Aunque a la prensa especializada y al gafapastismo al uso le apetezca reabrir una guerra sucia entre escoceses e ingleses, y por todos los medios traten de enfrentarlos y compararlos, yo creo que no hay comparación posible. Vale que tanto Franz Ferdinand y Arctic Monkeys tuvieron un debut atronador pariendo un primer disco descomunal, está claro que eran dos putos clásicos nikochianos instantáneos. Los de las faldas de cuadros debutaron antes que los monos del ártico, y es que hasta este tercer disco sus propuestas no habían coincidido nunca, el debut de los Ferdinand fue en el 2004 con “Franz Ferdinand”, disco que tenía 11 canciones que eran 11 singles, 11 pelotazos absolutos. Aún recuerdo la sensación de alegría y trempera que me dio el inicio y el cambio de ritmo de Jacqueline, qué barbaridad, qué bueno es ese disco!!, disco que contenía joyas como “Jacqueline”, “Tell her tonight”, “Take me out”, “The dark of matinée”, “Auf auchse”, “Cheating on you”, “This fire”, “Darts of pleasure”, “Michael”…., joder, prácticamente todo el álbum, bueno, todo. Los de Sheffield no se quedaron atrás y en 2006 publicaron el clasicote “Whatever People Say I Am, That’s What I’m Not” que no le iba a la zaga al de los escoceses con una plétora de excelentes temas pero que con el paso del tiempo he de reconocer que es algo inferior. Me cuesta mucho reconocerlo porque el estilo de los monitos me gusta algo más. Y claro, canciones como “The view from the afternoon”, “I bet you look good on the dancefloor”, “Fake tales of San Francisco”, “Dancing shoes”, “You probably couldn’t…” o “When the sun goes down” me llevaron fácilmente al huerto. Ay va que chorrazo!!!
El segundo trabajo de los Ferdinand llegó en 2005 bajo el título “You Could Have It So Much Better” y nos proporcionaba un gatillazo instantáneo, era como tirarse un cubo de agua helada por el cuerpo en pleno invierno. Joder, vaya bajón. Y ojo, que el disco malo no es, es bastante bueno pero ya empezaban a meternos alguna canción de relleno con eso de la típica excusa de abrirse de mente y de estilo, que no de piernas, eso a lo mejor lo hacen otras. Paparruchas, los temas que funcionaron fueron los que eran fieles a su estilo, y punto. Porque de temazos haberlos, haylos. A las pruebas me remito: “The fallen”, “Do you want to”, “This boy”, “Walk away”, “Eleanor put your boots on” y “I’m your villain”. Sin embargo los Arctic monkeys crecieron con su segundo trabajo titulado “Favourite worst nightmare” (2007) que mejoraba la fórmula aplicada en su disco de debut, nutriendo al disco de poderío, de guitarras afiladas y de ritmo. Un segundo trabajo muy, pero que muy superior al de los escoceses. La sensación era que unos iban para arriba y otros para abajo. Unos se acercaban peligrosamente al término “Hype” y otros lo hacían, también con cierto peligro, a la denominación de “los nuevos salvadores del rock británico”. Y ni una cosa ni otra, que en las islas desde los Clash no existe ni un grupo decente y de eso ya han pasado varias décadas. El disco era especialmente bueno, desde el inicio avasallador de “Brianstorm” a la calidad indiscutible de “Teddy picker” o “Fluorescent adolescent” pasando por joyas como “Do me a favour” o “Balaclava”. A todo esto, el líder de los monitos del ártico se casca un nuevo proyecto, “The last shadow puppets” que hace temblar al grupo, al final aunque el resultado fue notable todo se quedó en un caprichito.
“Tonight: Franz Ferdinand” (2009)
1.- Ulysses
2.- Turn It On
3.- Kiss Me
4.- Twilight Omens
5.- Send Him Away
6.- Live Alone
7.- Bite Hard
8.- What She Came For
9.- Can´t Stop Feeling
10.- Lucid Dreams
11.- Dream Again
12.- Katherine Kiss Me
En este 2009 han aparecido los nuevos trabajos de ambas bandas. En los dos casos son su tercer trabajo. Y en los dos casos se han producido cambios, en mi opinión, importantes. Franz Ferdinand golpeó primero a principios de año con “Tonight”. El primer single fue “Ulysses”, y claro no sorprende pero vaya chorrazo, “Turn it on” es bailable de lo lindo, molona sin mas, muy Ferdinand, y “No your girls (kiss me)” es de lo mas ochentera, tira algo a Roxy Music por no decir que prácticamente lo copian, pero desde luego es un buen espejo en el que mirarse. Esas tres para empezar no están nada mal, luego podemos encontrar otros pelotazos como “Bite hard”, “What she came for” o “Twilight omens”. El disco es sexy, revoltoso, y algo puto, en su momento pensé que dedicándole más atención, más escuchas la cosa tendría un subidón importante. Pero no. Se quedó en un divertimento temporal, en pura fiesta, pura fanfarria aunque sin la efervescencia del primer beso.
Arctic Monkeys llegan a este 2009 con “Humbug” bajo el brazo. Influidos, tal vez demasiado, por la aventura de Turner con “The last shadow puppets” y por supuesto por la presencia en la producción de la reina de la edad de piedra “Josh Homme” el grupo nos ofrece un paso mas a la madurez como banda, disfrazando su sonido de un aroma americano que seguramente se adueñó de ellos en las sesiones de grabación en el desierto de Mojave. El single de presentación que es bastante bueno es lo más parecido a su sonido habitual, por cierto la canción titulada “Crying lightning” tiene uno de los videoclips más sosainas que he visto en tiempo. La canción, “The Propeller”, que abre el disco es sensacional, como lo son también “Dangerous animals” y “Potion aproaching”. La huella de Homme se deja notar sobremanera en “Pretty visitors” y “Dance little liar” donde escuchamos a un Turner diferente, haciendo cosas con la voz y con el ritmo que no se había atrevido a hacer hasta ahora. Este tercer disco no llega a la altura de “Favourite worst nightmare” pero supone un cambio de registro interesante que no les hace caer, como a sus vecinos, en lo mismo de siempre y que para darle la vuelta a la tortilla editan un disco de remezlcas que no lo son del todo (Blood, 2009) de su nuevo y decepcionante disco. Arctic Monkeys sorprenden con un cambio de rumbo arriesgado pero creo que necesario para no caer en el hype, en darle siempre a la gente lo que quiere, en el riff bailongo y tontorrón típico de festival veraniego que tantas veces repiten sus vecinos escoceses, y de lo que tanto se están lamentando, pero así son los Ferdinand y así nos cuentan sus cuentos. Sin embargo los ingleses quieren quitarse de encima la etiqueta de hacer siempre la misma canción que aunque cojonuda puede llegar a aburrir, pero para eso han tenido que dar un golpe de timón y aunque cuenten para la ocaión con Mr. Homme, el resultado no va a gustar a todos. A mi particularmente sí me gusta. Las dos bandas son de lo mejorcito que hay en estos momentos, de eso creo que no hay duda, el camino que tomarán en el futuro nadie lo sabe, ni ellos lo saben, lo único que saben y quieren es que no se les recuerde como a unos "humbugs", como a unos farsantes del rock.
“Humbug” (2009)
1.- My Propeller
2.- Crying Lightning
3.- Dangerous Animals
4.- Secret Door
5.- Potion Approaching
6.- Fire & The Thud
7.- Cornerstone
8.- Dance Little Liar
9.- Pretty Visitors
10.- The Jeweller’s Hands
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