“Low country blues” ha resultado ser un artefacto cojonudísimo. La vuelta de Gregg Allman de la mano del aclamadísimo T Bone Burnett que últimamente se encuentra muy acertado en su faceta de productor no podía ser mejor. Sin duda será uno de los discos del año. Tiene mucha calidad, tiene buen gusto, buen hacer, buenas canciones y a un intérprete sobradísimo que con su voz engalana obras tradicionales del blues. Dos canciones tradicionales, nueve versiones y un tema de Allman conforman los doce temas de este gran disco, doce temas que saben a gloria y que están interpretados magistralmente con una elegancia y una clase que yo pensaba que se habían extinguido aunque Gregg se encarga de hacerme saber lo contrario.
Gregg Allman – “Low Country Blues” (2011): 1.- Floating Bridge (Sleepy John Estes)/ 2.- Little By Little (Junior Wells)/ 3.- Devil Got My Woman (Skip James)/ 4.- I Can’t Be Satisfied (Muddy Waters)/ 5.- Blind Man (Bobby Bland)/ 6.- Just Another Rider (Gregg Allman & Warren Haynes)/ 7.- Please Accept My Love (BB King)/ 8.- I Believe I’ll Go Back Home (Traditional)/ 9.- Tears Tears Tears (Amos Milburn)/ 10.- My Love is Your Love (Samuel Maghett)/ 11.- Checking On My Baby (Otis Rush)/ 12.- Rolling Stone (Traditional).
No busquéis en este disco ese rock sureño que caracterizó a los hermanísimos, aquí no hay de eso pero tampoco lo extrañaréis puesto que lo que aquí se ofrece es de traca. Lo curisoso del caso es que se grabó en menos de dos semanas, con un Gregg inspiradísimo moviéndose como pez en el agua en temas de blues añejo más bien reposaditos. Pero Gregg no está solo y además de T Bone Burnett encontramos a Dr. John (piano), Doyle Bramhall II (guitarra), Dennis Crouch (contrabajo) y Jay Bellerose (batería), es decir, sobran las palabras. Desde el primer tema (temazo) que no es otro que la versión de Sleepy John Estes “Floating bridge” a un marcianito como yo se le caen las bragas al suelo, se le salta la boina, joder, menuda cancionaca, y ya no quiero deciros como me siento al saborear “Little by little” de Junior Wells, Ah!, me derrito toa!. Todo el disco es de traca, es un no parar, ahí tenemos el blues a pelo de “Devil got my woman”, la magia de “I can´t be satisfied” o esa voz magistral, rasposa y algo soulera que aparece en la magnífica “Blind man”, y no sigo por no hacerme pesado. La clave del disco se encuentra en escucharlo de forma reposada, hacerlo con atención mientras se saborea un buen gintonic jugándonos la pasta en alguna partida nocturna de cartas. Vaya lujo!. Ya os digo que es un clásico instantáneo, uno de esos discos atemporales que de vez en cuando aparecen para dignificar un género y poner donde se merece al tiparraco que lleva las riendas pues como está muy de moda ahora decir, Gregg es el puto amo. Haceros con el disco, no os defraudará, más bien os llevará al huerto y os dará algún que otro revolcón. Discazo, discazo, discazo.
Un señor disco, le tengo en vinilo y trae dos temas extras del mismo nivel.Musica para gente con buen gusto. Ganas de verlo en el Azkena, practicamente voy a verle a el1
ResponderEliminarun abrazo
gran, gran disco. No un disco facil, sino lleno de matices, para disfrutar solo y tranquilamente. MUSICA con mayusculas.
ResponderEliminarun abrazo,
Muy bueno, de lo mejorcito del año y de su carera en solitario.
ResponderEliminarSaludos
Soberbio. Igual que Tsi no veo llegar la hora de verlo encima del escenario del AZKENA. Será mágico. Saludos.
ResponderEliminarSe trata de una enciclopedia sonora de la historia de la música americana ; magnífico ; desde ya un clásico ; soberbio .
ResponderEliminarSaludos.