Reykavík-Rotterdam (2008)
La literatura nórdica está de moda, cualquier escritor que pretenda ganar cantidades de dinero a mansalva y convertir su libro en un nuevo best seller sólo tiene dos opciones: una es lógicamente hablar de vampiros o magos gafotas, y la otra es nacionalizarse sueco. Ninguno de estas dos premisas las cumple Arnaldur Indridason pues es un reputado escritor islandés aunque claro en Islandia a parte de bacalao, pocas horas de luz y un frío de cojones no hay muchas cosas que estén en la cresta de la ola. Arnaldur colabora en la adaptación de su obra “Reykavík-Rotterdam” al cine que dirige con muy buen hacer el también islandés Óskar Jónasson. El film tiene unas actuaciones algo toscas aunque muy creíbles y como buen film nórdico es más frío que un helado de nitrógeno líquido pero claro, esa es una de sus señas de identidad. La historia se centra en un guardia de seguridad y ex-contrabandista de alcohol en la ruta de Islandia-Países Bajos que pasa por unos difíciles y casi insuperables problemas financieros. Al reencontrarse con un viejo amigo se siente tentado a volver a sus negocios ilegales y probar suerte una vez más. Bueno, parece algo típico y tal vez lo sea este guión, no diré yo que no pero todo deriva en una muy buena historia de cine de policías por cierto muy bien parida, muy bien narrada y visualmente atractiva con un desenlace superior que te mantiene amarrado a la butaca, en mi caso estirado en la piltra totalmente intrigado por saber el final. El film que se rodó en 2008 pero que en el país de la bellota nos llega con dos años de retraso va descaradamente de más a menos. La novela no lo sé pero la película convence sin problemas, es por eso que no me sorprendo al leer que Hollywood lanzó sus redes y ya se está preparando el remake de turno. Si este film de primeras se hubiese gestado en yanquilandia con un reparto canalla y filmado de forma tarantiniesca se hablaría de tremendísima película pero la verdad es que nació en el país de los seis meses de luz non stop y eso descoloca a cualquiera. Buen film, buena historia. Todo muy pero que muy recomendable.
Pos ná... habrá que verla.
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