Jeffrey Lewis & The Junkyard: “Em Are I” (2009)

En uno de esos clásicos “rampells” que me dan bastante “sovint” he decidido hacerme con un disco por su portada. No importa quién sea el artista, ni que tipo de música realice el mocetón, aquí lo importante es que la portada sea chula, y después lo que tenga que venir, vendrá. Antes estas locuras que me dan eran más fáciles que acabaran bien pues el vinilo tenía esa magia que lo hacía único, esas portadas enormes que eran en ocasiones obras de arte. Ya queda lejos, muy lejos, mi adquisición del disco de Talking Heads “Little Creatures” por su portada alucinante y gallumbera, gracias a eso empecé a disfrutar de las cabezas parlantes, ah, y además pagó mi hermano, ese sí fue un día grande. También es mítica mi elección de “Aqualung” sobre cualquier otro disco de Jethro Tull cuando aún no sabía nada del espectacular flautista del rock, claro, que eso es fácil con estos grupos. Puedo aseguraros que he tenido alguna que otra sorpresa negativa, bastante dolorosa y vergonzosa que mejor no os voy a comentar. Pero hoy he agarrado un disco con una portada espectacular, el disco lleva el nombre de “Em Are I” y su autor se conoce por Jeffrey Lewis & The Junkyard.

“Em Are I” (2009): 1 – Slogans; 2 - Roll Bus Roll; 3 - If Life Exists; 4 - Broken Broken Broken Heart; 5 - Whistle Past The Graveyard; 6 - To Be Objectified; 7 - The Upside-Down Cross; 8 - Bugs & Flowers; 9 - Good Old Pig, Gone To Avalon; 10 - It's Not Impossible; 11 - Mini- Theme = Moocher From The Future


El proceso es el siguiente: paseo por cualquier sitio donde haya una plétora de discos, me limito a grupos que no tengo ni puta idea de quienes son o que cojones tocan, voy mirando con paciencia las portadas, elijo una, pago y me voy pa casa. En el trayecto al hogar no puedo resistir la tentación de quitarle el precinto al disquito, y me pongo a mirar con detenimiento el libreto, que en este caso es de lujo. Miro los dibujitos, las letras, quién toca cada instrumento y por supuesto los agradecimientos, por si conozco a alguien o por si me nombra, quién sabe, a lo mejor sabe que soy el único retrasado en comprar su disco sólo al ver la portada. Finalmente me pongo el disco mientras busco información del intérprete. Y en este caso concreto descubro que Jeffrey Lewis es un jovencito novayorqués amiguito de The Moldy Peachers y Adam Green, y claramente relacionado con el “anti-folk” que estaba de moda hace unos añitos, si todas estas referencias no fueran suficientes añado que Eddie Argos de los Art Brut le reivindica en cada entrevista que le hacen, otros grandes seguidores de Jeffrey son los Herman Düne, toma pal frasco!. Ah, también descubro que este es su quinto disco aunque es el primero con The Junkyard (formado por su hermano Jack, y por David Beauchamp). Y a todo esto me sorprendo y congratulo al leer que él mismo ha hecho el libreto y la portada, joder, Jeffrey es además de músico dibujante de cómics, que completillo el chaval. Y vosotros os preguntaréis: muy bien Niko, eso está muy bien, pero… y la música?, la música que tal? Porque, te has comprado un disco no?. Pues sí, coño, me he comprado un disco, y la verdad es mas interesante de lo que pensaba, aunque el anti-folk brille por su ausencia, abandonó el estilo cuando se le unieron The Junkyard. Casi mejor, porque en el disco se pueden encontrar diferentes estilos: folkie alternativo, rock, indie-pop, guitarras noventeras, y otras cosicas que deberíais descubrir por vosotros mismos. Del cancionero me encanta el inicio del disco con la supervitaminada “Slogans” que seguro nació tras escuchar toda la música que le gusta a Guzzest, y es que Jeffrey Lewis es un tipo que le encantaría a mi vecinito, y ahora es cuando sorprenderé a Guzzest, la cojonuda canción “Good Old Pig, Gone To Avalon” tiene un riff de guitarra cortesía de J.Mascis, a eso le tenemos que sumar las voces que son magistralmente cutres y callejeras. Además de estas dos joyas destacaré “Roll Bus Roll”, “Broken Broken Broken Heart”, y “To Be Objectified”. Sorprendentemente uno no puede tener mas suerte al escoger un disco por la portada, no sólo por acertar, que mira que es difícil con la mierda que se hace hoy en día, sino también por enlazar sin querer con lo escuchado durante estos últimos dos meses. Suerte?, podría ser, aunque a mi me gusta llamarlo "conocimiento" y “buen gusto”.