Ron Sexsmith en Bikini

Ron Sexsmith es un cantautor canadiense de toma pan y moja que incomprensiblemente después de diez discos estupendos y preciosos sigue siendo un completo desconocido para la mayoría de personas de este mundo. Por suerte yo lo sigo ya desde hace mas de una década, así pues he podido conocer poco a poco su carrera, disfrutando y saboreando cada entrega que nos proporcionaba el bueno de Ron. Mucho tiempo llevaba esperando la visita de Ron Sexsmith a Barcelona, las pocas visitas que había realizado anteriormente me pillaron o por sorpresa como en la ocasión que hizo de telonero en un conciertazo a un Elvis Costello que se considera un gran admirador y seguidor de Sexsmith, o por su inclusión en megafestivales urbanitas que te hacen pagar un precio desorbitado por ver al tipo que te gusta obligándote a presenciar a una serie de grupos que te importan un pimiento. Pues bien, ayer fue una gran noche, Sexsmith presentaba su enorme disco “Exit strategy of the soul” en la sala Bikini de Barcelona a la que me acerqué tremendamente ilusionado aunque expectante puesto que sabía que los arreglos de viento de su disco no estarían presentes y no sabía muy bien el tratamiento que Ron le daría a sus canciones. Las dudas se dispersaron al segundo, Sexsmith se plantaba en el escenario guitarra acústica en mano respaldado únicamente por un contrabajo, la propuesta era simple, presentar las canciones desnudas, tal como su creador las había fabricado, quedando los temas mas tristes y melancólicos de lo que en él es habitual debido a los soberbios arreglos de los discos, un ejercicio difícil que le costó un arranque algo flojo, las dos primeras canciones quedaron algo sosas y la voz del canadiense tardó en calentarse, fue a la tercera, con “Brandy Alexander” de su último disco, cuando todo se colocó en su sitio y la magia de la música de Ron se apoderó de la sala. Alternó, acertadamente, sus nuevos temas con un repaso muy bien parido de su obra, sonaron desde “Secret Heart” de su Ron Sexsmith del 95 o “Strawberry blonde” de Other songs del 97, hasta “Former Glory”, “These days” o una maravillosa “Gold in them hills” al piano de Cobblestone runway del 2002. No se olvidó de las canciones de sus discos mas pop, de Retriever del 2004 sonaron “Imaginary friends”, “Not about lo lose”, la preciosa “Tomorrow in her eyes” o “Whatever it takes”. Y como no, sonaron “All in good times” o “Never give up” de Time being del 2006. Pero sin duda todos los presentes esperábamos escuchar los nuevos temas que dejaron una gran sensación y un regusto a calidad y buen hacer como pocos pueden presumir en estos tiempos, tal vez faltó alguna como “Thoughts and prayers” pero con “Brandy alexander”, “This is how i know”, “One last round”, “Poor helpless dreams” o “Music to my tears” entre otras ya podemos darnos por satisfechos, y a todo esto hay que añadir la maravillosa "Chased by love" con la que finalizó el concierto. Chapeau. La visita de Sexsmith me encantó, su voz, su música, la atmósfera que crea, su tono bromista que hizo que entonara el estribillo de “Eres tú” de Mocedades, su delgadez a pesar que el tipo parece siempre algo gordo en las fotos, vamos, no sé que tiene este canadiense que me engancha tanto, lo de ayer fue un gran concierto, sin grandes lujos, ni efectos, ni mil instrumentos, ni parafernalia innecesaria, ni poses de artistona, ni chuminadas que quieren camuflar la calidad de las canciones, en este caso las canciones son tan buenas que simplemente con una guitarra, un contrabajo y una voz singular son suficientes para dotarlas de una calidad envidiable, lo de ayer fue, sin duda, un ejercicio de buen hacer que será recordado durante mucho tiempo.