Me cago en la puta!. Vaya decepción me he llevado, y por partida doble. Vamos por partes. Primero tenemos el nuevo disco del cantautor de Nebraska afincado ahora por tierras valencianas debido a que suele beneficiarse a una autóctona con ínfulas de artista multidisciplinar, pa’cagarse nen. El amigo Josh no parece el mismo que hizo el magnífico “1972” (2003) o “Nashville” (2005), aunque la verdad, este bajón de calidad se veía venir, teníamos indicios como el de “Subtítulo” (2006) y “Country mouse, city house” (2007) que si bien no eran la repanocha sí contenían media docenas de canciones respetables aunque ese acercamiento hacia la sonoridad de “Els Pets” hace que me repelan cada vez más. La guinda definitiva la puso el propio Rouse el verano pasado cuando presentó las que serían sus nuevas canciones en “L’Auditori” y además repasó algunos de sus éxitos todo demasiado sosaínas, aburrido, previsible, falto de chispa y trempera, y con alguna composición que daba vergüenza ajena como “Valencia” que por cierto incluye en su decepcionante nuevo disco.
“El Turista” (2010) es más de lo mismo, más acústico si cabe, más brasileño pero demasiado aposentado en la sosería y la ñoñería, podríamos decir que la única composición digna del disco es “Lemon Tree” y que, como siempre, le sobran las canciones en castellano, y es que hay demasiadas en el disco, horrible “Duerme, Mobila”, vergonzosa “Messie Julian”, apestosa “Valencia” e insoportable “Las Voces”. Simplemente patéticas. El disco me ha aburrido muchísimo, y no pienso volver a escucharlo. Para olvidarme de esta mierdaca infumable abrí la carpeta de “My Music” y me puse lo nuevo de Ocean Colour Scene llamado “Saturday”...
...No es que este nuevo disco de Ocean Colour Scene sea una maravilla pero si lo comparamos con el de Josh Rouse es una obra maestra, aunque ambos se mueven en la regulería los Ocean tienen algo más de calidad en términos generales pero para ser sinceros llegan a aburrir, eso sí, sin hacernos vomitar, a partir de la mitad del disco. Entregan más de lo mismo, eso no es noticia claro, pero hay cierta falta de frescura, de chispa, de rabia digo yo. La cosa no empieza mal con “100 floor of percepcion” que tiene ese regusto tan Weller, pero ojo!, al loro!, que no son Weller eh!, que quede bien clarito. Son un mal sucedáneo como la sacarina lo es del azúcar, o la cola del Lidl lo es de la Cocacola. Me suena demasiado a refrito, demasiado a revival, demasiado a fórmula gastada. Vale que “Mr Mailey”, “Saturday” y “Magic Carpet days” aún funcionan, hay buenos músicos, coño, quién tuvo retuvo, pero parece que nos quedamos sin el menú y nos dan las sobras. Sin ser una terrible mierda como el disco del turista yankee, el disco de los Ocean no está al nivel de sus primeros trabajos, bueno, no creo que lleguen nunca a ese nivel, creo con total seguridad que su nivel es este, regulero alto. Aquellos dos primeros discos fueron un momento de lucidez, puede que de inspiración, siempre bien asesorados por el modfather. Así pues, después de que hayan conseguido que me siente mal el cafelillo de la tarde no puedo hacer otra cosa que ponerme el grandes éxitos de Hendrix a toda ostia y dejar que vuelva a hervirme la sangre y vuelva a sentirme un hombre y no una colegiala. Ya lo oígo, ahí viene….”Purple haze, all in my brain. Lately things don´t seem the same. Acting funny but I don’t know why. Excuse me while I kiss the sky…..”. Guaaaghhhh!!!
0 comentarios:
Publicar un comentario