Dylan, Dylan, Dylan.... and Dylan
Para acabar dignamente la semana dylanesca propongo dos actividades estupendísimas además claro del ejercicio que supone y que estoy poniendo en práctica de escuchar por orden cronológico toda su discografía completa cosa que me está llevando toda la semanita. En primer lugar es haceros con la biografía sobre Bob de Howard Sounes si es que no la tenéis ya. Yo la leí hace unos añitos y esta semana he recuperado algún que otro capítulo coincidiendo con la escucha de alguno de sus discos. Tengo muy buen recuerdo de esa biografía, tal vez de las mejores que he leído, puede que sea superada por el “Life” de Keith pero es que esa es en primerísima persona y nada menos que se trata de esa persona, el puto Keith. En segundo lugar es visionar por enésima vez el film sobre Dylan que realizó Todd Haynes en 2007 llamado “I'm not there” creo que sólo apta para acérrimos seguidores de Bob donde se nos ofrecían perfiles diferentes del artista utilizando también a varios actores diferentes que interpretaban a personajes dylanescos llevándose la palma la actuación espectacular de Cate Blanchet. La única pega es que como biografía ni fú ni fá aunque como artefacto visual no hay quién le tosa, es exquisito. Por eso no dudo en recomendar la lectura de la obra de Sounes que tiene más chicha de la que uno pueda imaginar a priori. Dylan es tal vez el músico más importante del siglo pasado por delante de cualquier otro, y esto lo digo sin ser uno de mis diez artistas predilectos, pero desde luego no seré yo quién discuta su calidad, su importancia y su influencia. Es un personaje difícil, arisco, incluso a veces algo aburrido y distante pero es que hablamos de un genio y los genios son así, raros. Yo sigo a lo mío, escuchando su magnífica obra de manera cronológica, lo malo o lo bueno según se mire es que me he quedado atrapado en 1983 con su “Infidels” y ese Jokerman que me sabe a gloria, simplemente estamos ante una fantástica canción, otra más de Dylan, y hay tantas... Tal vez debería ir pensando en cambiar mi nikotop de hace unos días, me cago en diez, qué difícil es escoger 10 discos de Dylan! Ah! Se me olvidaba, lo del “Bootleg series” es el acabose definitivo no?
Nunca me sedujo I'm Not There, es como el Control de Joy Division, funciona como un lustroso videoclip, si, por el contrario, me quedo con el nombre de este autor y este libro, tiene buena pinta.
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