Parece ser que a muchas personas les jode que Jack White sea considerado un auténtico geniecillo del rock de los últimos años. La muchachada comenta que si es un snob sobrevalorado que se vistió de rojo y blanco para vender discos a los gafapastas como si antes ninguna banda de rock se hubiese preocupado por su imagen, y es que desde los Beatles a Bowie por poner ejemplos, que nadie se engañe, todo bicho viviente se ha preocupado por su aspecto y la puesta en escena. La imagen cuenta mucho en esto del rock además dudo que los gafapastas hayan escuchado alguno de los primeros discos de The White Stripes, supongo que “Elephant” debe ser la única referencia que tengan del gran Jack. A otro grupo de gentío le da por criticarle por imitar a Led Zeppelin en el tono de voz y en las guitarras, coño!, no creo que White tenga la culpa de tener esa voz es más, supongo que la aprovecha como puede. Creo que su voz es más nasal que la de Robert Plant y aún cantado mucho peor, pues no es cantante sino un guitarrista atómico, tiene su rollito como lo tienen otros que cantan como un grillo acatarrado, véase Dylan. Finalmente a otras tantas personas les molesta que White sea tan hiperactivo: The White Stripes, The Raconteurs y The Dead Weather son sus grupos, en el primero da rienda suelta a su creatividad autoimponiéndose limites que le hacen ser un puto genio, en el segundo le deja el mando a su amigo Brendan Benson para formar una superbanda de rock con sonido de los setenta, y en el último se encarga de la batería para tocar un heavy rock de lo más paranoico. Yo me considero un gran seguidor de White, me parece un crack absoluto y adoro su hiperactividad, me encanta que alguien que se dedica al rock en este siglo no sea un puto acomodado como la gran mayoría de bandas, me encanta en cualquiera de sus formatos, me encanta tanto en el rock clásico como en las locuras en que anda metido siempre, me encanta su blues, su voz y esos riffs de guitarra explosivos. Tal vez a alguien como Guzzest le moleste que esté tan arriba, que incluso haya dejado atrás a sus venerados Pixies pero claro decidme algo que venda más de veinte unidades que sea del agrado de Guzzest, el tiempo da y quita razones y Jack White ya tiene media docena de discos incuestionables y más de una década facturando excelente música. Particularmente el segundo disco de The Raconteurs es una puta maravilla y del dúo rojiblanco me quedo con tres auténticos pelotazos, tres putos clásicos nikochianos: De Stijl (00), White Blood Cells (01), Elephant (03).
Elephant (2003): 1. Seven Nation Army/ 2.- Black Math/ 3.- There's No Home for You Here/ 4.- I Just Don't Know What to Do with Myself/ 5.- In the Cold, Cold Night/ 6.- I Want to Be the Boy to Warm Your Mother's Heart/ 7.- You've Got Her in Your Pocket/ 8.- Ball and Biscuit/ 9.- The Hardest Button to Button/ 10.- Little Acorns/ 11.- Hypnotize/ 12.- The Air Near My Fingers/ 13.- Girl, You Have No Faith in Medicine/14.- Well It's True That We Love One Another.
El predecesor de “Elephant” sigue siendo uno de mis discos preferidos de todos los tiempos y la verdad es que puedo presumir de haber escuchado una gran cantidad de ellos durante toda mi vida y lo que te rondaré morena. A pesar de eso reconozco que en general “Elephant” es mejor, aunque no mi preferido. Lo tiene todo, tiene rock, tiene blues, tiene grandes riffs de guitarra, tiene canciones suaves y sexis, tiene grandes letras, tiene un sentido del humor excelente, y por supuesto tiene una canción que se vendió como churros, uno de esos himnos del rock and roll, tiene claro “Seven nation army”, puede que esto moleste al personal detractor de White pero es que la canción es cojonuda aunque la repitan ocho millones de veces cada día, o es que alguien considera “Come together” de los Beatles mala porque esté más sobada que el potorro de Jenna Jameson (aclaro que esta tipa es una gran actriz porno, coño!, de las mejores). Una gran manera de empezar un disco, con ese riff repetitivo, ese tempo y esa locura final con una guitarra orgásmica, luego nos remata con “Black math”, White muestra sus intenciones y sus señas de identidad, peazo de canción nenes. A partir de este momento lo que sería la cara "a" del disco se mete en territorios de una calidad abrumadora, firmando un triplete descomunal que te hace introducirte de lleno en el universo de “Elephant”, encontramos “There's no home for you here” que es White en estado puro, luego una versión del gran Burt Bacharach llamada “I just don't know what to do with myself” que incluso fue single del disco, y finalmente “Cold cold night” una deliciosa canción cantada por la reina del bombo, Meg. La cosa sigue con “ I want to be the boy to warm your mother's heart” que perfectamente podría haberse encabido en “White Blood Cells” y la extremada delicadeza de "You've got her in your pocket", a mi este tipo de canciones de White me desmontan, me encantan y me hacen enloquecer. Chapeau. “Ball and biscuit” es un puto blues de unos siete minutos con una intro muy stoniana no apta para primerizos. Una de mis favoritas. A partir de este peazo de blues comienza un festival de lo que podría haber sido una cara "b" acojonante de haberse editado de entrada en el clásico formato vinilero. Prácticamente las canciones están enlazadas y no dan tregua alguna, la cosa empieza con “The hardest button to button” que es prima hermana de “Seven nation army”, seguidamente una voz radiofónica, muy a lo Small faces, nos presenta la salvaje “Little acorns” para continuar con “Hypnotise” con ese ritmo garagero que la emparenta con “Fell in love with a girl”, aquí brilla con luz propia Meg aportando esa frescura juvenil que sin tomar aire engancha con “The air near my fingers” que tiene a un Jack White desbocadao y juguetón que tararea como un diablillo el estribillo. Antes de finalizar encontramos la rocanrolera clásica y algo piscotrópica “Girl, you have no faith in medicine” que huele a “white blood cells” que ni te cuento y finalmente la graciosa y divertida “ Well it's true that we love one another” cierra triunfalmente el álbum con la pareja marcándose un dúo en las voces junto a Holly Golightly que muchos recordaréis por cantar la cancionaca "There is an end" de The Greenhornes que aparecía en la película del mítico Jarmusch "Broken flowers". “Elephant” es una puta obra maestra de nuestros tiempos, está aunque a muchos les pese entre los tres mejores discos de la década pasada, y desde luego en mi opinión es todo un clásico, un clásico nikochiano.
Parece ser que a muchas personas les jode que Jack White sea considerado un auténtico geniecillo del rock de los últimos años. La muchachada comenta que si es un snob sobrevalorado que se vistió de rojo y blanco para vender discos a los gafapastas como si antes ninguna banda de rock se hubiese preocupado por su imagen, y es que desde los Beatles a Bowie por poner ejemplos, que nadie se engañe, todo bicho viviente se ha preocupado por su aspecto y la puesta en escena. La imagen cuenta mucho en esto del rock además dudo que los gafapastas hayan escuchado alguno de los primeros discos de The White Stripes, supongo que “Elephant” debe ser la única referencia que tengan del gran Jack. A otro grupo de gentío le da por criticarle por imitar a Led Zeppelin en el tono de voz y en las guitarras, coño!, no creo que White tenga la culpa de tener esa voz es más, supongo que la aprovecha como puede. Creo que su voz es más nasal que la de Robert Plant y aún cantado mucho peor, pues no es cantante sino un guitarrista atómico, tiene su rollito como lo tienen otros que cantan como un grillo acatarrado, véase Dylan. Finalmente a otras tantas personas les molesta que White sea tan hiperactivo: The White Stripes, The Raconteurs y The Dead Weather son sus grupos, en el primero da rienda suelta a su creatividad autoimponiéndose limites que le hacen ser un puto genio, en el segundo le deja el mando a su amigo Brendan Benson para formar una superbanda de rock con sonido de los setenta, y en el último se encarga de la batería para tocar un heavy rock de lo más paranoico. Yo me considero un gran seguidor de White, me parece un crack absoluto y adoro su hiperactividad, me encanta que alguien que se dedica al rock en este siglo no sea un puto acomodado como la gran mayoría de bandas, me encanta en cualquiera de sus formatos, me encanta tanto en el rock clásico como en las locuras en que anda metido siempre, me encanta su blues, su voz y esos riffs de guitarra explosivos. Tal vez a alguien como Guzzest le moleste que esté tan arriba, que incluso haya dejado atrás a sus venerados Pixies pero claro decidme algo que venda más de veinte unidades que sea del agrado de Guzzest, el tiempo da y quita razones y Jack White ya tiene media docena de discos incuestionables y más de una década facturando excelente música. Particularmente el segundo disco de The Raconteurs es una puta maravilla y del dúo rojiblanco me quedo con tres auténticos pelotazos, tres putos clásicos nikochianos: De Stijl (00), White Blood Cells (01), Elephant (03).
Elephant (2003): 1. Seven Nation Army/ 2.- Black Math/ 3.- There's No Home for You Here/ 4.- I Just Don't Know What to Do with Myself/ 5.- In the Cold, Cold Night/ 6.- I Want to Be the Boy to Warm Your Mother's Heart/ 7.- You've Got Her in Your Pocket/ 8.- Ball and Biscuit/ 9.- The Hardest Button to Button/ 10.- Little Acorns/ 11.- Hypnotize/ 12.- The Air Near My Fingers/ 13.- Girl, You Have No Faith in Medicine/14.- Well It's True That We Love One Another.
El predecesor de “Elephant” sigue siendo uno de mis discos preferidos de todos los tiempos y la verdad es que puedo presumir de haber escuchado una gran cantidad de ellos durante toda mi vida y lo que te rondaré morena. A pesar de eso reconozco que en general “Elephant” es mejor, aunque no mi preferido. Lo tiene todo, tiene rock, tiene blues, tiene grandes riffs de guitarra, tiene canciones suaves y sexis, tiene grandes letras, tiene un sentido del humor excelente, y por supuesto tiene una canción que se vendió como churros, uno de esos himnos del rock and roll, tiene claro “Seven nation army”, puede que esto moleste al personal detractor de White pero es que la canción es cojonuda aunque la repitan ocho millones de veces cada día, o es que alguien considera “Come together” de los Beatles mala porque esté más sobada que el potorro de Jenna Jameson (aclaro que esta tipa es una gran actriz porno, coño!, de las mejores). Una gran manera de empezar un disco, con ese riff repetitivo, ese tempo y esa locura final con una guitarra orgásmica, luego nos remata con “Black math”, White muestra sus intenciones y sus señas de identidad, peazo de canción nenes. A partir de este momento lo que sería la cara "a" del disco se mete en territorios de una calidad abrumadora, firmando un triplete descomunal que te hace introducirte de lleno en el universo de “Elephant”, encontramos “There's no home for you here” que es White en estado puro, luego una versión del gran Burt Bacharach llamada “I just don't know what to do with myself” que incluso fue single del disco, y finalmente “Cold cold night” una deliciosa canción cantada por la reina del bombo, Meg. La cosa sigue con “ I want to be the boy to warm your mother's heart” que perfectamente podría haberse encabido en “White Blood Cells” y la extremada delicadeza de "You've got her in your pocket", a mi este tipo de canciones de White me desmontan, me encantan y me hacen enloquecer. Chapeau. “Ball and biscuit” es un puto blues de unos siete minutos con una intro muy stoniana no apta para primerizos. Una de mis favoritas. A partir de este peazo de blues comienza un festival de lo que podría haber sido una cara "b" acojonante de haberse editado de entrada en el clásico formato vinilero. Prácticamente las canciones están enlazadas y no dan tregua alguna, la cosa empieza con “The hardest button to button” que es prima hermana de “Seven nation army”, seguidamente una voz radiofónica, muy a lo Small faces, nos presenta la salvaje “Little acorns” para continuar con “Hypnotise” con ese ritmo garagero que la emparenta con “Fell in love with a girl”, aquí brilla con luz propia Meg aportando esa frescura juvenil que sin tomar aire engancha con “The air near my fingers” que tiene a un Jack White desbocadao y juguetón que tararea como un diablillo el estribillo. Antes de finalizar encontramos la rocanrolera clásica y algo piscotrópica “Girl, you have no faith in medicine” que huele a “white blood cells” que ni te cuento y finalmente la graciosa y divertida “ Well it's true that we love one another” cierra triunfalmente el álbum con la pareja marcándose un dúo en las voces junto a Holly Golightly que muchos recordaréis por cantar la cancionaca "There is an end" de The Greenhornes que aparecía en la película del mítico Jarmusch "Broken flowers". “Elephant” es una puta obra maestra de nuestros tiempos, está aunque a muchos les pese entre los tres mejores discos de la década pasada, y desde luego en mi opinión es todo un clásico, un clásico nikochiano.
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"Tal vez a alguien como Guzzest le moleste que esté tan arriba, que incluso haya dejado atrás a sus venerados Pixies, pero claro decidme algo que venda más de veinte unidades que sea del agrado de Guzzest...".
ResponderEliminarEjem... Anem by partes.
Hasta la primera coma la respuesta es: "me la pela lo que haga este tío sea lo que sea, ya ves lo que me molesta la cosa". Lo que sigue hasta la segunda coma es propio de un ignorante recalcitrante y de la peor calaña de lo que es la historia de la música popular del último cuarto de siglo. Y lo último sería un no acabar... ¿lo quieres por órden cronológico o alfabético ya te va bien?.
Lo de poner en el tapete "come together" con el "tun, tun tun tun tun tún" ya es para cagarse hasta la deshidratación terminal y prefiero no hacer leña, la verdad... Lo que no perdono es tener que leer nombres como Led Zep/Plant, Dylan, Beatles y demás en un texto vinculado a este gitano.
Rock sin pedigrí, del de corta y pega, plagiador por la curra, pre-diseñado hasta la extenuación, sin sangre real y para que gafapastas chupicombativos (como Nikochan, que lo és, y mucho, aunque nadie se lo haya contado nunca) se sientan la reostia de guays. Ay "juanito", si tuviera dieciséis no te digo que no, pero es que tengo más del doble y no tengo paciencia para tí y gilipolleces tendenciosas del estilo... El tipo me parece un cantante de karaoke del montón (en verdad me da bastante asco esa voz sobreafectada para tirarse el moco que no cuela a poco que hayas escuchado cuatro cositas) y un guitarrista cuya pericia tiene más que ver con subir el volumen del ampli que con otra cosa. En síntesis: pijigarage para novatos de mente simple con demasiados tiros por dar.
Pd. En su favor solo diré que prefiero que se lleve la pasta este que no el Yorke, el Bono, el cabronazo de los Coldplei (etc), puestos a choricear al personal.
Amén. hermano. Amén. Recuerda confesarte antes de ir a dormir.
ResponderEliminarAh! no sabía que te importase tan poco este tipo, ya veo como has pasado del tema...... Ejem, ejem.... Lo de gafapastas chupicombativo me ha llegado, je, je, ahora que.... todo el mundo utiliza lo de gafapastas para excluirse de su propia mierda sin saber que significa exactamente y para quién de veras se utiliza el adjetivo... Bueno, que le vamos a hacer. Que conste además que yo conocí a este grupo como a tantos otros antes de su inclusión en la lista de los más vendidos y a los que les chupan más la polla. Así que no me siento aludido con tonterías semejantes ni me apunto al carro de nada para sentirme "la reostia de guay". No me dejará de gustar algo porque tenga éxito. No soy tan pamplinas. Porque hay tambien los menosmola rocanroleros que se aferran a un melenas regulero que vendió algún que otro disco hace veinte años y ahora se pasea por los puestus dando pena vendiendo la moto al personal de que eso es auténtico e insuperable..... Esto es pa'veeeeeeeeerlo.
ResponderEliminarCoñe es que yo no hubiera puesto nada. Me he mirado el texto por encima (que es todo lo que me merece el prota del mismo) he visto mi pseudónimo por ahí en medio y por alusiones gratuitas no me quedó otra que cagarme en el tocomochero del Juanito Blanco... No utilices (y gratis, caradura) mi nombre como para dar caché a tus movidas retro-teenagers-hyperas y tan contentos.
ResponderEliminarNo si ahora tendré que pagarte royalties...... Además, no digo nada que sea mentira y en ningún momento te dejo mal. El tipo no te cae bien, te molesta que está tan arriba, y tienes que reconocer que algo tenga éxito masivo no es una cosa que llame tu atención.
ResponderEliminarPd: este calentón Guzzero puede haberse dado por la inminente vuelta al trabajo de Guzz. Hiiiiiiiii! Hooooooooo!. hi-hó! hi-hó! Silbando al trabajar. Cualquier que hacer. Es un placer... hi-ho, hi-ho.....