Un ser llamado Guzzest. Capítulo 47: Light my fire‏

- Sí. Sí doctor Nikochan, lo que usted diga... Tranquilo doctor. Ude está tranquilo, no causará problemas, no les hará nada, de momento... Sí, doctor, todo está listo.. sí, el Momofuku está listo, y los dos polluelos también lo están para ser sacrificados... de acuerdo doctor, todo preparado a medianoche.. hasta la vista entonces.- Una voz misteriosa que salía de detrás de la puerta del cuarto despertó a Guzzest, eso y el llanto histérico de Flush con el que comenzaba su décimo novena crisis nerviosa. Ambos estaban amarrados a una silla, desnudos, aterrados, desconcertados y con un sudor frío que les recorría el cuerpo hasta donde la espalda pierde su nombre. – Maldito sea el enano verde, caraculo! Me ha tendido una trampa. Joder, no estaba atrapado en ningún sitio, y ya tenía el Momofuku. Maldición. Y encima necesitaba dos pringados para ser sacrificados y ya los tiene. Ggragajajaja!. - gritó Guzzest con cara de tonto.- Vamos a morir, vamos a morir.- repetía una y otra vez Flush mientras se balanceaba y estiraba los brazos todo lo que podía para forzar los nudos de las cuerdas y así liberarse. - Vamos a morir, y yo no quiero morir. - repetía Flush sin para de llorar. Fue entonces cuando Guzzest empezó a mirar cada detalle de la habitación, cada rincón, cada objeto, pero allí la verdad no había casi nada, un armario ropero, una ventana, un autorretrato de Ude, una puerta que conducía al exterior y unos candelabros con velas que proporcionaban la poca iluminación que tenía el cuarto. Guzzest comenzó a tambalearse de un lado a otro mientras susurraba: “You know that it would be untrue.You know that I would be a liar. If I was to say to you. Flush, we couldn't get much higher. Come on baby, light my fire..”, y gracias a su excesivo volumen y peso consiguió volcar la silla y los dos cayeron de lado al suelo, cosa que puso aún mas nervioso a Flush. Guzzest alargó su peluda pierna y con un gesto seco digno de una tortuga ninja cortó las velas del candelabro con la uña-mejillón que tenía en su pie. Pronto la estancia empezó a quemarse, Guzzest acercó las manos al fuego y la cuerda cedió, al fin era libre, agarró los candelabros y los tiró por la ventana rompiendo el cristal y dejando a Flush en el suelo se metió velozmente en el armario donde sólo había un abrigo de visón. No pasó ni un minuto y el esbirro de Nikochan ya había llegado, entró y apagó el fuego de un escupitajo, golpeó a Flush y se lo cargó a la espalda, inspeccionó seguidamente todo el cuarto, abrió el armario pero allí no había nadie, miró por la ventana y enseguida llamó a Nikochan. - Perdone que lo despierte doctor, pero parece que Guzzest ha escapado- dijo el esbirro con miedo. - Escapado, escapado? Eres un inútil Pini, no sabes hacer nada bien, has mirado bien? Seguro?.- preguntó Nikochan. - Sí doctor, aquí no hay nada, un armario vacio y una alfombra de oso en el suelo, creo que escapó por la ventana.- dijo Pini con seguridad. - Da lo mismo, en unas horas estaré allí, suelta a Ude, él se ocupará de Guzzest, y ten todo preparado para la ceremonia, no quiero fallos, todo tiene que salir como había planeado, mañana por la noche seré el amo del mundo, del planeta, de la galaxia, del universo, todo será mío, ja, ja, ja, míooo, jua,jua, miomiomiiiio, je, je…!!!... Come on Guzzy, light my fire and come on Flushy, light my fire. Try to set the night on fire. Try to set the night on fireeeeeeeee!!!!!