Clásicos nikochianos: LET IT BLEED (1969)

En diciembre de 1969 y como si fueran los reyes magos los Rolling Stones decidieron traernos en vez de carbón un insuperable álbum, “Let It Bleed”, disco que seguía la estela del maravilloso Beggars Banquet justo del año anterior, y primero que se grababa sin el fallecido Brian Jones aunque aparece en algún corte del disco, es también la primera aparición de Mick Taylor, por tanto corrían nuevos tiempos para los Stones donde muerto Jones, Jagger & Richards ocuparon el liderato del grupo. El disco comienza con una de las diez mejores canciones nikochianas de todos los tiempos, “Gimme Shelter”, en ella cabe violencia, guerra, asesinato, violación, dura crítica antibelicista, puro hippismo en el final del hippismo, absolutamente genial y eterna. Luego llega una versión, un temazo de Robert Johnson, un blues desgarrado, triste y enamoradizo, que estrofa final, madre mía, eso es blues, y como canta morritos, insuperable si contamos que el muchacho no es negro, a continuación sonido de claxon, ruido de bar, ambiente a sudor, a sexo, a carretera, violines por aquí y la voz de Keith por allá que se te queda grabada en la cocorota, esa segunda voz es la mejor segunda voz del rock de todos los tiempos, “Country Honk” que luego fue con algunos arreglos “Honky Tonk Woman” se convierte en el éxito inesperado del disco, llevamos tres, y las tres son pura dinamita, y es que mozicos, estamos delante del mejor grupo de todos los tiempos, amén. Siguen con el rock con “Live With Me” un rock stoniano, con una letra desvergonzada y cachonda, con un riff impresionante con el acompañamiento del saxo indomable de Bobby Keys, i love rock!, la canción que lleva el nombre del disco y que cerraba la cara A sigue con el espectáculo, “Let It Bleed” que proporciona un poco de calma, un respiro, pero un respiro desvergonzado con alusiones al sexo y a las drogas, como no. La cara b comenzaba con el temazo de larga duración “Midnight Rambler”, guitarras espeluznantes, ritmos psicópatas inspirados en el estrangulador de Boston , espectacular sobretodo en directo, excelente. Luego llega el momento de Keith “You’ve Got The Silver” me encanta esta canción, me seduce, me enamora, a pesar de esa voz tan rota, tan apurada, está llena de magia. Después de todo esto llega un extraño tema donde Jagger se desmelena, “Monkey Man” tiene esas guitarras tan stonianas, ese ritmo tan decadente, ese riff tan de Richards y ese final con el pianito, y esos gritos de Jagger, y es que hicieran lo que hicieran estaban en estado de gracia. El final está reservado para una preciosa canción, donde se escucha una apertura eclesiástica que canta un auténtico coro, cuando este finaliza la entrada, la guitarra de Keith te arrastra y te lleva directamente al sermón, lleno por otro lado de alusiones a drogas y demás cositas, pero que tiene un mensaje claro y conciso, no puedes conseguir siempre lo que quieres, auque parecía que los Rolling Stones en esa época conseguían todo lo que se propusieran y mas, al menos queriendo o sin querer les salió un disco redondo, una obra maestra, uno de los mejores veinte discos de todos los tiempos, un disco eterno, todo un clásico, un clásico nikochiano.

3 comentarios:

  1. Asi me gusta. Arriesgando en tus recomendaciones. El tercer mejor disco de los estones...casi ná. ¿Qué será lo siguiente? ... ¿el "Rubber Soul"?, ¿el "Born to Run"? La duda nos corroe...

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  2. No recomiemdo, santifico, cualquier persona que presuma de escuchar música debe tener los clásicos nikochianos, de eso se trata, imprescindible,s únicos, y grandes, discos para llvearte a una isla desierta, y ten seguro que de Pearl Jam en esta sección nunca encontrarás nada.

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  3. ...y de los güait estraips?

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