Vampire Weekend - Father of the Bride (2019)


Lejos queda ya el debut de la efervescente banda de la Gran Manzana capitaneada por el vampiro Ezra Koenig. Su álbum homónimo del 2008 fue sin duda aire fresco como lo fue también su continuación "Contra". Vampire Weekend nunca han vuelto al nivel presentado en el debut, eso es un hecho. "Contra" estaba más que bien pero había demasiada repetición y muchos dudábamos que la banda nos diese grandes discos en el futuro. Su tercer disco, su "Modern Vampires of the City" es el catalogado como más flojo de la banda pero a mi me pareció fantástico. Primero porque la creatividad y el riego habían vuelto sin dejar de lado su sonido propio heredero de africanismos paulsimonianos, y segundo porque daban un paso adelante picando de aquí y allá. Como digo, fue incomprensiblemente ninguneado. Ahora, su nuevo disco, su "Father of the Bride", es aplaudido por unos y atacado por otros. No hay consenso. Estamos ante un discarral o realmente ante el peor de los discos de los Vampiros? Personalmente creo que ni una cosa ni la otra. De primeras si parece su peor trabajo pues faltan temas que te golpeen y te sacudan a la primera escucha, pero esa misma percepción nos hace darnos cuenta que el disco, que contiene nada más y nada menos que 18 nuevas canciones, es un disco para ir descubriendo con las escuchas, las cuales deben se atentas y pausadas. Es un disco doble, sí, cortito en minutos pero doble. Hay lo mimo de siempre, la voz maravillosa de Ezra. Las reminiscencias, ya sin taparse, a Paul Simon. Hay canciones bonicas del to. Y hay un fondo de llamémosle madurez, si queréis, que quita el hipo. Decía Fernando Navarro en su "Ruta Nortemaericana" de El País que estábamos ante el "The River" de Vampire Weekend... Fue leer eso y me puse las manos en la cabeza, pero luego... luego tuve que darle la razón puesto que las canciones fluyen y nos llevan al parecer a un estado simple, liviano, falto de punch.... pero esa  primera impresión es errónea. 

En esta nueva colección de canciones hay más de lo que parece. Hay intención, existe un hilo conductor, y hay fusión por todos lados como cabría esperar. Hay boniquismo en esa sencillez, ese "pure & easy" que tanto necesitamos algunos. Koenig es un gran hacedor de canciones, de melodías exquisitas y eso no se olvida, ni se compra ni se vende. Por tanto aunque de primeras penséis que el disco no vale la pena o no es lo que esperabais, os invito a no tirar la toalla. A abrir bien los oídos y a prestar atención. Poco a poco nos va robando el corazón y aparecen la mil y una referencias con las que nosotros también hemos crecido. De Paul Simon al mejor Sting, mirando a Brian Wilson de reojo, enseñando su fusión del soul, el soft-rock, el más ligero de los rhythm and blues, la world music, el folk moderno que dan como resultado un POP sabrosón, cálido y juguetón. Muchos notamos el adiós de Rostman Batmanglij que aún deja alguna que otra pincelada, y podemos quejarnos de la progresiva disminución de creatividad e inspiración conforme avanza el disco pero no es ni mucho menos un mal disco.


Vampire Weekend - Father of the Bride (2019): 01.- Hold You Now/ 02.- Harmony Hall/ 03.- Bambina/ 04.- This Life/ 05.- Big Blue/ 06.- How Long/ 07.- Unbearably White/ 08.- Rich Man/ 09.- Married in a Gold Rush/ 10.- My Mistake/ 11.- Sympathy/ 12.- Sunflower/ 13.- Flower Moon/ 14.- 2021/ 15.- We Belong Together/ 16.- Stranger/ 17.- Spring Snow/ 18.- Jerusalem, New York, Berlin.

La apertura folki de "Hold your now" es preciosa, con esos coros angelicales a media canción que descolocan y enamoran por igual. Preciosísima. Es "Harmony Hall" lo que un servidor esperaba del nuevo disco de Vampire Weekend: esas guitarras, esa voz maravillosa de Ezra, esos estribillos pop juguetones y modernos, esa fusión de estilos... A mi me parece un tema sensacional. Y qué decir de "Bambina"... pues que cabría en cualquiera de sus discos, con eso lo decimos todo. Marca de la casa. "This Life" es una joya. Dejaros de estupideces y de etiquetar. Esto es una maravilla cósmica. Simple, sencilla y soleada. Yo digo sí. La melancolía llega con "Big Blue" muy en la línea de mis adorados Dr Dog. "How long?" personalmente me engatusa, con esa base funki, ese bajo delicado, ese estribillo tan del señor Koenig...  y llegamos a "Unberarably white" que me parece estupenda pero que marca un punto y a parte puesto que a partir de este momento el disco coge una dinámica negativa y va bajando sin prisa pero sin pausa en calidad e inspiración. No digo que no encontremos joyas en la otra mitad del disco pero ya cuesta más. Tampoco digo que sean malas canciones pero está claro que el nivel baja bastante. "Rich Man" aún aguanta el tipo con sus africanismos, y "My Mistake" ofrece otra cara, pero en general creo que deberían haber realizado una buena criba y recortar el cancionero. Por ejemplo, "Sympathy", "Sunflower" y "Flower Moon" forman una tripleta totalmente descartable, ideal para esos "bonus tracks" que luego tan bien nos venden. Eso sí, el disco deja al final un buen regusto primero con "Spring now" que sin ser anda del otro mundo se deja gustar y sobretodo con "Jerusalem, NY, Berlin". Vampire Weekend entregan un disco notable pero no estupendo, un disco agradable pero no esencial, un disco que marca una nueva etapa en el seno de la banda pero sin perder sus señas de identidad. 

1 comentario:

  1. Confieso que aún no lo he escuchado, me pesa demasiado la historia ochentera de la banda y había tirado la toalla, pero acepto tu invitación a no hacerlo y lo escucharé estos días.
    Abrazos.

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