Juan José Campanella es un tipo con mucho talento, creo que eso no está bajo sospecha, con sólo mirar su filmografía y comprobar la calidad de la misma a uno le viene ganas de ver su último trabajo, saber cosas de sus futuros proyectos y revisar alguna de sus antiguas películas, films como “El mismo amor, la misma lluvia” (2000), “El hijo de la novia” (2001) o “Luna de Avellaneda” (2004) demuestran que hay vida inteligente más allá de Hollywood, en mi opinión hay vida a pesar de Hollywood pero eso es otro tema. Campanella a partir del 2004 se harta de dirigir episodios de teleseries exitosas sobretodo de “Ley y Orden” y algún que otro episodio de “House”, por suerte para todos nosotros este mismo año cogió el toro por los cuernos y como en sus últimos trabajos crea un buenísimo guión que él mismo se encarga perfectamente de dirigir, el film lleva por título “El secreto de sus ojos” y cuenta de nuevo con su actor fetiche Ricardo Darín.
SINOPSIS: Benjamín Espósito, secretario de un Juzgado de Instrucción de la Ciudad de Buenos Aires, está a punto de retirarse y decide escribir una novela basada en un caso que lo conmovió treinta años antes, del cual fue testigo y protagonista. Su obsesión con el brutal asesinato ocurrido en 1975 lo lleva a revivir aquellos años, trayendo al presente no sólo la violencia del crimen y de su perpetrador, sino también una profunda historia de amor con su compañera de trabajo, a quien ha deseado y amado fervorosamente y en silencio durante años. La novela que escribe Espósito nos hace recorrer los años 70, cuando en Argentina se vivían épocas turbulentas, el aire estaba enrarecido y nada era necesariamente lo que parecía ser.
La película no es que sea buena, es que es cojonuda. Hacía muchísimo tiempo que no veía algo tan bueno, tan bien rodado y tan bien narrado. Lo de Darín es de traca, pedazo de actor, en mi modesta opinión es el mejor actor de habla hispana del momento, un tipo que con sólo la mirada te transmite millones de sensaciones. Pero la verdad es que todo el reparto está de lujo, la interpretación que Guillermo Francella hace de Sandoval, el amigo y subordinado de Espósito (Darín) es impresionante, incuestionable, simplemente magnífica. Lo mejor que tiene el film es esa clásica combinación de drama, romance y cine negro, la historia de amor es increíble y a mi parecer muy real, en eso colabora y mucho Soledad Villamil con una interpretación sobresaliente, pero lo que se lleva la palma es esa historia detectivesca en busca de un asesino violador que dura nada más y nada menos que veinticinco años, y finaliza con un final discutible pero efectivo, digo discutible porque es lo único que la prensa especializada ha podido criticar aunque personalmente me parece cojonudo y bastante acertado. Creo que estamos ante uno de los films imprescindibles del año, uno de los mejores de la década ahora que se lleva tanto hacer lo mejor y lo peor de la misma, lo que está claro es que tiene que verse, no defraudará.
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