Leonard Cohen: Old Ideas (2012)

Fue el primer disco con el que me hice este 2012 pero dichoso de mí aún no sabía que este iba a ser el año de la arruga. No soy yo precisamente un gran sabedor de Leonard Cohen, no soy ese tipo de persona que lo venera, que se sabe todos sus discos, todas sus canciones, todas sus letras, sus pausas, sus inflexiones (aunque tal vez debería serlo). Tampoco puedo presumir de tener la mayoría de su discografía, la verdad es que sólo poseo su debut de 1967 “Songs of Leonard Cohen” con el que muchos serían considerados genios y leyendas, y un recopilatorio muy completito, uno de esos “Essential”. Ya sé que no es manera de tratar a Lenny pero ese tipo de música no es la que suelo consumir habitualmente, suelo dejarla para momentos concretos pues aunque es de suma belleza también lo es de melancolía. Suelo escucharla en solitario, con un poco de depre a cuestas, con una copa de vino acompañado por el ruido de la lluvia y ese olor que deja una vez se ha ido. Por eso una vez adquirido el disco y escuchado, lo dejé reposar. No merecía escuchar algo tan bello, yo no, es demasiado bueno y demasiado bonito. Lo dejé reposar, lo dejé respirar. Cada mes recurría a él en un par de ocasiones. Solos los dos, en la penumbra. Y desde luego lo he disfrutado de lo lindo. Casi doce meses más tarde, compilando y repasando críticas de discos de este 2012 para elaborar el top de lo mejor de cada año me sorprendo a mi mismo al no encontrar la crítica del disco, y es que no la hice. Pensaba yo que sí, que sí la había publicado, porque hacerla la hice. Busqué en “mis documentos” y allí estaba ella, la leí y la eliminé. Basura. Había realizado el texto con apenas un par de escuchas y aún no sabía lo que tenía delante. Que qué es? Pues una obra maestra de un señor de 78 años, canadiense para más señas (qué tendrá Canadá?) que te entra suavemente, te envenena la sangre y acaba contigo. Una deliciosa muestra más de “la arruga”, sí, en la año de Bob, Neil, Bill, Kevin, Ry, el Doctor, Paul y no sé cuantos más. 

Leonard Cohen – "Old Ideas" (2012): 01.- Going Home/ 02.- Amen/ 03.- Show Me the Place/ 04.- The Darkness/ 05.- Anyhow/ 06.- Crazy to Love You/ 07.- Come Healing/ 08.- Banjo/ 09.- Lullaby/ 10.- Different Sides.  

Un servidor no colocará, como podréis ver en unos días, a Lenny en su top 10, ya veréis las razones y las pautas que he seguido para elaborar la lista, pero básicamente es que hay otros discos más o menos del nivel (a veces de algo menos para ser sincero) que me han hecho disfrutar más (por ser más alegres) y al final los he acabado escuchando tropecientas veces, pero es que como dije, “Old ideas” no es un compañero dicharachero con el que irte de copas, es más bien ese amigo con el que ahogas las penas. La mejor crítica que he leído es de Joserra de la Land que como siempre se entrega en cuerpo y alma, es pura pasión, puro romanticismo lo suyo. No hay mucho más qué decir ni mejor, pero aquí estáis así que os diré cuatro cosicas sobre el disco. Sí, estamos ante viejas ideas, tan viejas y tan buenas que hoy parecen nuevas. Suena todo o casi todo a algo que ya ha hecho pero a su vez todo suena propio, todo suena nuevo. La obertura con “Going home” deja claro de primeras que no es un disco más, tal vez con Lenny nunca lo sea, pero aunque está muy en forma ha puesto toda la carne en el asador y debido a su ritmo creativo podría ser su último disco (esperemos que no sea así). “Amén”, “Show me the place” y “Darkness” forman una tripleta ganadora de calidad pasmosa e inigualable. “Amén” es una de las canciones del disco, tono jazzístico muy en la línea de lo que suele hacer el señor Waits pero sin duda mejor, con violines y un precioso banjo. Si decíamos que “Amén” es una joya, “Show me the place” no le va a la zaga, ambas son las dos canciones del disco. Tremendas. Y “Darkness”.... con ese toque negroide, con ese regusto a gospel... Oh! Delicioso!. La cosa sigue, y no me quiero hacer pesado, pues es difícil, mucho, hablar sobre algo tan bello sin quedarse corto y sin ser pedante. “Anyhow” es acojonante, y “Come Healing” y “”Different sides” que cierran el disco también. Todo tan arrugado, tan bello...... Sé que cuando veáis el top de lo mejor del año para un servidor pensaréis cómo puedo poner ahí a Leonard si he dicho lo que he dicho, pero es que te llena tanto el alma que te la destroza, es demasiado bueno para mí, francamente, no lo merezco.