La resolución de esta magistral serie galesa ha estado a la altura. Sus cuatro últimos episodios han cerrado el círculo y han resuelto con sencillez y clase una historia central que durante la segunda temporada se había difuminado un algo para volver con fuerza en el último episodio de aquella temporada. Hinterland (T1, T2) no es perfecta pero tiene todos los ingredientes que me gustan. Buenos guiones e interpretaciones, una fotografía y atmósfera descomunales (el paisaje es otro personaje más), interesantes casos por resolver y uno central que está presente desde el primer episodio. Sí, los episodios son largos en metraje, casi mini-películas, pero nunca se hacen largos ni pesados, lo que dificulta sin duda un maratón televisivo aunque yo me lo haya metido entre pecho y espalda. La resolución de la serie, pues creo que no habrá cuarta temporada, colma mis expectativas. El inspector Mathias se mete en un berenjenal y su superior no es trigo limpio, hay demasiadas frutas podridas y al final la mierda siempre sale a flote. Atrás queda la anécdota de estar grabada en galés e inglés, no doblado, cosa extraña y peculiar, y atrás queda que forme parte de las mil y una series sobre detective atormentado en un ambiente rural. La serie es de notable alto, no es nada comercial por suerte, y es un producto magnífico del catálogo de Netflix que a nadie en su sano juicio debería pasarle por alto. Decía que su final no augura una cuarta temporada pero cruzo los dedos porque sí acabe rodándose, un servidor quiere saber más sobre Mathias. Rumores de haberlos haylos, crucemos los dedos.
Hinterland T3
La resolución de esta magistral serie galesa ha estado a la altura. Sus cuatro últimos episodios han cerrado el círculo y han resuelto con sencillez y clase una historia central que durante la segunda temporada se había difuminado un algo para volver con fuerza en el último episodio de aquella temporada. Hinterland (T1, T2) no es perfecta pero tiene todos los ingredientes que me gustan. Buenos guiones e interpretaciones, una fotografía y atmósfera descomunales (el paisaje es otro personaje más), interesantes casos por resolver y uno central que está presente desde el primer episodio. Sí, los episodios son largos en metraje, casi mini-películas, pero nunca se hacen largos ni pesados, lo que dificulta sin duda un maratón televisivo aunque yo me lo haya metido entre pecho y espalda. La resolución de la serie, pues creo que no habrá cuarta temporada, colma mis expectativas. El inspector Mathias se mete en un berenjenal y su superior no es trigo limpio, hay demasiadas frutas podridas y al final la mierda siempre sale a flote. Atrás queda la anécdota de estar grabada en galés e inglés, no doblado, cosa extraña y peculiar, y atrás queda que forme parte de las mil y una series sobre detective atormentado en un ambiente rural. La serie es de notable alto, no es nada comercial por suerte, y es un producto magnífico del catálogo de Netflix que a nadie en su sano juicio debería pasarle por alto. Decía que su final no augura una cuarta temporada pero cruzo los dedos porque sí acabe rodándose, un servidor quiere saber más sobre Mathias. Rumores de haberlos haylos, crucemos los dedos.
No conocía esta serie.............me la apunto .
ResponderEliminarUn saludo