Ya ha llovido bastante desde que Quentin Tarantino firmó esa dupla cinematográfica acojonante que contenía “Reservoir Dogs” (1992) y “Pulp Fiction” (1994), en ambas películas sorprendía por un guión y unos diálogos magníficos, planos innovadores, violencia descacharrante, humor negro y unas bandas sonoras para tener muy en cuenta, además claro está de resucitar a estrellas en horas bajas. A partir de ese momento el tipo se endiosa y ya no hay quién le aguante. Hasta se cree actor!!!. Aparece en mil y un proyectos, se alía con personajes de dudosa categoría (como Robert Rodríguez) e intenta variar su fórmula perfecta cosa que sólo hace que baje su nivel y nos aburra profundamente como demostró en “Jackie Brown” (1997) y es que aquí trata de hacer lo mismo pero sin tanta gracia y menos violencia. El tipo va de cinéfilo y sigue con la manía de resucitar a una estrella (femenina en este caso) acabadísima. Resultado: Un pequeño tostón de casi tres horas. Quentin sabe que anda justito de ideas y se aparta de la dirección hasta la llegada de la sobrevaloradísima y en mi opinión infumable “Kill Bill” (2004) pero curiosamente la crítica le encumbra, gana más dinero que nunca, vende más politonos que nadie e intenta resucitar al pequeño saltamontes del olvido sin mucho éxito. Aquel film era un mejunje de estilos, una paja mental sin ninguna nueva idea propia, todo cogido de aquí y allá como si de un corta-pega se tratase. Bastante crecidito se alía con el amigo Robert y le sale una mierdaca llamada "Death Proof"(2007) para de seguidilla entregarnos este mismo año su nuevo proyecto: “Inglourious Bastards” en el que hace lo mismo de siempre pero con disfraces de nazi. Todo un desborde de creatividad ¿….?.
SINOPSIS: Segunda Guerra Mundial. Durante la ocupación alemana de Francia, Shosanna Dreyfus presencia la ejecución de su familia a manos del coronel nazi Hans Landa Shosanna consigue escapar y huye a París, donde se forja una nueva identidad como dueña y directora de un cine. En otro lugar de Europa, el teniente Aldo Raine organiza un grupo de soldados judíos para tomar represalias contra objetivos concretos. Conocidos por el enemigo como “The Basterds” los hombres de Raine se unen a la actriz alemana Bridget Von Hammersmark, una agente secreto que trabaja para los aliados, con el fin de llevar a cabo una misión que hará caer a los líderes del Tercer Reich. El destino quiere que todos se encuentren bajo la marquesina de un cine donde Shosanna espera para vengarse...
Es curioso que un film que comienza de una forma tan prometedora con la única cosa realmente salvable, un Christoph Waltz que borda al coronel nazi Landa, se vaya al garete por tantaraniadas, y es curioso que un film que se llame “Malditos bastardos” se olvide de los bastardos en el ochenta por ciento del metraje, les dé tan poca importancia, tan poco peso y tan poco interés en el film aunque la idea de presentar a cada bastardo era muy válida pero sólo lo hace con uno y te deja totalmente desangelado. Incluso la presentación de los bastardos recuerda demasiado a “Los doce del patíbulo”, pero claro, qué esperaba de un plagiador profesional?. El film no va de los bastardos, va de la venganza de la judía Shosanna (otra vez la dichosa venganza) contra los nazis que mataron a su familia, contra todos sí pero concretamente contra Landa. Si se hubiese centrado en esa historia, o en la de los bastardos y no hubiese hecho lo de siempre, es decir, un collage con episodios pues a lo mejor hubiese estado mejor. Además desaprovecha a todos esos actores,algunos grandes actores, y el metraje, en mi opinión, es demasiado largo y eso que le obligaron a recortar la película. Para mi gusto un film sólo sobre el nazi Landa hubiese sido descomunal pero ya se sabe que a Tarantino le va la serie b y lo cutre, sólo hay que ver la escena del “oso judío” con el bate, eso es Tarantino. No hablamos de una película, hablamos de ideas sueltas que el tipo corta y pega quedándole un producto resultón que por cierto esta basado en la película itlina de serie b de 1978 llamada "Aquel maldito tren blindado", en este caso a Tarantino le queda un film que está al nivel de Jackie Brown, es decir, va justito, justito.
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