David Bowie - The Rise And Fall Of Ziggy Stardust And The Spiders From Mars (1972)


Sigo tocado y hundido, sigo triste y desconsolado por la muerte de unos de mis grandes referentes musicales, descubierto tardíamente del que me es realmente imposible destacar un disco favorito aunque es obvio que su época marciana es la que siempre me ha atraído más: Hunky Dory, Ziggy y Aladdin... la trilogía perfecta. Luego claro, no puedo olvidarme de la otra gran trilogía, la berlinesa, diferente pero igual de buena. Quería hoy rescatar y remendar un texto que escribí hace tropecientos años, en la ya antigua y olvidada sección clásicos nikochianos, aunque claro, esto no es sólo un clásico nikochiano es un clásico mundial, atemporal, imprescindible. Una de sus obras maestras, una de sus POMS, una joya de principio a fin, un regalo divino caído del cielo. Hablo como no de "The Rise And Fall Of Ziggy Stardust And The Spiders From Mars" que apareció el mismo año que el Duque Blanco le hacía el Transformer a Lou Reed con la inestimable ayuda de Ronno... Bowie se convertía en un camaleón travestido, y pasaba de ser Bowie a ser Ziggy Stardust para despacharse a gusto y regalarnos el fantástico e imprescindible disco The Rise And Fall Of Ziggy Stardust And The Spiders From Mars (1972). Mucho se ha hablado de este disco y mucho mas que se hablará, el disco narra la historia de Ziggy Stardust, vendría a ser mas o menos un extraterrestre bisexual, que viene a decir que la Tierra será aniquilada, pero el éxito le hará fracasar en su heroica misión, y bla bla bla, bla bla bla.... Hoy lo escucho y me sigue excitando como antaño, aún suena fresco, aún suena genial, aún suena como suenan los grandes discos de la historia: maravillosamente. 

El disco comienza con el anuncio de la fatídica noticia para los terrícolas mientras entra la pausada y medio jazzística percusión, y entonces la voz de Bowie aparece desde el horizonte junto a un precioso pianito, y jnos encontramos con... Five Years. Ese piano que también podemos escuchar en “su” Transformer, brutal inicio que te pone la piel de gallina y que un día después de su muerte haga que se me llenen los ojos de lágrimas y se me erice la piel. El disco continúa con una canción sobre el amor y sus variantes. “Soul Love” es puro Bowie. Con algo de psicodélia disfrazada de Lennon, un pequeño deje Beatle digna del álbum blanco y unos coros cincuenteros... Voz grave, coros angelicales, saxo de lujo, medio tiempo perfecto como digo muy cincuentero pero con ese toque tan mariquita y glam que predominaba en la época,y que particularmente me encanta y del que Bowie (tal vez junto a Bolan) fue el amo y señora. Musicalmente es un caramelito, una joya oculta, un tesoro. En la siguiente canción Ziggy se destapaba como el invasor que es, las guitarras son amenazantes, piano cortante, y esa voz que va cogiendo su falsete, voz doblada por el propio Bowie que le hace tener una sonoridad extraterrestre y esa guitarra desbocada y algo atormentada para finalizar, una de mis favoritas del disco. Y entonces, llega el contacto con los humanos, lo hace en Starman, POM entre POMS. Guitarra acústica, ritmo pegadizo, canción redonda, perfecta, insuperable, uno de sus clásicos de todos los tiempos, y ese ritmillo que abre el estribillo, y qué estribillo!, inolvidable. Después tenemos la única canción del disco no escrita por Bowie, no desentona, algo bluesera en esencia que se toma su tiempo, y estalla en una canción típica de los setenta. Y así acaba la cara A. La historia se reanuda con un piano de juguete precioso muy glam, del que Elton se sirvió el año siguiente para dar sonido a su espectacular doble álbum Goodbye Yellow Brick Road, la canción Lady Stardust es una maravilla, una joya oculta en el disco sin duda una de mis favoritas de siempre de Bowie y que creó escuela entre los baladistas de la época veáse Elton y simliares. Al rato todo se pone mas movidito, seguimos con el piano de protagonista y Ziggy quiere ser una estrella, en Star, nos demuestra que lo es y lo será, sobrado de calidad, Bowie, nos regala esta extraordinaria canción. Hang On To Yourself, mas rockabilly, pero con lentejuelas y uñas pintadas para la ocasión, llena de energía andrógina que nos pone las pilas para el sexo, estimulante. Y llega otra de las obras maestras de Bowie de todos los tiempos, Ziggy Stardust, donde podríamos decir que el ego consume a Ziggy y comienza su declive, pero la canción no baja el pistón, si acaso lo aumenta, sube el nivel con esas guitarras, ese comienzo inolvidable, ese grito, esa sensualidad, y ese final que te pone los pelos de punta. Un clásico entre clásicos que da pistoletazo a esa tripleta mágica que cerrará el disco, y es que después de ese enorme temón nos regala otro classic rock de dimensiones siderales, hablo de Suffragette City, con esas guitarras perfectas de la mano del no menos extraterrestre Mick Ronson, absolutamente genial. Ziggy no quiere al grupo, sólo quiere sexo, drogas y rock and roll, pero todo eso le hará tocar fondo, Rock’n’roll Suicide, es el final perfecto para el disco perfecto. y para Ziggy. Una bellísima canción, tan bella como triste y melancólica, suave y tierna, que te está diciendo "mátame suavemente", lo tiene todo, hasta ese final desgarrador que te deja un sabor de boca imposible de encontrar en este planeta. Rebosa clase, delicadeza, buen hacer, igual que todo el disco, una auténtica obra maestra de los setenta, de Bowie, todo un clásico, un clásico nikochiano, un clásico que hoy recupero para intentar hacer soportable el adiós de uno de lo más grandes. 

David Bowie - "The Rise And Fall Of Ziggy Stardust And The Spiders From Mars" (1972): 01.- Five Years/ 02.- Soul Love/ 03.- Moonage Daydream/ 04.- Starman/ 05.- It Ain’t Easy/ 06.- Lady Stardust/ 07.- Star/ 08.- Hang On to Yourself/ 09.- Ziggy Stardust/ 10.- Suffragette City/ 11.- Rock ‘n’ Roll Suicide

1 comentario:

  1. Esa trilogía es también mi favorita, por motivos nostálgicos mi disco es Hunky Dory, fenomenal reseña Niko, días tristes los de este principio de año.
    Un abrazo.

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