no es sino otro remake al uso del Nosferatu de Murnau, y eso no es lo que toca.

Puede que en esta "Valor de ley" haya algún deje cómico, si, pero eso tiene que ver más con el estilo propio de los cineastas o con la somatización y posterior sugestión de la dupla Bridges/Nota por parte del espectador, que con otra cosa.
Por lo demás estamos ante una obra que no tiene desperdicio alguno. Pulso narrativo que no decae, protagonistas bien interpretados y definidos (ni que decir que Bridges se lleva la palma claro, pero la niña -Hainlee Steinfeld- lo hace también de órdago y hasta el armario empotrado de Damon cumple sin problemas como saco de boxeo del primero), otra banda sonora de Burwell de lujo (¿y con esta son...?), secundarios al quite y algún que otro momento digno de atesorar en el imaginario colectivo de cualquier amante del cine que se precie... En este sentido vayan por delante el momento "encuentro chamanístico nocturno" directamente arrancado de un sueño, la preciosa "postal" del ahorcado o esa peregrinación final -niña en brazos- bajo la luna en la que algunos ven un guiño directo a la inmortal "La noche del cazador" (una de las perdiciones de siempre de este humile bloj, como algunos ya saben).
Los Coen siguen pues en muy buena forma y aunque (como ya ocurría en "No country...") sus personajes se muevan a un objetivo, no al contrario y en peregrinación continua (es mas fácil "dibujar" si el modelo se está quieto, téngase en cuenta), siguen estando supeditados a sus designios cual maestros titiriteros y es que, en mejor o peor estado de inspiración, siguen haciendo las mejores caricaturas... que lo llamarán "personajes", si, pero son muchos años de seguir al par de cabritos estos y ya empezamos a conocer algunos de sus trucos... y, con ello a cuestas, que dure y nos duren.

A FAVOR: amén de todo lo apuntado (y todo es todo), el que realmente és y será un western pero ante todo, que se nota, es un film que huele y se siente coeniano de principio a fin. Bravos a lot.

EN CONTRA: esta más que fetén como está pero, se admite, algún momento cómico de más le hubiera caido a esto de lujo... tiene ese desparpajo, tan agradecidamente falto de afectismo, propio de los tipos, pero un par de carcajadas quizá le hubiera dado el empujón definitivo partiendo del notable (muy alto) en el que habita.

GUZZTÓMETRO: 8'5/10
Tenía unas ganas descomunales de ver el artefacto visual que los White Stripes entregaron el año pasado, más aún cuando hace unos meses el propio Jack confirmó la disolución definitiva del dúo más artificial y auténtico de la escena rock de la última década. Confieso ser un fan incondicional de los Stripes desde que comenzaron allá por el 99 con su disco homónimo aunque fue con “De Stijl” del 2000 cuando realmente me engatusaron para siempre. Menudo discazo. Luego llegó lo que llegó, mi favorito “White blood cells” (2001) que sin duda es su mejor disco y luego “Elephant” (2003) que fue un pelotazo cósmico que los consolidó como la mejor banda de rock de los dosmiles. Después de aquello la pareja comenzó a distanciarse, bien por un desgaste obvio debido al éxito, las giras, la presión de los nuevos discos, o bien por las incursiones con otra gente y otras movidas de Jack. Sea por una cosa o por otra los siguientes discos bajaron un pelín el listón y se intuía que el proyecto de los Stripes llegaba a su fin, más aún cuando a la reina del bombo, Meg, le daban ataques de ansiedad como el que le dio en el concierto de Barcelona en Razzmatazz que provocó que la actuación acabase casi media hora antes. De todas formas “Get behind me Satan” (2005) e “Icky Thump” (2007) mantenían alto el nivel y ofrecían nuevas sonoridades pero el proyecto con The Raconteurs acabó por convencer a Jack.

The White Stripes habían llegado a su fin y entonces a falta de algún disco de tomas inéditas y el recopilatorio de turno empezaron a llegar perlas en forma de directos como el que hoy nos ocupa. “Under Great White Northern Lights” está muy bien parido, nos lleva de viaje con los Stripes por su extraña gira por Canadá, en el documental se alternan opiniones y conversaciones con el dúo y anécdotas del viaje con actuaciones de sus conciertos y alguna que otra miniactuación de lujo. Todo con mucha clase, en blanco y negro (y rojo), mostrando especial atención por la figura de Meg que se muestra ultra tímida, delicada y extrañamente bella sin serlo. Un rockumental que saciará a los fans y dejará frío al resto, interesantes declaraciones y opiniones de Jack que habla de Meg como su hermana y no como su Ex, que habla de tener todo controlado y preparado con los Stripes en cuanto a imagen y medios pero que eso no tiene nada que ver con su música, música que por cierto está a un nivelazo que muchos quisieran. Aunque a muchos les pese The White Stripes son un grupazo descomunal que formará parte de la historia del rock en un lugar privilegiado. No sé que será ahora de la reina del bombo pero sin duda Jack con sus múltiples proyectos seguirá muy activo, tanto a la guitarra y voces con los Raconteurs, como a la batería con The Dead Weather, hasta en su faceta de productor, próximamente aparecerá en el nuevo proyecto del grandísimo Jerry Lee Lewis y al parecer producirá y tocará la guitarra en el próximo trabajo de los Stones donde Keith asegura que volverán a merodear por el sonido blues, country y americana. Me muero porque eso sea cierto.
THE LOVING SPOONFUL
DO YOU BELIEVE IN MAGIC? (1965)
DO YOU BELIEVE IN MAGIC?

Mad Men, The Walking Dead, Breaking Bad y ahora The Killing todas ellas de AMC le habían mojado la oreja a HBO. No es que HBO facturase malas series, la verdad es que las suyas nunca bajan del notable, pero los tiempos donde Tony Soprano, McNulty o el cabronazo de Swearengen reinaban en la pequeña pantalla con sus respectivas seriacas (The Soprano, The Wire y Deadwood) habían pasado. La serie de Don Draper había encadilado a medio planeta y a mí desde luego pues tal vez es la mejor serie que uno pueda ver en estos momentos y eso HBO lo sabía y tenía que poner remedio, por ese motivo le pusieron un cheque en blanco a Scorsese y le dijeron: “Martin, sálvanos el culo”. Y así nació la seriaca “Boardwalk Empire”. Si AMC nos había llevado a los años 60 en NY con las empresas publicitarias, HBO y Scorsese hacian lo propio en los años de la ley seca con decorados, vestuario, fotografia, guión y un casting de lujo. Para huevos, los suyos. No contentos con eso sacaron uno de esos productos sólo aptos para seguidores de HBO. “Treme” es lo mejor de lo mejor y punto pelota. Para completar el trío ganador los cabronazos de HBO se guardaron un as en la manga que algunos ya hemos tenido la suerte de disfrutar y es que según decían ellos, el invierno estaba llegando...

La serie basada en la saga de libros de George RR Martin que no he leído pero pienso hacerlo llamada “Canción de hielo y fuego” lleva por título “Game of thrones” que es como se llama el primer libro de la saga, el resto por ahora serían: “A clash of kings”, “A storm of swords”, “A feast of crows” y “A dance with dragons”, y queda aún por llegar algún que otro libro. Así pues si cada temporada es un libro no sé si también cambiará de nombre la serie...., ya veremos. Lo que sí se puede decir es que el episodio piloto titulado “Winter is coming” es la ostia de bueno. La puesta en escena es acojonante. Es puro HBO. No se anda con chiquitas y además de su puesta en escena impecable la historia tiene mucha chicha y se ve complicada de cojones, pero todo fluye suavemente, sin prisa pero sin pausa, haciéndonos saber que nos darán grandes momentos si es que desde los títulos de crédito, por cierto son fantásticos, a uno ya le da una trempera que es imposible abandonar. Las actuaciones de lujo, la ambientación estupendísima, el ritmo perfecto, la trama acojonante. Ya digo, nada que objetar. El mejor piloto que he visto en mucho tiempo, he disfrutado como un enano. Sólo espero que llegue ese segundo episodio de un total de 10 que tiene esta primera temporada , mientras espero ardo en deseos de adelantarme a la trama leyendo los libros. HBO ha vuelto a lo grande dando un golpe sobre la mesa. Y es que no hablamos de TV amigos, hablamos de la puta HBO.


1.- Do you believe in magic?
2.- Summer in the city
3.- Daydream
4.- Nashville cats
5.- Darling companion
6.- Rain on the roof
7.- Did you ever have to make up your mind
8.- Coconut grove
9.- Jug band music
10.- Didn't want to have to do it
Me cuesta mucho entender porqué ese geniecillo de la gran manzana que lleva por nombre John B. Sebastian no está mejor considerado, siempre se lo dejan en el tintero cuando se habla de los fabulosos sesenta americanos, tal vez sea porque su música tiene un cierto paralelismo al de la british invasion o no, yo qué sé, la verdad es que me sorprende que no estén entre los mejores al elaborar las listas de turno, hasta yo suelo dejármelos, no tengo excusa ni perdón. Es por eso que hoy quisiera hablar de él, de su magnífica obra, de sus exquisitas canciones que suelen alegrarme y cambiar mi estado de ánimo.

Sebastian fundó en 1964 The Looving Spoonful junto a Zal Yanofski después de haber estado enrolado en varios combos. A esos dos pájaros les acompañaron Steve Bone y Joe Butler para completar la banda y así, de repente, apareció su primer Lp en 1965, un elepé llamado “Do you believe in magic” que contenía, claro, la canción del mismo título, un hit eterno que aún hoy suena fresco, una puta obra maestra del pop. Aquel disco no sólo tenía esa cancionaca, es todo un disco a descubrir, no te lo acabas, allí están esperándote “Fishing blues”, “Did you ever have to make up your mind”, “Younger girl”, “On the road again”..., una puta delicia. Un año más tarde llegó la esperadísima continuación, “Daydream” (1966) con, como os podéis imaginar, la canción “Daydream” como pieza principal, temazo!. El disco continúa por los mismos derroteros y en él encontramos piezas estupendísimas como “Jug band music”, “Didn't want to have to do it” y “You didn't have to be so nice”.

Muy atareados los Loving Spoonful sacan la banda sonora del film de Woody Allen “What's up, tiger Lily” que mayormente es instrumental y también en el 66 otro disco, “Hums of The Loving Spoonful” en los que el grupo de Sebastian encabió muchos de sus singles triunfadores como “Summer in the city”, “Nashville cats”, “Rain on the roof”... Tremendísimo para qué engañarnos pero además había joyitas de mis favoritas del grupo como “Darling companion”, “Coconut grove”, “Loving you”.. Un disco indispensable que define muy bien la esencia del grupo. A partir de aquí más bandas sonoras como “You're a big boy now” para Coppola, alguna que otra compilación, y otro disco llamado “Everything Playing” (68) grabado en difíciles circunstancias y que sería el principio del final. En 1970 Sebastian emprende su carrera en solitario y The Loving Spoonful dejan oficialmente de existir. Una pena.

La carrera en solitario de Sebastian no la llevo al dedillo precisamente, tengo que ponerme a ello eso es bien cierto, si bien conozco su primer disco que por cierto es bastante bueno, “John B. Sebastian” (1970) en el que John experimenta con el folk, el rock sin olvidarse de sus melodías perfectas y su retrogusto al country de Nashville. El disco comienza espectacular con “Red-eye express” y “She's a lady” pero tal vez la mejor canción ande por el ecuador del disco, hablo de “Rainbows all over your blues” faltaría más. Como digo después de esto le pierdo la pista y sinceramente tiendo a pensar que el tipo flojea y se pierde un poquito, me acuerdo de haber escuchado canciones suyas que datan de los noventa sin que despertaran en mi nada especial, pero seguramente estaré equivocado. De todas maneras para disfrutar correctamente de su música siempre es mejor recurrir a los Loving Spoonful, a cualquiera de sus tres discos o a alguna de sus estupendas compilaciones, sin ir más lejos yo tengo el “The very best of Looving Sponful” del 98 editado por Camdem con una portada psicodélica que no está nada mal pero más bonico sería el “Very best of” del grupo que fue editado por BMG allá por el 2004 con unos dibujos magníficos, la portada sin ir más lejos es una ilustración del grupo sentados en un banco de un parque buenísima y una selección de 18 temas indiscutibles. The Loving Spoonful es un grupo al que todos deberíamos acudir más a menudo, al menos todos aquellos que aún creemos en la magia.
Ahora no nos tiremos el pegote diciendo que Shyamalan es un cutre de cuidado porque quién más quién menos en algún momento entre el 99 y el 2004 le pusimos por las nubes. No era de extrañar, el indio de los cojones había firmado la sobrevalorada “The Sixth Sense” (99) , la estupendísima “Unbreakable” (00), mi favorita aunque muy poco valorada “Signs”(02) y es que cada vez que la veo me gusta más, y luego aunque la gente la aplaudió demasiado está “The Village” (04) que tenía ese final masticado para mentes algo desquebrajadas y “Lady in the water” (06) que fue un fiasco a pesar de contar según dicen con mi doble en la vida real Paul Giamatti aunque tendría que volver a verla porque creo que es mejor de lo que recuerdo o no. La cosa se le puso fea pues crítica y público le dimos la espalada puede que de tanto buscar que el indio nos sorprendiera y a él, claro, se le agotaron las ideas. Intentó arreglarlo con “The Happening” (08) que a mí particularmente me pareció regulera pero difícilmente se le puede quitar la etiqueta de director de episodios de The Twilight Zone modernos de hora y media. Él pensaba que sí podría, así que para darse un gusto firmó “Airbender” que es toda una chufla y que no sólo le dejó con el culo al aire sino que también arruinó a la productora, iba a ser una trilogía pero el grifo ha sido cerrado. Tal vez por eso, por ser un director de la dimensión desconocida tuvo la idea, la gran idea, de comenzar una saga de films de bajo presupuesto llamada “The Night Chronicles”, él no dirigiría y al principio si firmaría el guión o sería una historia de cosecha propia. El primer film ha sido “Devil” aquí titulado “La trampa del mal” ves a saber tú porqué, pero así es, y de momento ha vuelto a llenar sus bolsillos...

El film “Devil” está basado en una historia de Shyamalan donde cinco personas se ven encerradas en un ascensor, los nervios se agudizan y empiezan a pasar cosas muy extrañas. Van muriendo uno a uno y empiezan a pensar que uno de ellos es el diablo... No, no suena a la Dimensión desconocida. Casi, no. El film lo dirige John E. Dowdle que antes había hecho la versión americana de Rec, aquella Quarantine (08). No lo hace mal, le da ritmillo al asunto y no se anda con florituras, eso es precisamente lo que parece lastrar al film, es demasiado académico, parece como si fuese un exámen de final de curso. Todo según las reglas, todo según lo previsto. Los actores todos ellos muy televisivos de productos secundarios así que como dije todo cuadra con un presupuesto bajísimo. Si uno viese el film por casualidad sin saber de donde y de quién viene probablemente le daría un bien alto pero claro, sabiendo lo que hay uno esperaba más. Al minuto dos yo ya sabía quién de los cinco era el demonio y es que esa frase de “no, yo me subo en el siguiente, hay demasiada gente para mi...”, joder, que se le ve el plumero señora! sólo le falta enseñar la cola y los cuernos!. Lo malo como dije es que es previsible y lo bueno que es entretenida y nunca baja el ritmo pero tampoco esperemos que sea el film del siglo. Ya veremos como avanza la idea de The Night Chronicles de momento sé que la segunda película se titulará "Reincarnate" y la dirigirá Daniel Stamm el de The Last Exorcism. A mi esto de las crónicas me parece buena idea porque a veces uno añora ese tipo de películas hechas con cuatro duros y que te hacen pasar un buen rato. Dios, como añoro Creepshow....
Es increíble que sitios especializados en crítica musical muy bien considerados hablen de “The King is Dead”, el flamante nuevo disco de The Decemberists, como algo normalito y falto de chispa cuando a mi personalmente me parece cojonudísimo pero qué le voy a hacer, tampoco es que confíe demasiado en la gente de Pitchfork. El nuevo disco del grupo que encabeza Colin Meloy me da una alegría tremenda cada vez que lo escucho, me da trempera y eso a mi me basta y me convence para no destruir todo el planeta al mismo tiempo que justifica mi presencia marciana en la Tierra, y es que si aún existen seres humanos que puedan crear de la nada cosas tan magníficas como los 10 temas que conforman el álbum podemos tener esperanza de que no se ha extinguido la vida inteligente en el planeta. Yo estoy contentísimo con el disco, la verdad es que es uno de mis favoritos del año y por eso pasé por caja (el mismo día adquirí lo nuevo de Sexsmith y de Lucinda, casi ná), y como casi siempre no pude resistirme y abrí los disquitos en el autobús, con ansia y nerviosismo por ver los libritos, las fotos y esas cosas que nos gustan a los compradores. Ostias! Me llevé una sorpresa, el de los Decemberists llevaba regalito y ni me había percatado. Llevaba, claro, el disco pero luego había un cedé que no mata precisamente y lo mejor, un dvd-film llamado “Pendarvia” de media hora de duración que plasmaba grandes momentos de la grabación del disco en la granja Pendarvis allá por Oregón. Oh! Que bonico es el cabrón, os lo recomiendo. Escuchar sólo la voz de Meloy en algunas canciones, o sólo el acordeón, o un pianito.... Fantástico. Hay entrevistas, imágenes bellísimas, la presencia de Peter Buck y claro, musiquita. Particularmente me encantan estos deuvedeses que acompañan a los discos en ocasiones, aún recuerdo lo bien que lo pasé viendo el dvd del “Hombre Lobo” de Eels. Grandioso!!! Nada más, sólo quería deciros que por un par de euros más que os podéis gastar en una bolsa de matupipas sería conveniente comprar la edición especial del disco, por cierto, un señor discazo.

CROSBY, STILLS & NASH
CROSBY, STILLS & NASH (1969)
SUITE: JUDY BLUE EYES

CSN & Y son una de mis debilidades. Tengo que confesar que tal vez haya escuchado millones de veces su fantástico “Déjà vu” de 1970 pero en secreto y ahora que nadie parece oírme prefiero su debut del 69, aquel CSN que contenía joyas como “Suite: Judy blue eyes”, “Marrakesh express”, “Guinnevere”, “Helplessly hoping” o “Long time gone”, casi ná. Ya sé que ahí no estaba caballo loco pero joder, es un discazo con una mística inigualable y el otro, el que cuenta con Young simplemente es un discazo del top 20 histórico. Pero bueno, yo prefiero el primero, soy así de puñetero. De todas formas no quería yo recordar las batallitas del grupo, de sus desventuras juntos si no más bien de sus aciertos por separado pues los cuatro son verdaderos genios y juntos forman el mejor supergrupo de rock, folk o como cojones queráis etiquetarlo de la historia. Comencemos...


Stephen Stills: antes de CSN & Y el tipo despuntó en los Buffalo Springfield junto a Young, Messina y Furay (ambos luego formaron Poco), además no hay que olvidar que junto a otro crack, Chris Hillman (The Flying Burrito Brothers) Stills formó Manassas para dar en el 72 uno de esos discos inolvidables. Ah! Pero la carrera de Stephen en solitario no tiene desperdicio, junto a Manassas los dos discos que llevan su nombre y datan del 70 y 71 son de compra obligatoria. Esos tres discos son la ostia y nadie debería dejarlos pasar. Particularmente Stills es mi favorito del cuarteto y tiene aquel “Just roll tape” que es una puta maravilla para sabedores de su obra.



David Crosby: el gordo, sí, el tipo del bigote..., así lo distingue mucha gente inculta cuando se habla de él y no como el tipo que canta como los ángeles. Qué vamos a hacer... Crosby venía de donde venía, que no era de otro sitio que de los Byrds junto a Hillman que luego colaboraría con Stills, y Gram Parsons, y Gene Clark, y Roge McGuin... joder, qué grupazo. Pues bien, Crosby que tiende a colaborar mucho con Nash firmó en solitario alguna que otra joya como “If I could only remember my name” aunque para ser sincero el tipo es más un actor de reparto, un juerguista, un mujeriego y un buen conocedor del alcohol, y por ese motivo o no suele colaborar con muchachada de alto postín y dejarles la responsabilidad a otros.

Graham Nash: el inglesito. El tipo que formó parte de The Hollies antes de enrolarse con los CSN & Y, y es que cada miembro parece haber salido de las mejores escuelas, la ostia qué nivelazo se gastan. Sus composiciones son especiales y suelen ser bastante diferentes a las del resto del grupo aunque su buen hacer liga más con Crosby con quién parió a cuatro manos y dos voces en el 72 un discazo de tomo y lomo. Eso sí, su debut en solitario con “Songs for begginers” (1971) es insuperable, una puta obra maestra para qué engañarnos. Es el más sosaínas del cuarteto pero un tipo capaz de firmar “Marrakesh express”, “Our house” o “Teach your children” ya me ha ganao para siempre.


Neil Young: caballo loco siempre cabalgó por su cuenta y de vez en cuando se dejó caer junto a los tres pájaros de antes, juntos parieron “Dèjá vu” y eso les santifica como mínimo pero su relación triunfal con Stills ya venía de largo desde los tiempos de Buffalo Springfield. Young es el más interesante en solitario y el que tiene la carrera más larga y llena de éxitos. De discazos insaltables tiene unos cuantos, la verdad es que del 69 al 79 no tiene disco que baje del 9 y eso que firma una docena. Mis favoritos: “After the gold rush”, “Harvest, “On the beach”, “Tonight's the night”, “Rust never sleep”... y luego el tipo ha seguido dando joyas como “Ragged glory”, “Weld”, “Harvest Moon”... Lo de Young es tremendo. Crack!

Ya os he puesto deberes para el fin de semana: repasar a los CSN & Y y comenzar a saborear sus obras en solitario sin olvidar sus orígenes. Joder, aquí hay materia para una licenciatura... Lo de estos cuatro es de aúpa, juntos o por separado, de sus manos han salido al menos 15 obras maestras y dudo que muchos puedan decir lo mismo. Amén.
No voy a negaros que he bajado el pistón en cuanto a escuchas musicales desde que he tenido descendencia, no obstante voy a muy buen ritmo y tal vez la bajada de escuchas no se deba a mi retoño si no más bien al inesperado pelotazo que han entregado los Fleet Foxes que me tiene totalmente abducido el muy cabrón pues sin lugar a dudas es el mejor disco en lo que va de año seguido a muy corta distancia por el de Iron & Wine que es la repanocha. Luego hay otros que sí, que son la leche como el de Lucinda, el de Sexsmith, ah, se me olvida, el de Daniel Martin Moore y el de los Decemberist, claro. Pero ojo, que me ha llegado un poker de novedades que me ha dado una trempera como hacia tiempo y ahora después de darles unas primeras escuchas creo que me tendrán muy ocupado gozando de su música. Así pues aquí os dejo con cuatro recomendaciones que se han ganado mi respeto absoluto y mi devoción desde el primer contacto. Allá vamos!:



Gregg Allman - “Low Country Blues”: llevaba 14 años sin grabar y de la mano de T Bone Burnett nos llega esta delicia diseccionada en 12 cortes de blues,country, soul y folk. Tremendo. A excepción de “Just another rider” el resto son versionacas, a cual mejor. Desde el primer acorde a uno se le caen las bragas al suelo, suena a clásico instantáneo y eso no es nada fácil. Habrá que darle más escuchas para sacarle todo su jugo pero así de primeras parece ser todo un discazo.





Paul Simon - “So Beautiful Or So What”: soy un fan incondicional de Simon así pues la llegada de un nuevo disco suyo es ya una alegría aunque su anterior trabajo me dejase algo frío. Por suerte Simon recupera el pulso, el buen hacer y los sonidos de los setenta al entregar un disco que tiene a la guitarra como principal protagonista y donde no falta su dulce voz y las melodías perfectas. De primeras hay media docena de temas cojonudos pues ya se sabe que el que tuvo retuvo.





Steve Earle - “I'll Never Get Out This World Alive”: discazo así de primeras y punto. Chapeau Mr Earle. Desde el inicio suena de putísima madre, en él encontramos violines, mandolinas, guitarracas..., tradicional a tope. Aquí también produce T Bone Burnett, joder con el tipo, está en todos los saraos. Del disco ya conocía “This city” por salir en Treme de HBO pero el resto de disco sabe a gloria y te traslada a esa música de raíces que Seeger y en ocasiones Springsteen bordan.





Bill Callahan - “Apocalypse”: la madre de Dios qué discazo más bien parido, este hombre tiene alguno malo? Joder, con este se ha superado el muy canalla. Mi favorito por el momento de este gran poker de primeras escuchas. A veces pienso lo que follaría yo con la voz de Callahan, la ostia, qué poderío... Sólo siete temas le bastan al bueno de Bill para llevarnos al huerto, es uno de los candidatos a disco del año y es que con cosicas como “America” o “Baby's breath” seguro que no andará lejos.




Y nada más gañanes, como véis estoy bastante entretenido con estas nuevas y flamantes cuatro adquisiciones que si los Fleet Foxes me dejan diseccionaré en la isla dentro de muy poquito si bien podriáis ir buscando estos discazos y darles unas escuchas pues no os defraudarán. Tengo otros discos pendientes pero ninguno de ellos suenan tan fabulosos como cualquiera de estos cuatro así pues os dejo por hoy, creo que el señor Callahan tiene ganas de que pinche su disco. Au Revoir!

1.- It's Too Late
2.- A Feel The Earth Move
3.- (You Make Me Feel Like) A Natural Woman
4.- You've Got A Friend
5.- So Far Away
6.- Only Love Is Real
7.- Jazzman
8.- Brother, Brother
9.- Tapestry
10.- Song Of Long Ago
Hoy me apetece continuar con la sección mensual que tiene básicamente como objetivo rendir pleitesia a las grandes damas de la música, os recordaré que la sección comenzó con la grandiosa Joni Mitchell y hoy continuará con otra señoraza que merece estar en este elenco de féminas, hablo claro de Carole Klein aunque muchos de vosotros la conoceréis por Carole King.

Judía y de Brooklyn, así nació Carole un 9 de Febrero de 1942. Desde pequeña despuntó al piano y ya se intuía que tenía una voz de oro. En el college conoció a Paul Simon, Gerry Goffin y Neil Sedaka que le dedicó su mítica canción “Oh, Carol”. A Goffin se lo cameló, tanto en lo musical como entre las sábanas y en el futuro se casaron, se divorciaron y tuvieron descendecia. Ambos escribieron un porrón de exitazos para otros grupos pero su relación amorosa les pasó factura, entonces Carole se volvió a casar, formó una banda, “The City” pero tanto el disco de estos como el primero en solitario de King, “Writer” de 1970, no se comieron un colín aunque en su debut como solista destacaba alguna joyita como “No easy way down”, “Going back” y “Up on the roof”, hay que aclarar que todas las composiciones están firmadas por Goffin/King y eso quieras que no le da una calidad muy respetable.

En 1971 pasó lo que tenía que pasar. Llegó el pelotazo absoluto. Carole se soltó la melena y parió su gran obra. Una obra indispensable. Un puto clásico nikochiano. “Tapestry” debería estar en todas las casas y escucharse semanalmente de manera obligatoria seguramente el mundo entonces sería un lugar mejor. El disco arranca de forma inmejorable con “I feel the earth move”. Temazo!!!, sigue con la maravillosa “So far away” y te remata con “It's to late”. Pura magia. En el disco no hay canción mala, y en él podemos encontrar el temazo que se hizo famoso en manos de su amiguísimo James Taylor “You've got a friend”, la cancionaca “Tapestry” o la archiconocida “(You make me feel like) Natural woman". Sí, es suya. La firma junto a Goffin pero es suya. “Tapestry” eleva a la categoría de estrellaza a Carole King pero también la condena a no llegar nunca más a esos niveles. El mismo año tuvo una de esas apariciones en directo memorables que suelen darse una o ninguna vez en la vida, fue en el Carnegie Hall y en él aparecieron canciones básicamente de sus tres primeros discos: Writer, Tapestry y Music. El concierto se reeditó en 1996 y es un compra muy golosa.

“Music” también del 1971 está muy bien parido, están “Brother, brother” y “Song of a long ago” que me gustan mucho pero no es un disco redondo aunque sí notable y muy recomendable. En 1975 aparece un disco cojonudo que lleva por título “Really Rosie” no es un disco al uso pues es la banda sonora de una serie de Tv pero está muy bien, yo lo descubrí hace bien poquito y me sorprendió de lo lindo aunque el mismo año o en el 76, eso depende de las fuentes, vuelve a los brazos de Goffin para editar “Thoroughbred” que podría pasar inadvertido si no fuese poque en él participan Crosby, Nash y James Taylor. La ostia en verso. La carrera de King no ha sido todo lo buena que podría haber sido, si la valoramos en global se podría discutir su presencia entre las grandes damas, claro, si no tuviesemos en cuenta “Tapestry”. Puede sólo un disco situarte entre las grandes?. Puede. Es un discazo, el resto de su obra no llega a tales niveles pero sería injusto decir que bajan del notable.


CAROLE KING

Un disco: “TAPESTRY” (1971)
Un concierto: “CARNEGIE HALL CONCERT” (1971)
Una compilación: “HER GREATEST HITS: SONGS OF LONG AGO” (1978)










XX - Joni Mitchell: http://nikochanisland.blogspot.com/2011/03/xx-joni-mitchell_2663.html
Pero en qué mierda de país vivimos? No, no voy a quejarme de la política, la economía, el estatut, el paro, el euríbor, no me quejaré tampoco de los impuestos, la sanidad, la jubilación, los bajos suledos, la baja cultura que tienen hoy los jovenzuelos, de lo que vale un cortado, una barra de pan o el billete del autobús... joder, si que estamos mal ahora que lo pienso... Eso son cosas que dejo para los mayores, para los cultos de mena, yo simplemente vengo a exponer mi indignación hacia la poca falta de respeto y de rendir tributo a los grandes de verdad. Me explico. En este país de mierda se muere un Ozores, un López-Vázquez, un Manuel Alexandre y todo el mundo se pone las manos en la cabeza mentras llorando grita a pleno pulmón “Oh, joder, con lo grandes actores que eran....”, y bueno, eran gente maja, no diré que no, pero no nos pongamos a repasar su obra porque puede que nos muramos todos juntos de vergüenza ajena. A todo esto todos los grandes programas de la caspa comienzan a emitir sus grandes obras así como en los programas del cotilleo les salen hijas no reconocidas y amantes transexuales al uso a algunos de ellos. Qué gran país!. Luego claro, se muere Paul Newman y no se le dedica ni un minuto del telediario y menos aún unas dos horitas para al menos dar uno de sus mejores films, coño, que hay donde elegir, al menos veinte pelis de las buenas tenía el gañán de los ojos azules. Se muere Liz Taylor y a la pobre no paran de sacarla junto a Michael Jackson, acaso era su cuidadora? su amante? su abuela?. Cabronazos! Que ha sido una de las grandes de verdad! Hacía películas sabéis? Actuaba!. Y ya el acabose es que se muera uno de los grandes directores de cine de la historia, uno de los grandes de verdad que queda en activo y ningún canal se digne en ponernos un ciclo en condiciones de su filmografía. Y es que claro, Lumet no vende, si se hubiese muerto Antonio Mercero.... Sidney Lumet tiene una plétora de películas indispensables, ya hace un tiempo le dediqué un Nikotop que ahora os voy a recordar, después de leerlo no podréis hacer otra cosa que buscar esos diez films y poneros a verlos hasta empaparos de la calidad de Lumet. Muere Lumet y en España no se inmutan, no quiero imaginarme el día que la palme el mindundi de Santiago Segura, habrá con total seguridad millones de noticias sobre el asunto, y miles de homenajes hacia el individuo en cuestión, lástima que su obra no valga ni un segundo de un descarte de Lumet. Puto país, apesta.

NIKOTOP: Sidney Lumet (apareció en Nikochan Island un 07/08/2008)

1.- Dog Day Afternoon (1975)
2.- 12 Angry Men (1957)
3.- Serpico (1973)
4.- Network (1976)
5.- Prince Of The City (1981)
6.- The Pawnbroker (1964)
7.- Long Days Journey Into Night (1962)
8.- Before The Devil Knows You’re Dead (2007)
9.- Murder On The Orient Express (1974)
10.- The Verdict (1982)
*10.- Deathtrap (1982)
FLEET FOXES
HELPLESSNESS BLUES (2011)
HELPLESSNESS BLUES

SIDNEY LUMET (Filadelfia, Pennsylvania, 25 de junio de 1924 - 9 de abril de 2011)
En 2008 sin hacer prácticamente ruido apareció de la nada una banda de Seattle con un estupendísimo disco bajo el brazo que contenía algunas de las melodías más bellas que se han podido escuchar en este inicio de siglo. Recuerdo descubrirlos gracias a un estribillo maravilloso, circular y altamente adictivo...”i was following the, i was following the, i was following....”. Oh! Qué locura, qué maravilla de canción y qué videoclip eterno! Lujazo! Pronto me hize con el álbum “Fleet Foxes”, el disco de debut de la banda que bautizaba con su nombre su primer disco. Claramente el disco me enamoró y me encandiló pero para ser sincero el disco mejora con cada escucha y es hoy, en el 2011, cuando me parece mejor aún que antes pues no sólo de “White Winter Hymnal” vivían lo gañanes, allí lucen extraordinariamente obras eternas como “Ragged Wood”, “Quite Houses” o “Your Protector” por citar tres de mis favoritas. Los Fleet Foxes no inventaban nada, extraña que un grupo de Seattle haga ese tipo de música cercana por decir algo o casi mimetiza a uno de mis grupos preferidos CSN & Y, tanto juntos como por separados aquellos pájaros aún hoy son insuperables pero mira tú por donde estos zorritos demostraron que habían aprendido muy bien la lección. El disco fue un éxito rotundo de ventas y de crítica, algunos de sus componentes antes de sacar el difícil segundo disco editaron sus cosicas por separado pero el segundo álbum se iba cocinando lentamente, demasiado lento creo yo pero claro, las expectativas eran tan altas, la presión era tanta que fácilmente acabarían decepcionándonos. Casi tres años después aparece “Helplessness Blues” y sólo puedo deciros que este disco es gloria bendita...

Fleet Foxes: “Helplessness Blues” (2011): 1.– Montezuma/ 2.– Bedouin Dress/ 3.– Sim Sala Bim/ 4.– Battery Kinzie/ 5.– The Plains Bitter Dancer/ .– Helplessness Blues/ 7.– The Cascades/ 8.– Lorelai/ 9.– Someone You’d Admire/ 10.– The Shrine An Argument/ 11.– Blue Spotted Tail/ 12.– Grown Ocean.

“Montezuma” abre el telón. La voz suena perfecta, preciosa, angelical. Las armonías y los coros me seducen sin compasión. Es sin duda una pieza perfecta para abrir el álbum, simplemente maravillosa. Luego una guitarrita juguetona nos presenta “Bedouin dress”, entra la batería y de nuevo, como no, esa magnífica voz de Robin Pecknold pero esta vez es un violín quién se lleva el protagonismo vistiendo de gala la tonadilla, y la instrumentación se va haciendo cada vez más importante y los coros acaban por arropar la canción y qué canción!. “Sim sala bim” no le va a la zaga, nos mete de lleno en una atmósfera de finales de los sesenta principios de los setenta donde nos parece escuchar por un momento a los CSN, qué puta maravilla, qué guitarra, qué final, eres tú Stills? Has vuelto por tus fueros? Ooooh qué maravilla! Ojito, qué llega “Battery Kinze” una de mis favoritas, que representa en esencia lo que son estos Fleet Foxes, nada nuevo pero con una calidad descomunal. Hasta el momento creo que superan con creces su anterior trabajo pero es que el disco sólo hace que crecer y crecer, es con “The plains/bitter dancer” que se me caen las bragas al suelo. Descomunal. Simplemente perfecta. Los coros angelicales que abren paso a una cancionaca que firmaría el mismísimo Crosby no tienen desperdicio, y esa flautita, qué me decís de esa flautita irresistible? Y de ese final para cantar a tutiplén en el concierto, en el bar, donde sea a pleno pulmón, a pecho palomo, joder, me pone los pelos de punta. A todo esto llega el single del disco, el que le da nombre, llega “Helplessness blues” con esa melodía que es imposible sacarte de la cabeza, una cancionaca de tomo y lomo, máxima candidata a canción del año junto a “Your fake name is good enough for me” de Sam Beam, otro que no se queda precisamente manco. El disco me tiene enamoradísimo y con la instrumental “The cascades” me meo toa, me sorprendo a mi mismo con los bellos de punta, emocionadísimo..., pensaba que tardaría años en volver a tener esa sensación escuchando una pieza instrumental. Y para colmo aún falta bastante disco, sin ir más lejos “Lorelei” es de mis preferidas, una joya, un diamante por descubrir. Qué melodía, qué coros, que savoir faire... Estupenda canción que sólo hace que confirmar que estamos ante un discazo insaltable que comienza a enseñarnos el final del camino con “Someone you're admire” que tiene un algo, un no sé qué de Simon & Garfunkel que me engatusa sin más antes de darnos una cancionaca de ocho minutos con multiples cambios de ritmo y secciones musicales que quitan el hipo, “The shrine/An argument” es estupenda de principio a fin, y Pecknold demuestra, si es que hiciese falta, one more time, que tiene una voz prodigiosa. Puro sonido folk de los setenta. “Blue stopped tail” y “Grown ocean” cierran el disco de forma inmejorable. Los Fleet Foxes han pasado sin ningún sobresalto ni apuro el difícil segundo disco, se han superado a si mismos firmando su mejor álbum, el mejor álbum posible, el mejor álbum del año hasta la fecha sin lugar a dudas.

1.- José Mourinho
2.- Louis Van Gaal
3.- Javier Clemente
4.- John Benjamin Toshack
5.- Bernd Shuster
6.- Johan Cruyff
7.- Carlos Salvador Bilardo
8.- Alex Ferguson
9.- Pep Guardiola
10.- Luís Aragonés
No puedo con él. De verdad que no soporto al filósofo. Que si el Shakhtar es un equipazo, un súper, súper equipo… Joder, que le has metido cinco, coño! Y el tipo sigue con su discurso: “vosotros lo habéis visto, son buenísimos… probablemente junto al Betis el equipo que más problemas nos ha dado…”, pues menos mal porque los dos se llevaron una manita. No soporto a Guardiola y su falsa humildad. Es el tipo más prepotente que recuerdo. Chulo, engreído, creído…, joder, lo tiene todo. No sé si me molesta más que el tipo sea así o que todo el mundo le lama el culo. Que asquerosidad de periodistas si es que la profesión aún existe, entiendo que los medios catalanes proporcionen cierta ayuda al Barça, un poco de manga ancha no está mal pero de eso a que nunca se discutan sus errores…. A Pep no se le discute nada, ni su fallo en fichajes millonarios, ni su cansina y falsa modestia, ni su a veces chulería con la prensa que si la hiciese Van Gaal o Mou serían destruidos rápidamente, ni su falta de liderazgo dentro del vestuario. Sí, claramente le falta liderazgo y eso queda claro con los fichajes de perfil bajo que realiza y que cuando alguien tiene carácter o le tose acaba saliendo por la puerta de atrás ya sea el mejor delantero por números, goles y títulos de la historia del club (por hablar algo de Samuel) o por ser el fichaje más caro en la historia de la entidad (y hablamos de Ibra). Pep está creando una secta que cree en su filosofía, en su discurso sólo así se entiende que Milito, recordemos que es el central titular de Argentina, que no juega ni un minuto y que cuando no hay ni un central disponible en el equipo no juegue porque Pep prefiere reconvertir a un mediocentro a central sea el hombre más feliz del mundo. Lo primero que dice Guardiola al acabar el partido ante el Shakhtar es para dar las gracias a los jugadores que no juegan porque lo hacen muy bien y ayudan mucho. A qué ayudan? A recoger los balones, limpiar las toallas? Y qué hacen bien? Calentar banquillo? Por Dios, qué hijodeputa! Quería vender la moto con el equipo ucraniano, joder, si son una puta banda… Según él cualquiera de sus cinco brasileños jugaría en el Barça… vaya ida de olla…. Sí, sentarían a Messi, a Iniesta, a Villa, a Xavi… Segurísimo, por eso juegan en la liga ucraniana, porque son la polla. Ya le hubiera gustado a cualquiera de los Ronaldos o al mismísimo Pelé llegar al nivel de Fernandinho… La ostia que tipo más insoportable. Cualquier equipo que juegue contra el Barça parece el Milan de Sacchi. Qué tipo más asqueroso el Pep Guaridola! Ah! Qué insoportable! Mourinho es un caso único, ya lo dice él es the special one, en el lloriqueo claro, en la táctica subterránea pero al portugués se le ve venir a leguas, no esconde nada, el tipo es así, pero Guardiola lleva esa careta de buen tipo, de educado, de tolerante…. Todo falso! Qué ganas tengo que tome un par de malas decisiones que le salgan mal, que le dejen con el culo al aire o que cometa el error de meterse con alguien que no deba, el día que pierda, que por favor sea en la eliminatoria europea y la final contra los merengues le caerá todo el peso de la prensa de ese país chiquitito que está ahí en una esquina y no pinta nada (payaso!), ese día llegará y espero que entonces salga a gorrazos, mientras tanto habrá que aguantar su humildad de tres al cuarto y el baboseo de la prensa amiga. El Barça es el mejor equipo del mundo, de eso no hay duda, tiene media docena de los mejores jugadores del mundo, o no? Entonces hay que tener miedo del Shaktar, del Almería, del Espanyol? Venga ya Pep, te creías de verdad que estabas más fuera que dentro?
Estoy hecho una auténtica piltrafa humana. Me duele todo el cuerpo y llevo todo el día casi a 39 de fiebre, sudando, con la nariz taponada y un retrogusto a paracetamol repugnante, es por eso que me he pasado casi todo el día durmiendo o estirado en el sofá, en uno de esos momentos de lucidez me he visto con fuerzas de ver un film que justo empezaba en el canal CTK. Un film alemán del 2001 que se llevó algún que otro premio en la Berlinale de aquel año. El film cuenta con un protagonista absoluto, Martin Schultz de 36 años de edad, es puesto en libertad tras 11 años en la cárcel en la prisión de Brandenburgo. En su calidad de ciudadano de la anterior República Democrática Alemana, de Berlín Este, vivió la caída del Muro de Berlín desde su celda en la prisión. Al ser liberado, le entregan los objetos que llevaba en el momento de su detención: un carnet de identidad de la RDA, de color azul, un permiso de conducir de la RDA y una cartera con dinero de la RDA. Si la vuelta a la vida cotidiana después de la cárcel es dura, más difícil es cuando todo ha cambiado en el país y en su vida. Dejó a su mujer embarazada, y ahora ella está con otro y su hijo tiene once años, no tiene amigos y su incorporación a la vida laboral y social es francamente difícil. De eso es de lo que va el film, un drama en toda regla, bien interpretado, con buen ritmo y con alguna cosa que nos deja en el aire para pensar. Lo mejor tal vez esa mirada del prota, el actor Jorg Schuttauf está fantástico, muy convincente, pero esa mirada al salir de la cárcel entre miedo y esperanza se lleva la palma. Particularmente he de decir que la película me ha gustado bastante, la recomiendo aunque puede que no sea para tanto y que mi estado febril haya alterado mi criterio. No sé, miradla y decidir por vosotros mismos.
Casi dos meses han pasado ya desde la llegada de mi marcianita a este mundo y al fin ayer pude ver one more time un episodio de una serie de televisión después de cenar. Hallelujah! Bueno, para ser sincero el fin de semana me puse al día de Fringe aunque cada día me parece peor, demasiados amoríos y triángulos amorosos y muy poca ciencia-ficción.... Por ese motivo ayer rebusqué cosicas pendientes y encontré la primera temporada de “Sons of Anarchy” y claro, como la pequeñaja estaba dormida no pude aguantarme y visioné el episodio piloto. La serie viene abalada por ser una creación de Kurt Sutter conocido por ser guionista y productor de The Shield además de guardarse en aquella serie un pequeño papelito, creo que en los hijos de la anarquía también sale haciendo de un miembro de la banda encarcelado. El tipo está casado con Katey Sagal a la que le reserva un papel destacadísimo en la serie, ni más ni menos que la matriarca de un club de moteros que se dedican básicamente al contrabando de armas en el pueblo de Charming (California), es lo más malo e hijodeputa que he visto en tiempo, un bicho vamos. Pues el personaje que se llama Gemma Telle Monroe se quedó viuda además de madre soltera, se rejuntó con el amigo de su marido ahora líder de la banda de moteros llamado Clay e interpretado por Ron Perlman. Este pesonaje parece tener mucha miga pero ni ella ni él son los protas, el protagonismo recae en el hijo de ella, un melenitas rubio llamado Jax (Charlie Hunnam) que de momento es el causante de que no me haya convencido del todo el serial aunque sin duda le daré tiempo pues tiene muy buena pinta. Por cierto, sale Drea de Matteo, que quién es? Tengo que contestar? Joder, pues es Adriana La Cerva de los Soprano (como muere la guarrilla en aquella serie, bendito seas Silvio!). Joder, como me enrollo: la serie tiene buena pinta pero creo que el guaperas me hacer estar receloso, veo de entrada demasiado lío familiar y muy poca violencia, bueno, para no faltar a la verdad, violencia hay un cojón pero algo más desagradable no estaría mal, joder, qué queréis... que yo soy un fan de Oz!!! Fuera bromas, el piloto está bien pero creo que está algo encorsetado pero le daré una oportunidad, la dejaré que avance y me engulla la trama si no me decís lo contrario pues añoro una buena serie con mala uva y algo de violencia, la verdad no hay mucho a lo que recurrir de este género últimamente.
Erland & The Carnival - “Nightingale" (2011): 1.- So Tired In The Morning/ 2.- Map Of An Englishman/ 3.- Emmeline/ 4.- I’m Not Really Here/ 5.- I Wish, I Wish/ 6.- This Night/ 7.- Nightingale/ 8.- East And West/ 9.- Springtime/ 10.- We All Die/ 11.- Dream Of The Rood/ 12.- The Trees They Grow So High/ 13.- Nothing Can Remain/14.- The Ballad Of Egremont (Bonus Track)

La gran mayoría de sitios especializados en crítica musical ensalzan el segundo trabajo de Erland & The Carnival muy por encima de su disco de debut del año pasado, yo no estoy nada de acuerdo pero al fin y al cabo quién soy yo para hacerles la contraria?. El grupo de Erland Cooper parió un muy buen primer disco, Erland resucitaba el sonido de finales de los sesenta junto a The Carnival que no son otros que David Nock y Simon Tong, de aquel disco destacaría sobretodo las piezas tradicionales pasadas por el filtro de Erland concretamente “Love is a killing thing” y “Tramps and Hawkers”, y por supuesto “My name is carnival” que es otra versión, en este caso de Jackson C. Frank, el resto de las composiciones no desentonaban y básicamente estaban firmadas por Tong. Así pues al disco le cogí el gustillo, me pareció una de las sorpresas del año y por eso me interesé enseguida por este segundo trabajo que de primeras me ha decepcionado algo. No digo que sea malo pues en estos momentos ando totalmente abducido por los Fleet Foxes, el amigo Allman y Steve Earle así que como entenderéis me cuesta entrar en la atmósfera que crea Erland, qué queréis que os diga. El disco sigue tirando por ese folk añejo de finales de los sesenta principios de los setenta con aires de psicodélia y adornos góticos, se aleja del sonido actual de la música británica pero no me acaba de engatusar y es por eso que lo he dejado totalmente aparcado. Y sí, “I wish, i wish” está muy bien, y “Springtime” me gusta basatante al igual que “So tired in the morning” que abre el disco pero lo siento, me sabe mal, no estoy en esa onda. Y es que como ya os diseccionaré dentro de unos días el encontrarme escuchando una y otra vez el que tal vez vaya a ser el mejor disco del año pone el listón altísimo y hace que difícilmente pueda escuchar otra cosa, y es que el amigo Erland tiene que comer aún mucho para llegar a la altura de los Fleet Foxes. Si tenéis que catar a Erland & the Carnival mejor empezar por su disco de debut, ese si que me pareció un disco muy a tener en cuenta, ahora repiten la fórmula, añaden algún que otro arreglo modernito pero ya no sorprenden ni te llevan al huerto, una lástima.
LANGHORNE SLIM
BE SET FREE (2009)
BACK TO THE WILD

Hoy no voy a hablaros de promesas al uso, no voy a hablar del tipo talentoso que ha triunfado con su disco de debut, que ha sido agasajado por la prensa especializada y se ha enriquecido a costa de un público regulero que se conforma con cualquier cosa. No lo haré porque aunque eso tipos se hayan sacado de la manga un discazo puede que sean un hive, un bluff, un visto y no visto, un hasta luego cocodrilo. Tampoco me vale que hayan triunfado con el difícil segundo disco pues a veces la continuación del buenrollismo de su primer elepé está tan presente que suelen metérnosla doblada. No. Hoy vengo a hablaros de gente con un recorrido bastante importante para ser juzgados con todas las de la ley, gente con más de dos y tres discazos bajo el brazo que por unas razones u otras siguen en la sombra como actores de reparto esperando ser descubiertos por el gran director de turno para que les den su gran oportunidad para triunfar a lo grande aunque la verdad eso a ellos se la trae bastante floja, van a lo suyo, hacen su música, para ellos, para nosotros, para quién quiera disfrutar y saborear algo bueno de verdad y no lo que la industria quiere vendernos. Aquí voy con un poker escandalosamente escandaloso de músicos que por nada del mundo se le deberían pasar a uno por alto. Al loro:

1.- Ron Sexsmith: me puede explicar alguién porque este canadiense rechoncho no vende millones de discos?. Acaso no es su pop el mejor pop posible en estos tiempos que corren? Hace alguien en estos días melodías tan cojonudas y redondas como las suyas? Sexsmith no tiene un disco bueno, es que no tiene disco que baje del notable, y ya van once entre pitos y flautas. “Ron Sexsmith” del 95 es un auténtico clásico y convendría no dejar de lado “Retriever” (2004) o el “Exit Strategy of the Soul” (2008) aunque para ser sincero no ha bajado el pistón desde sus inicios. Tal vez le falte un disco redondo, un diez pero ahí queda eso, un geniecillo pop de los de antes.


2.- Micah P. Hinson: es curioso lo de este yanqui orignario de Memphis pues le cuesta comerse un colín en su tierra natal y en la vieja Europa se le ama como al que más. Hinson tiene una de esas voces que te arrastran al infierno, te seduce aunque raspe, aunque duela, aunque sepas que está tremendamente jodida. Su voz es la de un viejo que lo sabe todo pero roza la treintena. Su música es narcotica, placentera, preciosa. Es como un vals que quiere jugar con un banjo, como el cigarro que se consume en el mastil de una guitarra. Hinson es la ostia. Varios Ep's, cuatro discos inconmensurables de los que destacaría por encima del resto “And the Opera Circuit” aunque prácticamente todos están al mismo nivelazo y un disco de versiones que quita el hipo.


3.- Josh Ritter: a este cantautor de Idaho parece que le ha mirado un tuerto. Lleva cinco discos como cinco soles y aún la crítica y público no se han bajado los pantalones si bien un marcianito como yo si lo ha hecho y si es necesario me pondré mirando a la Meca. No tiene disco malo el cabronazo, desde “Golden Age of Radio” (2001) hasta “So Runs the World Away” (2010) una lección tras otra conseguida después de mezclar y cocinar a fuego lento el aroma de Paul Simon y Nick Drake, y el saborcito de Costello, Dylan o el mismísimo Cash. Es imperdonable que aún no conozcáis a este artistazo, la verdad es que no entiendo como sigue en la sombra.


4.- Langhorne Slim: el cantautor nacido en Langhorne, Pennsylvania de nombre verdadero Sean Scolnick es el menos prolífico de este gran poker de músicos aunque no por eso el menos brillante. Es difícil clasificar su música pero si llegas a escucharla la adorarás para siempre, puede que Dylan, Oldham, Guthrie te den una pista pero Langhorne no es eso porque en su música también hay algo de Kinks, Waits e incluso de la Incredible String Band. Practica un country-soul-rock alternativo que quita el hipo y desde luego cualquiera de sus tres discos hasta el momento es de compra obligatoria. Tres discos cojonudos e indispensables, a saber: “When the Sun's Gone Down” (2005), “Langhorne Slim” (2008) y “Be Set Free” (2009).

Y nada más por ahora, sólo recordaros que Sexsmith trae este año un flamante disco bajo el brazo que gana con cada escucha, el impresionante "Long Player Late Bloomer", que Langhorne Slim ya se encuentra en el estudio rematando el que será su cuarto álbum por el que ardo en deseos de escucharlo, que Ritter con "So runs the world away" y Hinson con su "And the pioneers saboteurs" firmaron sin lugar a dudas dos de los mejores discos del año pasado. Así que posiblemente deberíais comenzar a hacer los deberes no sea que tengáis que ir a examinaros a Septiembre o peor aún, repetir curso.