Hijo
de Uganda y negro como el carbón. Pelo afro y un gusto musical soulero de
cojones. Inglés de adopción, crece en Muswell Hill cuna de los Davies. Con solo
24 añitos y un par de Ep’s el amigo Michael Kiwanuka encandila a la crítica
londinense y gana uno de esos premios que te colocan en el candelero y te hacen
vender como churros, luego saca al mercado su Lp “Home again” y ya tiene todo
el pescado vendido, además si ese pescado es de primera pues mejor que mejor.
Kiwanuka no aporta nada nuevo, ni falta que hace, no es moderno, ni retro, ni
nada de nada. No lo etiquetemos que somos mucho de etiquetar!!!, que se sube al
carro del nuevo soul? No! Esto de nuevo soul tiene poco. Es soul, soul de toda
la vida. De orfebrería, con unas gotas de folk-blues, una pizca de africanismo,
y una voz seductora que te lleva con facilidad al huerto. Esto puede ser un
factor a su favor o puede volverse en su contra, más aún si la promoción ha
sido desmedida puede llevarnos a estar con la mosca detrás de la oreja pero
sólo al escuchar el primer corte del álbum nos dejamos de gilipolleces, de esto
me suena, esto tampoco es para tanto, y nos dejamos llevar por unos arreglos
muy Moondance, muy Van the Man, y a disfrutar se ha dicho que esto es bonico
del to.
Michael Kiwanuka – “Home Again” (2012): 01.- Tell Me A Tale/ 02.- I’m Getting
Ready/ 03.- I’ll Get Along/ 04.- Rest/ 05.- Home Again/ 06.- Bones/ 07.- Always
Waiting/ 08.- I Won’t Lie/ 09.- Any Day Will Do Fine/ 10.- Worry Walks Beside
Me.
Una flauta y unos compases a lo Moondance abren el disco de
forma magistral y mágica con “Tell me a tale”. Las comparaciones y la
referencia está clara y no hace falta comentar nada pero en realidad el disco a
cada corte se va alejando de esa comparación. La clave está en el productor de
esta belleza de disco, el señor Ethan Johns que entre otros pájaros ha
trabajado con Brendan Benson, Laura Marling, Rufus, Ryan Adams, The Jayhawks, Kings
of Leon o el maravilloso (que es una debilidad personal), espectacular y poco
valorado Ray Lamontagne (canela fina, nens). Pues bien, la mano de Ethan Jones
se nota y mucho. Ya sé, sí, ya sé, que esto de hablar del productor… pero se nota y más aún en un disco debut. Kiwanuka por eso no es manco y talento tiene
un rato. Seguimos con el disco pues no te lo acabas de lo bonito que es. “I´m
getting Ready” es un caramelito, muy Lamontagne sí señor, y luego tenemos esa
preciosidad que se te mete en la cabeza y no te abandona que es “I’ll get alone”.
Un hit, un pelotazo, un lujo inesperado. Una canción con gancho, que ya por sí
sola nos hace comprar un disco. Podría pasarme mucho rato hablando de las canciones
pero no lo haré, lo mejor es que os hagáis con el disco, os relajéis, os dejéis
llevar… , y ya me diréis. Ojo! Que “Home again” es buena de cojones, con ese
toque de africanismo y “Bones”, que es una de mis favoritas, ni os cuento!, qué
clase! De lo que queda destaco por encima del resto esa joya folk llamada “Always
waiting” que me pone el bello de punta y el cierre con “Worry walks beside me”.
Y nada más, vale que Kiwanuka no ha inventado la pólvora pero su disco puede
hacerte explotar el corazón y convertir tu alma en cenizas. Un discarro, una
maravilla, una preciosidad que ha sonado y sonará en el hogar nikochiano
tropecientas veces.
Tambien suena en mi planeta, llevo una temporada muy negroide!Aunque siempre hay sitio para diferentes sonidos.Este Hombre tiene un futuro muy prometedor.
ResponderEliminarun abrazo
Tsi/Jesse
Pues si, hace días que yo también estoy enganchado a este disco. Futuro prometedor el de M.Kiwanuka, si señor.
ResponderEliminarUn abrazo.
Todo el mundo habla maravillas de este disco, incluido mi hermano, haber si me pongo a ello de una p... vez.
ResponderEliminarSaludos.
Una maravilla.
ResponderEliminarAcabo de conocerlo ahora, rastreando en tu blog. Guardas cosas maravillosas, amigo.
Un buen regalo para el día de Reyes