Clásicos nikochianos: SOME GIRLS (1978)

Entre 1968 con “Beggars Banquet”a 1978 con “Some Girls”, los Stones realizan no sólo sus mejores trabajos sino también los mejores trabajos por calidad que un grupo pueda editar en la historia, una colección discos únicos e irrepetibles que pusieron a los Stones en la cima del rock, como seguramente la mejor banda de rock que jamás ha existido, sufriendo cambios de formación, y que cambios, perdieron por el camino a Brian Jones, y a Mick Taylor, y ganaron a Ron Wood en el 77, por tanto el disco que nos ocupa, el maravilloso “Some Girls” del 78 supone el fin de una década prodigiosa, y el, digamos, primer disco entero con Ron Wood. El disco es espectacular desde el primer momento, desde su portada, y su edición, el vinilo es precioso y cachondo, realmente fantástico. Abre con una increíble “Miss You” ritmos modernos para los Stones mezclando rock y baile, y es que los tiempos están cambiando incluso para sus satánicas majestades, es una obra maestra que perdurará para siempre en el tiempo y que en directo triplica su efecto demoledor, le sigue el primer rock’n’roll del disco, y es que este disco está lleno de rock, “When the whip comes down” es rock sucio made in Stone. Una versión, maravillosa, de los Temptations para continuar “Just my imagination”, y luego la estupenda “Some Girls”una de las cimas del disco, no se puede decir nada sólo a escuchar y a disfrutar, perfecta de cabo a rabo, y cierra lo que sería la cara A, otro rock de aúpa “Lies” una pequeña obra maestra que nunca entrará en un recopilatorio pero que te hace saltar y bailar como sólo te pueden hacer mover el esqueleto los Stones. La cara b, empieza con una devastadora canción country “Far away eyes” para seguir con una autocrítica enmascarada en “Respectable” una canción sencillamente genial, otro rock, otra gran canción y es que este disco está llena de buenas canciones, la siguiente es una sucia y grasienta canción de Keith “Before the make me run”, su voz única y su guitarra también única hacen que en tres minutos se ponga a deconstruir y construir el rock, genial. Después nos llevan al huerto con una canción espeluznante, “Beast of Burden”, preciosa, la voz de Jagger te seduce como nunca, y terminamos con la orgásmica “Shattered” que te deja extasiado y agotado al finalizar el disco. Nuevos tiempos corren para los Stones, pero la misma esencia, con “Some Girls” acaban esa década mágica, nos enseñan su último gran disco, una obra maestra, un disco que tal vez ha pasado injustamente de puntillas debido a sus obras magnas de finales de los sesenta y principios de los setenta, pero al fin y al cabo un clásico, un clásico nikochiano.