Mierdacas al uso: In the name of the king (2007)

Bienvenidos a esta nueva sección cinematográfica llamada “Mierdacas al uso” donde como supongo que imagináis os hablaré de alguna película infumable, un auténtica tifa que por alguna extraña razón he comenzado a ver y ha sido parada en algún momento de su visionado. La condición de no haber podido acabar de ver el film debido a su cutrez es una premisa indispensable para elegir las películas. Muchos de mis amigos cercanos podrán pensar que comenzaré esta sección con ”Spiderman 3” ya que es sabido el calentón que me coge cada vez que tengo que hablar de esa abominable película o de sus absurdas actuaciones. Pero no, eso sería demasiado fácil, en esta sección vamos a ir descubriendo esos clásicos mierdosos actuales que van inundando las salas de cine y luego van a parar a nuestros televisores una vez tras otra con la intención de torturarnos y destruir nuestras neuronas. No confundir por favor con la sección “Kutrangas” pues en este caso aunque el film sí es cutre tiene un algo, un no sé qué, que lo hace mítico, puede que sea porque se creó a sabiendas de hacer un producto regulero y recreándose en ello, mientras que en “Mierdacas al uso” partimos de la idea que los creadores creen que han hecho el no va más y en realidad es una gran cagarada. Estamos?. Bien, pues comenzaremos con un film del 2007 llamado en la península “En el nombre del rey” que se puede ver en el videoclub gratuito de Ono (sólo faltaría que te hiciesen pagar por eso) al que llegué el sábado pasado sobre las tres de la mañana debido a mi archiconocido insomnio. Eso sí, a los veinte minutos paré el film antes de caer en un agradable coma.

SINOPSIS: La vida de un hombre muy trabajador, conocido simplemente como Farmer (Jason Statham), cambiará para siempre cuando una banda intrusa de Krugs (bestias animales esclavas de un malvado hechicero) arrase a su paso la tranquila localidad de Stonebridge, asesinando a su hijo y secuestrando a su mujer, Solana (Claire Forlani). Movido por el dolor, el pacífico campesino lidera a su mentor Norick (Ron Perlman) y a su cuñado Bastian (Will Sanderson) en busca del ejército Krug para liberar a Solana. Durante la invasión Krug de la campiña, Merick, el mago real, descubre el verdadero origen de su fuerza...

Para empezar, esta mierdaca está basada en un videojuego que responde al nombre de "Dungeon Siege", os suena???. Empezamos mal. Su director, Uwe Boll, ha realizado grandes obras del celuloide como “House of the dead”, “Alone in the dark I y II”, y “Far Cry”. Vamos, todo un cinéfilo. Debe ser el típico al que encargan todas las conversiones de los videojuegos. Menudo pringao. Pero luego sorprende como ha podido contar con tantas estrellas: Ron Pearlman, Will Sanderson, John Rhys-Davies, Leelee Sobieski, la Forlani, Burt Reynolds, Ray Liotta, y el prota Jason Statham. Todas estas estrellas son de segunda fila y venidas a menos claro, y es que Reynolds y Liotta dan una pena que ni os cuento, lo de Pearlman..... buff, no sé que cojones hace aquí, la Forlani conocida por aquel bodrio de “Joe Black” y los CSI's es la peor actriz que uno pueda imaginar a pesar de su camaleónica presencia, y esto no lo digo porque se arriesgue en sus interpretaciones, no, lo digo porque es difícil conocerla después de tantas operaciones estéticas. Statham siempre me ha dado asco, nunca llegará a nada, es un héroe de acción de tercera, regulero total que no llega al nivel de Chuck Norris, Steven Seagal o el mismísimo Dolfph Lundgren. Oooh! Qué horror. Pues bien toda la película es un refrito post-Lord of the rings en plan muchachada nui, si llegué hasta los 25 minutos es porque me imaginaba a los personajes hablando como el gañán. Los efectos especiales son malísimos, sólo falta Guzzest disfrazado de Orco con su albornoz y unas pantuflas peludas.... Son de un cutre inimaginable. Las secuencias de acción están oxidadas, los diálogos no hay por donde cogerlos y el humorcito que se gasta es de vergüenza ajena, a veces no sabes si tienes que reír o llorar, o si era un chiste o la cosa iba en serio. Este film huele mal, muy pero que muy mal.