Noé (2014)

Aronofsky. Director que me sorprendió con un inolvidable debut en la dirección en la historia del cine. En 1998 firmó su primer largometraje, "Pi, fe en el caos". Una tremenda película que descolocaba y embrujaba a la misma vez. Extraña, caótica, misteriosa y adictiva. Un peliculón. Luego en mi opinión se ha ido diluyendo aunque nunca entregase película mal, pues podemos discutir si "El luchador" o "Cisne Negro" son para tanto o no, pero malas desde luego tampoco. El problema es que parece que le falta algo de identidad, su propio estilo. En el debut sobrevolaba sobre nuestras mentes la cabeza borradora de Lynch y en "Cisne Negro" había dejes a mi adorado Polanski. Y entonces un día decido ponerme a ver "Noé" del gladiador Crowe, y empieza el film, y veo como rápidamente se explica con originalidad visual la creación del paraíso, y el fin de Adan y Eva, y el tremendo suceso entre Caín y Abel... y luego salen unos gigantes de piedra que me descolocan y me hacen flipar. Qué coño es esto? primero os diré que lo que pensaba que iba a ver era "Moisés", también con Crowe pero con Scott al mando, y me sorprende ver que es "Noé" y su director Aronofsky... tanto da, la voy a ver igual... Pero alucino como se explica la historia pues la historia bíblica de Noé es de las mejores, es cruel, muy cruel... Y aquí está todo explicado de manera libre y futurista. Es un film totalmente fallido, desde la dirección se intenta a cada plano maravillarnos, y eso como mucho lo hacía Kucrick y pocos más, intenta darnos moralina con una historia que moldea a su antojo para entregarse a las manos del Blockbuster filibustero, sí, ese que domina Bruckheimer o como cojones se escriba. En cuanto a las actuaciones... pésimas. Crowe podría estar interprentado a Moisés, a Noé, al Gladiator o al Carnicero del mercado de al lado de casa. Inexpresiva cara, incapaz de expresar sentimientos y menos que lleguen al espectador. Se agradece que esté Jennifer Connelly y Anthony Hopkins, una porque es guapísima y otro porque es una leyenda, pero no dejan de ser florero y cuadro respectivamente en esta película. Como anécdota sale Hermione, perdón, Emma Watson... , otro florero. Y nada más. otra paja mental de Aronofsky que no sabe si quieres ser Lynch o Bruckheimer.