looKING for ERIC (2009)

Realismo social...., joder, otra vez el puto Loach con la misma monserga. Eso es lo que pensé yo cuando me enteré que ya estaba disponible el nuevo film del afamado director británico quién posee una gran cantidad de películas buenas, algunas incluso notables pero carece de una excelente, esa es la verdad. Puede que esto se deba a la temática de sus films, puede que no, yo que sé, tal vez el tipo sea un regulero sin talento que sólo sabe hablar de un tema, el jodido tema relacionado siempre con el paro y la clase social baja inglesa. Pero alguna otra cosa digna de ser recordada tiene tampoco seamos ahora unos radicales del copón, y quitando unas pocas que dormirían a cualquiera aún estando hasta las cejas de éxtasis, podría incluso decir sin ruborizarme que me gustaron y bastante films como “Riff Raff” (91), “Raining stones” (93), “Ladybird Ladybird” (94), yo qué sé, “My name is Joe”..., bueno, podría nombrar todas porque la verdad ninguna película suya me parece mala pero como digo siempre se revuelca sobre la misma mierda. Así que me tomé la noticia de su nuevo film con un “ah, vale” hasta que leí que en el proyecto, además de actor como productor, estaba metido uno de mis ídolos futbolísticos, un tal Eric Cantona. Y enseguida entendí que este nuevo proyecto llevase por título “looKING for ERIC”, luego leí alguna que otra crítica que hablaba de un cambio de registro hacia la comedia aunque no me lo creí mucho, y un montón de gilipolladas que suelen poner los críticos de cine para rellenar su espacio, y es que, a veces pienso que utilizan palabras que ni ellos saben su significado para darse importancia, como si por saber alguna palabra poco usual tengas que darles la razón. El trabajo es fácil: es mala, regular, buena, notable, etc..., no sé, digo yo que para eso no hay que tener un Planeta.

SINOPSIS: Eric Bishop, un cartero de Manchester fanático del fútbol, atraviesa una dura crisis vital. Delante de sus narices sus dos hijos hacen trapicheos de todo tipo, su hija le reprocha que no sepa estar a la altura y en general su vida sentimental es desastrosa. Ni siquiera el buen ambiente que vive en el trabajo consigue levantarle el ánimo. Inesperadamente, una tarde se aparece ante él, en su propia casa, Eric Cantona, su mayor ídolo de siempre y la ex-estrella francesa de su equipo, el Manchester United. Eric consigue entablar amistad con el ex-futbolista, quien comprendiendo perfectamente su situación, le ayudará con consejos a retomar el control de su vida.

No es nuevo el interés de Loach por el deporte rey, el deporte del pueblo, claro, el fútbol, coño. No es nueva tampoco la historia de un hombre maduro divorciado con un trabajo de mierda envuelto en algún problema difícil de solventar. No es nueva la presencia de jóvenes ingleses descarriados, y es que en el film hay muy poquitas cosas nuevas. Bueno, hay una importante, la presencia de Cantona que se aparece al protagonista como Bogart se aparecía a Allen en “Sueños de un seductor”, así que muy original tampoco es que sea el film. La película empieza bien, todo está en su sitio (coño, es Loach), todo es muy natural, muy normal, incluso, sí, te saca alguna que otra sonrisilla, pero a medida que el film avanza (son casi dos horas de psicoanálisis con Cantona) la chispa se va perdiendo para acabar siendo un film simpático y poco más. No hay nada más que rascar que lo que vemos, no hay crítica social profunda, no hay golpes de humor tremendos ni tampoco dramáticos, no hay un desenlace ingenioso, todo es obvio en el film, todo es como siempre, es Loach, para bien y para mal.