Momofuku, lo nuevo de Elvis Costello

No soy un experto en Costello, creo que tal vez no debería opinar libremente sobre su obra, por respeto al otro Elvis y a Guzzest, claro, pero me apetece hablar de Declan Patrick McManus que es como se llama de verdad este impresionante músico británico que desde 1977 hasta 1982 factura siete discazos de toma pan y moja, a cual mejor, bueno podría ser hasta el 86 y englobar una decena de discos, podríamos decir que su época en Columbia fue fantástica, luego habrá algún pico de calidad pero en la segunda mitad de los ochenta y durante los noventa le pierdo un poco la pista, tal vez por su falta de frescura o por la búsqueda de nuevos sonidos, que coño, es que la calidad baja aunque muchos o alguno digan lo contrario, pero según críticos y seguidores en este nuevo siglo tiene un rebufo y empieza a facturar otra vez grandes discos, "The delivery man" sería un buen ejemplo, como alguno de sus coetáneos y como el buen vino mejora en muchas cosas con la edad, y una de sus mejoras parece ser la vuelta a un sonido digno de la época de Columbia, no tan fresco y radiante, pero me vale, este nuevo giro hacia sus años mozos lo podemos sentir en el disco del 2008 Momofuku, Costello junto a The Imposters factura un disco que en principio sólo iba a editarse en vinilo aunque finalmente el otro Elvis se rajó, lástima, hubiese sido un buen golpe a la industria, eso no quita para que el disco sea cojonudo, no a la primera escucha, ni a la segunda, como los buenos discos, los de verdad, no los inmediatos ni los de usar y tirar, Momofuku se va descubriendo como un álbum espectacular a cada escucha, cada vez descubres cosas nuevas, cosas excelentes, detallitos, cosicas varias que provocan que cada día tengas una canción favorita, así pasa el tiempo, y, Momofuku, a pesar de la rotación de discos en el mp3 continúa sonando día tras día, un magnífico suplente al que hincarle el diente, el mejor sexto hombre que dirían en baloncesto,junto al 22 dreams de Weller lo mejor del año sin ninguna duda y lo digo ahora que aún estamos a Julio. Momofuku contiene una colección magnífica de canciones pero en este justo momento me atrevo a destacar “Turpentine” con esa percusión y esa voz radiofónica, “Harry Worth” juguetona canción con ritmos caribeños, “Mr. Feathers” un clásico con aromas a lo Kink, “Flutter and Wow” un medio tiempo fantástico y como no “American Gangster Time” digna de su mejor época, pero ya os digo que si me preguntáis mañana seguramente os diré otra cosa, pero estar seguros que seguiré hablando muy bien de este disco de Elvis Costello, un grande, un genio vivo en una época de mediocres, grupos revival, retornos y reunificaciones indeseables, un tipo que después de mas de treinta años de carrera, mas de veinte discos que superan el notable y media docena de clásicos nikochianos es capaz de a sus casi 55 tacos seguir facturando grandes discos, no es que no se arrastre es que como mi admirado y querido Weller, ha dado definitivamente un puñetazo en la mesa para poner a cada uno en su sitio.

Momofuku


1. No Hiding Place
2. American Gangster Time
3. Turpentine
4. Harry Worth
5. Drum and Bone
6. Flutter and Wow
7. Stella Hurt
8. Mr. Feathers
9. My Three Sons
10. Song With Rose
11. Pardon Me Madam, My Name Is Eve
12. Go Away

5 comentarios:

  1. Para mí es su mejor disco desde el cruelmente ignorado "Brutal youth" (94)...Los otros tres discos "normales" que van en medio (quitando las magistrales pajas artísticas de turno) ofrecen canciones determinadas (the other end of the telescope, you bowed down, tart, my little blue window, bedlam...)que valen por millones de elepés actuales enteros pero que en verdad no alcanzan el nivel general de aciertos de este nuevo álbum al que ni le sobra ni le falta nada (hasta el título es cojonudo !).

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  3. Como única crítica (amén de alguna cosica con la historia del tipo...), el poner en un mismo contexto a Weller y al gafas...Por excelente que haya sido Paul en parte de su carrera no alcanza ni de coña el status de maestro que atesora Patrick Declan Aloysus MacManus (el último realmente grande, firmando con nombre propio, junto al Boss)...

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