Iwo Jima según Clint Eastwood

“Hay muchos imbéciles que se creen que saben lo que es la guerra, sobretodo, aquellos que no han estado nunca. A mi me gustan las cosas bien claritas, buenos y malos, héroes y villanos, de eso, siempre hay, pero la mayoría de las veces no son los que nosotros creemos”















Con esta tremenda frase comienza la estupenda película “Banderas de nuestros padres” del magnífico director Clint Eastwood, pero que cobra mayor importancia y sube sin duda de calidad para llegar a ser imprescindible si se visiona a continuación “Cartas desde Iwo Jima”, las dos son del mismo año, las dos se complementan, se pueden ver por separado, es cierto, pero se necesitan para entender el mensaje, una misma guerra, dos países, un mismo conflicto, dos pueblos, tan diferentes que son iguales, dos formas de ver la batalla, dos películas, dos geniales películas del último director de calidad que nos queda y el que aún nos regala obras maestras. Recomiendo ver primero “Banderas de nuestros padres” y seguidamente “Cartas desde Iwo Jima”, de esa manera entenderemos mejor el conflicto y lo que nos quieren decir, la primera una crítica al panfleto americano, con sus guerras por dinero, la segunda, en japonés con subtítulo claro, una crítica al orgullo y tradición japonesas, pero que al fin y al cabo viene a ser lo mismo. Las acciones de guerra, el desembarco principalmente, recuerdan al de la mítica “Salvad al soldado Ryan” pero sin tanta sangre y tripas, el resto de la película es mas sentimental, mas frío, mas filosófico como en “La delgada línea roja”, sin llegar a ser ninguna de las dos, Clint Eastwood encuentra una forma personal de hacernos pensar, sacude nuestras conciencias, y nos pone firmes, tan diferente es Iwo Jima del conflicto de Iraq?, tan diferentes somos europeos, árabes, americanos?, quién es el bueno y quién el malo, quién el héroe y el villano?