Para muchos terrícolas William Everett Preston no es otro
que el negrata con pelo afro que tocaba el pianito junto a los Fab Four en
el último concierto de estos en la azotea de Apple Records de Saville Row. Billy, para los amigos, es uno de esos excelentes músicos que han
tocado con los más grandes, un session man de lujo, un auténtico Dios de los
teclados. En su currículum además de haber trabajado con los Beatles que ya de por sí es la releche, juntos y
por separado, podemos destacar su participación con los Stones en Sticky, Exile, Goats head, It's only rock'n'roll y sobretodo en el “Black
& Blue”, cosa que me llena de orgullo y satisfacción, el quinto Beatle
u otro puto Stone?, y no quería yo olvidarme de su presencia junto a Ray Charles, Eric Clapton,
Elton John, Sam Cooke, Little Richard, Sly Stone... y no sigo porque no acabaría
nunca con este dichoso post. Por extrañas circunstancias un servidor dominaba
una gran cantidad de discos donde el Tejano (sí, coño, es de Houston, Tx) le
daba a los teclados pero en mi puta vida me había acercado a su obra en
solitario. Sí, leñe, Billy hizo carrera en solitario. Tiene un buen número de
discos bastante bien considerados así pues debido a lo frío que me están
dejando los estrenos del 2012 y la mandra que me da ponerme a escuchar los pendientes
del recien acabado 2011 pensé en Billy y me tiré a la piscina. Podría tirar de
Allmusic, luego de Spotify y luego de megauploads al uso pero un servidor se
coge el metro, se va al centro y sin pensárselo dos veces se hace con su disco de
1970 titulado “Encouraging words”. Sólo con la portada sabía que ese era el
disco por el que tenía que empezar. Oh! Que tremendo lo de fuera..., y lo de
dentro. No me lo acabo nens!, qué gusto, qué placer, qué trempera da arriesgarse
como antaño en la compra, desenvolver el disco en el metro, subir las escaleras
casi corriendo, poner el disquito y tirarse en el sofá a escucharlo mientras
uno lee los músicos de cada canción, los agradecimientos, las foticos... Y es
que ahora todo va demasiado rápido, y a veces perdemos todos un poco el norte
pero ese es otro tema que no viene a cuento. Vamos ya con el señor Preston y
ese pedazo de disco que un buen día se sacó de la chistera con la ayuda de unos
cuantos buenos amigos.
Billy
Preston - “Encouraging words” (1970): 01.- Right Now/ 02.-
Little Girl/ 03.- Use What You Got/ 04.- My Sweet Lord/ 05.- Let The Music Play/ 06.- The Same Thing Again/07.-
I've Got A Feeling/ 08.- Sing One For The Lord/ 09.-
When You Are Mine/ 10.- I Don't Want To Pretend/ 11.- Encouraging Words/ 12.-
All Things Must Pass/ 13.- You've Been Acting Strange/ 14.- As Long As I Got My
Baby/ 15.- All That I've Got (i'm Gonna Give It To You)
Vamos a ver zagales, aquí toca hasta el Tato. No faltan el
señor George Harrison y Eric Clapton. Ni Keith Richards (al bajo!) ni Ginger
Baker. Esto es un supergrupo o qué? Madre mía que lujo! Este es el segundo
disco de Preston para Apple Records y lo coproduce junto a Harrison quién cede
amablemente a Billy la canción “All thing must pass” y “My sweet lord", y
convence a Lennon para que se enrolle y Billy pueda cantar su “I've got a
feeling”. Esas tres versiones beatlelianas son francamente tremendas, tres
joyas de esas insuperables que no le van a la zaga a las originales, ese “I've
got a feeling” de Preston me tiene loco, qué moderno suena! qué canción! Pero
este disco no son sólo estas tres versiones, eso lo hace grande pero hay mucha
tela que cortar como en la extraordinaria “Right now” que abre el disco con su estribillo negrata de lujo que recuerda a Stevie como nunca, o la
soulera “Little girl” que es de traca, baladón de libro. Este comienzo me chifla y me remata con
“Use what you got” que tiene ese pianito de inicio y ese ritmo de pista de
baile sudoroso y sexi, con esos vientos finales en éxtasi. Oh! Que me excito!
Y qué decir de “Let the music play”? O del baladón que me ha robado el corazón
estos días, hablo de "The same thing again” y es que no hay mejor medicina para
el alma que esta canción. No me quiero hacer pesado, asi que no voy a ir
desgranando el disco canción a canción aunque debería pero es que con cada
escucha descubro algo nuevo y cambio de favorita. No quería dejarme en el
tintero la canción que da nombre al disco que es estupendísima e insaltable pero todo el
disco lo es para ser sincero, porque Billy Preston es muy grande y no sé porque
lo tenía yo tan abandonado.
Ohh! Tiene que ser muuuuuy grande este disco...a por él!!!
ResponderEliminarNo lo sabes bien, discazo!!!
ResponderEliminarYo intentaré tirar de Megaupload a ver si Internet se enrrolla como John prestando mandanga a Billy. Yo también soy del club de fistros que han visto a este señor en mil conciertos y discos tocando con los citados y más allá y ha pensado "Diantre, tengo que escuchar sus discos de una vez".
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