Con media docena de discos ya publicados se puede afirmar que Andrew Heissler o lo que es lo mismo, Pokey LaFarge, es un artistazo del copón bendito. El de Illinois lleva una década entregando canciones maravillosas que beben sin disimulo del swing, el blue-grass, el folk, la dixieland, el country e incluso el soul. Si de algo se le puede acusar a Pokey es de no ser nada moderno, de vivir en un estado retro perpetuo, aunque posiblemente eso sea más algo positivo que un reproche. Un servidor le conoció con su disco del 2013, su "Pokey LaFarge" resultó ser un artefacto tremebundo que me encandiló y llevó al huerto. Magnífico de principio a fin. De ese modo no quedaba otra que mirar atrás, redescubrir sus trabajos anteriores mientras el nuevo tomaba forma. Por un lado, fue algo decepcionante descubrir que lo anterior no estaba al mismo nivel y, por otro, siendo optimista, era normal pensar que le quedaba mucho que ofrecer y mucho margen de mejora. En 2015 entregó "Something in the Water" que en su momento no me pareció mejor que su predecesor, pensamiento y opinión que corrijo ahora mismo, pues en general sí me parece un disco superior, más aún viendo hacia donde se dirigía su música, y hacia donde a conseguido llegar con su nuevo lanzamiento, su "Manic Revelation", al que ya hemos podido darles las suficientes escuchas para afirmar que estamos sin duda ante el mejor disco de LaFarge, y un grandísimo, esencial e imprescindible disco del 2017. Pokey trabaja con sus músicos de confianza: Joey Glynn (bajo), Ryan Koenig (armónica, guitjo, guitarra eléctrica), Adam Hoskins (guitarra eléctrica), Matt Meyer (batería), Luc Klein (trompeta, bombardino, piano, glockenspiel), Alec Spiegelman (saxofón, piano, tuba, órgano, clarinete, flauta) y David Beeman (guitarra, órgano); y el productor Tony Hoffer, y así entregar diez canciones originales que se ponen el vestido de gala, se tiñen de soul y nos hacen esbozar una enorme sonrisa de felicidad.
Pokey LaFarge - Manic Revelations (2017): 01.- Riot In The Streets/ 02.- Must Be A Reason/ 03.- Better Man Than Me/ 04.- Bad Dreams/ 05.- Mother Nature/ 06.- Silent Movie/ 07.- Good Luck Charm/ 08.- Going To The Country/ 09.- Wellington/ 10.- I Will Never Change.
"Riot in the Streets" es la encargada de abrir este grandísimo disco, y es a su vez el primer single. Un tema que se va por souleares, un tema alegre y despreocupado, un temón que es candidato número uno a cerrar sus conciertos. Nada novedoso pero claramente siguiendo el abc de los grandes temas, los radiables, los de antaño. En eso no hay cambio, sigue mirando atrás Pokey, y lo hace con un clase y solvencia que apabulla. Estribillo pegadizo y arreglos maravillosos de viento. Requetemón. "Must be a reason" sigue con la vena soul por montera, estamos ante una de mis canciones favoritas del disco y qué decir de "Better man than me", una cincuentada que quita el hipo. Dos temas fantásticos que completan una tripleta inicial para enmarcar. Con "Bad dreams" se da un respiro. Un medio tiempo delicioso, uno de esos temas que se te graban en el cerebelo y ya no puedes dejar de tararear. Llegando al ecuador del disco nos encontramos con otra canción de rompe y rasga. Tarantiniana a tope... "Mother Nature" es fantástica y tiene esa trompeta de otra galaxia y otro tiempo que vuelve a cualquiera tarumba. El mejor disco de Pokey no afloja, no baja la calidad y eso por ejemplo lo confirmamos al escuchar "Silent Movie" y "Good luck charm". Para el final Pokey nos tenía reservada una joya que responde al nombre de "Going to the country", una muy marca de la casa, con su toque cinematográfico. "Wellington" es trotona, simpática y muy de pub, mientras que en el cierre con "I will never change" vuelve a soulearse un algo, y nos da pistas de hacia donde se dirige musicalmente. El señor LaFarge entrega un disco soberbio, uno de los discos ocultos del año que a buen seguro uno pierda unos minutos en escucharlo acabará por enamorarle.
"Riot in the Streets" es la encargada de abrir este grandísimo disco, y es a su vez el primer single. Un tema que se va por souleares, un tema alegre y despreocupado, un temón que es candidato número uno a cerrar sus conciertos. Nada novedoso pero claramente siguiendo el abc de los grandes temas, los radiables, los de antaño. En eso no hay cambio, sigue mirando atrás Pokey, y lo hace con un clase y solvencia que apabulla. Estribillo pegadizo y arreglos maravillosos de viento. Requetemón. "Must be a reason" sigue con la vena soul por montera, estamos ante una de mis canciones favoritas del disco y qué decir de "Better man than me", una cincuentada que quita el hipo. Dos temas fantásticos que completan una tripleta inicial para enmarcar. Con "Bad dreams" se da un respiro. Un medio tiempo delicioso, uno de esos temas que se te graban en el cerebelo y ya no puedes dejar de tararear. Llegando al ecuador del disco nos encontramos con otra canción de rompe y rasga. Tarantiniana a tope... "Mother Nature" es fantástica y tiene esa trompeta de otra galaxia y otro tiempo que vuelve a cualquiera tarumba. El mejor disco de Pokey no afloja, no baja la calidad y eso por ejemplo lo confirmamos al escuchar "Silent Movie" y "Good luck charm". Para el final Pokey nos tenía reservada una joya que responde al nombre de "Going to the country", una muy marca de la casa, con su toque cinematográfico. "Wellington" es trotona, simpática y muy de pub, mientras que en el cierre con "I will never change" vuelve a soulearse un algo, y nos da pistas de hacia donde se dirige musicalmente. El señor LaFarge entrega un disco soberbio, uno de los discos ocultos del año que a buen seguro uno pierda unos minutos en escucharlo acabará por enamorarle.
Nunca pensé que "Something in the Water" fuese especialmente inferior al anterior y asi lo comenté, pero tras leerte y sin haber escuchado aún este, me veo disfrutando de lo lindo con Pokey.
ResponderEliminarAbrazos