Ayer mismo di carpetazo a otro año como lector, un año donde
he leído mucho, muy variado y bueno, pero para acabar me dejé los fuegos
artificiales. La quinta entrega de “Canción de hielo y fuego”. Qué disfrute, qué
despiporre! Y eso que el cabronazo de George RR Martin nos había hecho esperar
para dicha entrega desde el 2005, bueno, para algunos más, pues eso de comprar
la edición de lujo que vale un riñón no es mi opción, al final me dejaron la
edición media, la cutre de dos volúmenes, yo esperaba la de bolsillo (de tres
tomos) pero tardan mucho en sacarla y ya no podía esperar más. Una cosa queda
clara en este libro. El enano y la dragona son los putos amos, los protagonistas
absolutos de una de las más grandes historias fantásticas jamás contadas, me
atrevo a decir sin miedo alguno a lo que me vaya a pasar (me va a caer la del
pulpo!) que la saga es infinitamente superior a los Hobbits y los Anillos. Sí,
señor, con dos cojones. Y este quinto acto ha conseguido reactivar mis ansias
por saber que les pasará a los personajes que la protagonizan sabiendo de
antemano que Martin no tiene compasión alguna con algunos de los personajes más
queridos de los seguidores y si se los tiene que pasar por la piedra pues lo
hace y a uno se le queda cara de idiota pensado “no puede ser? No?”, luego buscas
el nombre del personaje en los títulos de los capítulos futuros pero no aparece,
habrá muerto? O utilizará la vieja táctica de cambiarle el nombre y tenernos en
ascuas hasta el siguiente libro? Os digo de antemano que en esta ocasión hay
una muerte (o presunta muerte) de esas que hacen pupita, de esas que harán
correr ríos de lágrimas, todo sea que al final no pase lo que se supone que
pasa aunque con Ned Stark también albergábamos esperanzas y sí, acabo sin
cabeza. De todas maneras uno de mis favoritos no sale en el libro. Meñique!,
no, no sale. Le nombran de pasada pero no sale. Martin liga mucho
mejor la trama de la historia, mejor que el libro anterior que parecía un nuevo
comienzo, en esta ocasión se centra básicamente en Daenerys y sus dragones, en
todos los pretendientes que quieren casarse con ella, por ella y por sus
cachorritos, casi nada del “trono de hierro” y un mucho del Muro. Así que
cojonudo no? Bueno, no os doy más el coñazo, puede que algunos os resulte un
rollo esta saga o que prefiráis ver la serie o que directamente os importe un
pimiento la lectura pero qué le vamos a hacer. Recomiendo la saga de principio
a fin, antes de que comience la tercera temporada televisiva pues dicha
temporada mezclará cosas del libro tres y cuatro que pasan temporalmente casi a
la vez, así que avisados quedáis, yo esperaré a que Martin se decida a entregar
el sexto volumen que llevará el nombre de “Vientos de Invierno” y espero que no tarde seis años. Nada más. Valar Morghulis.
Que ganas, pero creo me esperare a tener tiempo suficiente para atacarlo con calma, quiero releer el 3 y el 4.. Mis debilidades son la madre de los dragones , el mediohombre y el bastardo. El ninno lobo tambien, pero menos.
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