Trempera matinera: One Vision

“Trempera matinera: dícese de la reacción hormonal/físicosexual que siente un forrondoso extraterreste, algo enratonao y cartoniano, al escuchar una viejuna tonadilla nada más levantarse que suele dejarle totalmente picueto y en un estado gambitero inusual que le hará bailar en gallumbos sliperos como un poseso tunante”



ONE VISION: aunque a muchos os suene a rock de caldofrán para mí esto es un temazo se mire por donde se mire que parieron Freddie y compañía allá por 1985 y que salió editado en el álbum “A Kind Of Magic”, vinilo que por cierto lo tenía desgataico yo por aquella época de tanto ponerlo. La mayoría de canciones del disco aparecieron en la soundtrack de “Highlander”, film mítico que también habré visto tropecientas veces y que sinceramente ha envejecido muy malamente. En la película aparecían “A kind of magic”, “One year of love, “Princess of the universe”, “Gimme the prize”, “Who wants to live forever” (obviamente), y dos piecicas que no salen en el disco: la versión mercuriana de “New York New York” y ese peazo de tema que es “Hammer to fall” que curiosamente pertenecía a su disco anterior, el adorable pero algo regulero “The Works”. “One Vision” no aparecía en este film, pero sí en otro que reventó como los Inmortales la taquillas terrícolas, hablo de “Iron Eagle” en la que no salía Cruise (esto lo digo porque yo siempre me confundo) sino un tal Jason Gedrick que después de esto no hizo nada realmente apetecible salvo salir en “Born of the fourth July” esta vez con Tom (qué vueltas da la vida!). Ah! Que me voy por las ramas... Bien, al principio de la canción suenan unas voces distorsionadas que dicen algo así como “God works in Mysterious ways... mysterious ways”, y el final nos reserva esa vacilón “Fried chicken!” que no tiene nada que ver con la canción propiamente dicha pero sí con lo que solía cenar la banda en las sesiones de grabación. La canción termina, la toma es buena y Freddie grita "pollo frito! (a comer!)", qué cachondo!. Entre medio los riffs clásicos de Queen, uno detrás de otro, otros encima, otros debajo, por ahí vienen por allá van, ahora están aquí, ahora está allí, ahora están por todos puestos..., en una especie de orgía de riffs muy propia de la Reina. Particularmente además de rememorar antiguas andanzas y sensaciones "One vision" me da un subidón de la ostia, una memorable trempera matinera.